6. El vestido negro (+18)

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La alarma de mi móvil empezó a sonar, fui hasta la mesilla para apagarlo. Sentía como Taylor venía a mí todavía estaba dormida, al encontrarme me abrazó y dió un suspiro.

— Bella durmiente, despierta — dije dándole besos en la cara, ella sonreía mientras se quejaba.

— Me duele todo — dijo como pudo tenía la voz hecha mierda, mientras yo me reía. — No tiene gracia — me miró mal.

— Lo siento linda, ya paro — dije tranquilizandome, pero despues seguía con la risa, hasta que ella me miró como advertencia.

— No tengo ganas de nada, me duele todo — dijo poniéndose de pie, pero sus piernas fallaron haciendo que ella caiga al verla caer fui hacía ella.

— ¡Tay!... ¿estás bien? — dije mirándola ella asintió.

— Me has dejado fastidiada —sonrió.

— Tú me dejaste hacerlo —encogí mis hombros. Ella se apoyo en mí mientras yo la agarraba de la cintura. Temblaba todavía sus piernas entonces la tuve que llevar a los sitios que ella quería ir.

— Estás segura que quieres ir — ella asintió, yo la miraba pero ella insistía.

— Mi vida puedo aguantar, tranquila — me dió un beso en la mejilla para después abrazarme.

Sonó de nuevo una alarma de mi móvil aquella avisaba que teníamos que irnos ya. Fuimos a su armario la dejé ahí para que se cambiase, se puso un hermoso vestido negro, me quedé perpleja al verla y me hice un montón de imaginaciones y momentos en mi cabeza como desvestirla y hacerla completamente mía.

Cuando ya estaba ofrecí mi mano para que ella se agarrase de mí, antes de salir había mucho ruido entonces nos alertamos de aquello. Salimos por el garaje ya que dejé ahí mi coche.

Cuando ella entró en el coche se acomodó ya que se quejaba por el dolor.

— linda aguanta por dios — dije riendo a lo cual ella me pegó en el brazo — no me pegues — dije haciendo un puchero, haciendo que ella riera y así dándome un beso en la mejilla.

—Perdón, perdóname mi vida — dijo todavía riendo. ¿Ya dije que su risa es la mejor?

Fuimos en camino para ir donde entrenaba antes de eso fuimos a desayunar en aquel sitio de ayer sin duda era increíble.

Al llegar al lugar donde entreno veía como ella ya estaba yendo hacía los familiares de mis compañeras, pero me fijé en alguien más o dios estaba mi exnovia.

— Vamos cariño — me miró Taylor mientras agarraba la mochila. Entonces ahí la agarré de la mano para llevarla donde estaban.

— ¿Maya...? — dijo alguien.

— Hola Alicia — dije sonriéndole ella se acercó pero yo me alejé y le extendí la mano.

— ¿y tú eres? — preguntó a Alicia refiriéndose a Taylor.

— Su novia ¿no lo ves? —dijo con una sonrisa todavía su voz estaba bastante mal pero el comentario no me lo esperaba. Alicia la miró mal pero tampoco Taylor tenía buena cara.

— Bueno, es bueno verte de nuevo Alicia — me despedí y volteé a ver a Taylor — yo me tengo que ir a entrenar cariño — dije mientras le daba un beso en su cabeza. Ella me sonrió e hizo que me acerque a ella enrollándola su cintura con mis brazos.

— No te vas a salvar — dijo enredando sus brazos en mi cuello dando un suave beso en la comisura de mis labios — Entrena bien, te esperaré aquí — dijo separándose para mirarme a los ojos.

La mejor amiga de mi hermana - Taylor Swift y tú (G!P)  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora