Al entrar en la casa vi al tío Mike esperándonos en la escalera -Bella qué bueno que ya llegaron- dijo el tío Mike en cuanto nos vio.- ¿donde han estado? Las he extrañado mucho- continuo con voz entusiasta. -Fuimos al centro comercial tío- dije con voz seria - Espero que se hallan divertido, y espero que vengan felices porque tengo que presentarles a alguien- dijo el tío Mike mientras nos tomaba a ambas de las manos y nos guiaba al segundo piso. -Tío Mike suéltanos somos perfectamente capaces de caminar solas- le dije casi gritando mientras luchaba por liberar mi mano al igual que mi hermana. -No sean necias- nos grito Al llegar al segundo piso nos llevo a la habitación de mi hermana, pero al llegar vimos a un tipo recostado en su cama, mirando la televisión. La habitación estaba desordenada, sucia, y toda su música estaba en el piso. Vi que sus ojos se inundaron de lágrimas, escondió su rostro entre sus manos y empezó a llorar - Que es lo que está pasando aquí Mike- exigí saber mientras abrazaba a mi hermana y fulminaba al tipo con la mirada - Que le has hecho a mi habitación- dijo carito mientras levantaba el rostro- mis cosas, mi ropa, mi música, que has hecho- dijo mientras lloraba y volvía a agachar el rostro - Que maleducadas son niñas- nos reprendió el tío Mike,- no ven que hay una visita, no, no una visita, un huésped- dijo mientras señalaba al tipo. - ¿Un qué????- dijimos al mismo tiempo creyendo que habíamos escuchado mal. En ese momento el tipo noto nuestra presencia, se levanto perezosamente de la cama y camino hacia nosotras. -Les quiero presentar a Laurent, mi mejor amigo-dijo él con voz alegre- se acaba de mudar y no tiene a donde ir, así que se quedara con nosotros el tiempo que sea necesario y se quedara en esta habitación,- dijo señalando la habitación. - ¿Y en donde se supone que me quedare yo?- dijo carito mas para mí que para el tío Mike, - Que suerte que preguntas Carito- dijo el tío Mike con aire de suficiencia- ya he pensado en eso, y tu puedes quedarte conmigo, o si quieres tu Bella querida- dijo mirándome- puedes quedarte conmigo y ceder tu habitación a tu hermana. Me quede petrificada, sin saber que responder, no quería por nada del mundo quedarme en la misma habitación que el tío Mike, me daba repugnancia el solo pensarlo, pero por otro lado no podía arriesgar a mi hermana, y recordé que me prometí a mi misma protegerla de lo que fuera. Pero antes de que yo pudiera decir que me quedaría con él, mi hermana levanto el rostro y se planto enfrente del tío Mike con hielo en su mirada. -De ninguna manera Mike- era la primera vez que ella le decía así- no nos quedaremos contigo, ni mi hermana ni yo estamos dispuestas a compartir la habitación con un hombre y mucho menos con alguien como tú. En ese momento el tío Mike se puso morado de la ira, pero después se relajo - No me respondas así, estaba ofreciendo mi ayuda, pues en la habitación no hay otra cosa, ¿es que acaso tienen otra opción sobrina? – le dijo el tío Mike a mi hermana con tono de burla - Claro que si tenemos otra opción- le dije al tío Mike casi gritando- ella se quedara conmigo. - Bueno, como quieran no voy a insistir pero luego no vengan a quejarse porque no las ayudare- dijo él mientras nos daba la espalda y bajaba las escaleras. Cuando entro en la cocina ambas fulminamos con la mirada Laurent, el “huésped” que era alto y moreno, tenía el cabello largo y negro, y un desagradable aspecto pues tenía pinta de no ser muy diferente al tío Mike , ahora comprendíamos porque era su mejor amigo. - ¿Me permite sacar mis cosas por favor?- le dijo mi hermana al tipo mientras lo miraba con recelo. - Por supuesto, saca tus cosas, no puedo creer que te guste la música clásica Carito- dijo el tipo con toda confianza - Carolina- lo corrigió ella con tono molesto- y si, me gusta la música clásica es hermosa y si a Ud. no le gusta pues es su problema. Carito salió de la habitación con todas sus cosas y se dirigió a la mía, yo la seguí mientras el tipo nos seguía a ambas con la mirada. Cuando entramos en la habitación ayude a mi hermana a organizar sus cosas, no tuvimos problema en el espacio pues la habitación era grande y habían sobrado muchos cajones y mucho espacio en el armario Mi hermana y yo nos sentamos en la cama y nos pusimos a escuchar música -Las cosas se complicaron Bella- dijo Carito mientras escuchábamos Debussy -Lo sé Carito, lo sé, pero no te preocupes, saldremos de esta- le prometí Ella me sonrió y continuamos escuchando música hasta que ella se durmió, el reloj marcaba las 11:30 pm, así que decidí que era hora de ir a dormir, fue cuando soñé con los hermosos ojos dorados de Edward, debía admitirlo, a pesar de haberlo visto solo una vez, me había enamorado de él.