Siempre Tuyo, Enzo enzo x matias

Calidez

Matias

Sentí sus brazos rodearme con cierta calidez que sentía necesaria, no me despegué de él, por lo contrario lo abracé de vuelta dejándome guiar por el confort poniendo mi cabeza en el espacio que su cuello moldeaba. Nos quedamos en esa posición por unos minutos y mis lágrimas amenazaban con caerse.

Después de despegarnos me miró a los ojos y veía que estaban llenos de compasión la cual no comprendía por lo que pregunté nuevamente.

- ¿Qué haces aquí?

-Estaba preocupado

-¿Por qué?

-Porque te desmayaste en mis brazos - me replicó un poco enojado.

-Perdón no me acuerdo del todo

Enzo estaba visiblemente angustiado e hesitaba un poco.

-¿Qué pasó?- me dijo casi inaudible

-Nada

-No me mientas, no nací ayer Matías -sus ojos denotaban tristeza y un poco de rabia pero no podía decirle, no tenía la valentía.

Aunque haya conocido a Enzo hace poco sentía que era la única persona en la cual podía confiar y aún así sabía que no podía decir nada, por el bien mayor.

-Estoy bien Enzo, solo es el estrés.

El mayor que sabía que mentía pero no podía presionarlo, si Matías no quería decirlo no lo iba a forzar, pero sabía que no debía dejarlo solo.

-Okey- suspiró tratando de sonar convencido- Apuesto a que no has comido, siéntate que nos pido un delivery.

-No es necesario-el menor trata de discrepar pero Enzo no lo deja.

-Tu una vez me cuidaste a mi; ahora es mi turno - dijo el mayor determinante.

Esas palabras me fueron suficiente para derretir mi corazón por más empalagoso que sonara. Quería tener a Enzo en mi vida, de eso estaba seguro.

El se quedó el resto de la noche acompañándome sin decir una palabra. Después de comer vimos un canal en la televisión, no podía dejar de pensar en el encuentro que tuve con Dante, no estaba preparado para verlo de nuevo. Trataba de contener las lágrimas para que Enzo, quien estaba a lado mio, no las notara.

Puedo decir que lo intenté sin éxito ya que a los pocos segundos estaba llorando desconsoladamente, Enzo no me dijo nada, solo se acerco y me rodeo en sus brazos mientras sollozaba. A los pocos minutos terminé dormido en su regazo.

Narrador Omnisciente

El mayor cargó a Matias quien estaba profundamente dormido, lo llevó a la cama y lo cobijó para que no pasase frío en la noche. Le dio un beso casto en la frente antes de sentarse nuevamente en el sofá a revisar sus mensajes. Tenia algunos de Esteban preguntando en donde estaba, esos decidió contestarlos más tarde.

Sabía que Matias necesitaba apoyo y dudaba con que él fuese lo suficiente para él; decidió contactar a su amigo Fran quien con suerte estaba despierto. Le dijo lo del ataque de pánico y el desmayo; del otro lado de la línea se escuchaba al rubio muy preocupado y prometió ir en la mañana para acompañarlo en el desayuno.

Antes de irse del apartamento abrió la puerta de su habitación y se quedó mirando su respiración que ahora era calmada a diferencia de horas antes. Al salir por la puerta le dejó una nota.

A la Mañana Siguiente

Despierta Matuu - escucho a alguien gritarme en el oído

Fran se encontraba con una almohada en su mano a punto de tirársela en la cara.

Que haces?

Pues nada, dándole la mano a un amigo - dice Francisco entre risas - aunque no de la manera en que piensas.

Viré los ojos y me levanté de la cama.

-Alístate nos vamos a desayunar y te quiero llevar a algún lugar, Felipe nos vera alla - dice el alto mirándolo desde la puerta

-No estoy de humor hoy Fran- digo mientras bostezo - quiero quedarme aqui todo el dia.

Sentía que mis ojos iban a explotar en cualquier momento.

Fran se dirige hacia mi y pone las manos en mi cara y me dice seriamente

-Matu, escuchame. Arréglate que nos vamos, no estoy jugando contigo.

El tono era tan frío que sentía que no tenía opción. Me vestí inmediatamente para partir con mi amigo a un lugar desconocido, solo esperaba que no fuese a asesinarme.

Lo siento mucho por la demora chic@s. ¿Qué creen que pasará?. Muchas gracias por sus estrellitas, se los aprecia.