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Los chicos llegaron a la discoteca, era la más grande en Madrid, los años 80 estaban en todo su apogeo, la música, el estilo, el ambiente, entraron y unos fueron a la barra, otros a bailar. "Dame un gin y tonic" dijo Pau, "Yo quiero un whiskey" añadió Maya, "¿Y los demás que quieren?" Preguntó Pau y al voltear con Maya ya no estaban. "Eso fue rápido" rió Paula, "Esta noche promete" rió Maya.

Rey estaba bailando con Silvana, la música de Whitney Houston sonaba de fondo, "Me encanta esta canción" sonreía Silvana, "Si, es muy linda..." dijo el, viéndola embobado, era obvio que no se refería a la canción, ella se sonrojó, y comenzó a cantar "Oh i wanna dance with somebody..." tarareaba mientras se remeneaba, Reyo la contemplaba, era delgada, la más alta de sus amigas, traía el cabello suelto, unos jeans de tiro bajo con una blusa blanca de botones amarrada justo por encima del ombligo dejando ver su cintura, era bonita, muy bonita, y eso el lo pensaba. Ella se sonrojó al notar que el la veía, el seguía bailando hasta que se acercó René con unos amigos. "¡Reyo! ¡Mira quienes están acá!" Anunció, Rey se volteó para ver a sus amigos a quienes no veía desde hacía un año "¡Nooo! ¡Pipe! ¡Mati! ¿Que hacen acá?" Reyo los abrazo; "¡Reyo! ¿Cómo estás che?" Preguntó Pipe, "Acá con una amiga, ella es Chivis" dijo Reyo, ellos la saludaron con beso en la mejilla, "Yo soy Matías, el es Felipe, pero le decimos Pipe" explicó Matías, "Un gusto" sonrió Silvana, en eso se acercaron Paula y Maya, "¡Holaaa!" Dijo Maya sonriendo al ver a los dos rubios conversando con los chicos, "¡Ellas son Maya y Pau!" Dijo Reyo, ambas saludaron con beso en la mejilla a los chicos, "Pipe y Mati eran nuestros vecinos de alfrente, pero se regresaron a Buenos Aires" explicó René, "Si pero ya nos vamos a quedar acá, tuvimos unos pequeños problemas con la empresa familiar y ta pero ya nos quedamos, ya no hay kilombo" dijo Matías. Paula los contemplaba, Matías era delgado, bajito y traía el pelo liso peinado hacia adelante como un Beatle, Pipe era alto, tenía los ojos celestes, los labios carnosos y el cabello largo despeinado, era guapo, muy guapo, lejos de parecerse a todos los chicos que había visto en Madrid.

Aquí voy de nuevo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora