Cartas [Gaminet]

~7~

"Te considero el amor de mi vida."

—Lo siento Fremi... —dijo Gaming mientras borraba rápidamente lo que había escrito en su teclado, no sentía que fuera un momento para bromear de eso y tampoco tenía la suficiente valentía para enviarlo.

"¡Por supuesto Fremi! ¿por qué no lo serías?"

Mando eso en cambio y esperó pacientemente una respuesta de Freminet.

Que nunca llegó.

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"¿Que le habrá pasado...?"

Eso era lo único que había en la mente de Gaming mientras llegaba a la escuela el lunes, por primera vez se había levantado más antes de lo usual, supuestamente era para llegar a estudiar un poco con sus amigos pero en realidad quería ver rápido a Freminet y preguntarle que le sucedió.
Cuando entró a la escuela y llegaba a donde se encontraba su salón pudo ver a Freminet tratando de abrir la puerta.

—¡Freminet!

—¡Ah! —Freminet pego un pequeño grito y salto en su lugar, volteó a ver rápidamente quien lo había llamado—. Ah... Gaming... —dijo en voz baja un poco relajado de que fuera el y no algún compañero molesto.

—¿Esta con llave?

—Eso parece... —respondió Freminet mientras soltaba el picaporte de la puerta y dirigia su mirada a Gaming—. Quería entrar para sentarme a estudiar tranquilo en mi lugar pero... ¿Q-Que haces en el suelo?

—No queda de otra ¿no?, debería estar limpio, es lunes y somos como los primeros en llegar —dijo Gaming terminando de caer al suelo y sentándose con las piernas cruzadas.

—A-Ah... sí... seguro que sí.

Freminet terminó de hablar y sentó a lado de Gaming, el chico de cabello castaño ya habia abierto su mochila para buscar sus apuntes y cuaderno de estudio, Freminet podía decir por su expresión que quería enseñarle algo de ahí...
Gaming abrió su cuaderno y buscó rápidamente las hojas donde tenía su resumen del tema hecho.

—¡Mira! ¡esta vez me prepare bien! —habló Gaming emocionado mientras sacaba el resumen de su cuaderno y se lo enseñaba a Freminet.

—A-Ahh... ¿en serio? que bueno eso... —dijo Freminet un poco nervioso mientras tomaba las hojas que Gaming le estaba ofreciendo, le echo un ojo rápido y se las devolvió en la mano al chico—. Están bien...

—Genial...

Algo le estaba sucediendo a Freminet, y Gaming lo sabía, aunque tranquilamente su actitud reservada podía deberse a que eran las siete y media de la mañana de un lunes y tenían un examen de historia a primera hora... pero el chico no creía que fuera solo eso, aún estaba en su cabeza los mensajes de ayer.
Que Freminet se sintiera así... ¿había sido por su culpa? no hablaron por una semana entera, no mucho más que saludarse, cuando tenía algún momento libre esos tipos que se hacían llamar sus amigos lo arrastraban con el y cada vez que sacaba su teléfono para poder enviarle algo a Freminet, los chicos empezaban a molestarlo con que le dejara de hablar o se aprovechará de él por su buena situación económica... tal vez Freminet sintió que Gaming solo le habló por alguna apuesta y por eso estaba actuando de esa forma... o en los peores de los casos, descubrió que el de las cartas era él. Esperaba que no, de todas formas Gaming se va a aferrar a la idea que más le calma.

—Oye... lo siento.

Habló Gaming rompiendo el pequeño silencio que se había formado entre ambos, había tomado el coraje para hablar pero no para mirarle a la cara a Freminet.