1. Primer Beso 💋

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Toda la mañana había sido lo mismo, Inosuke alardeaba por todo el lugar haber sido el quien había despertado a Tanjiro de su letargo, estaba tan entusiasmado con esa idea que fué necesario que Aoi lo sacara de la habitación por la fuerza para que dejara descansar al pobre pelirrojo que no era capaz ni de mantenerse despierto por largos periodos. Aún con todo esto, el salvaje chico de cabellos azabaches encontraba siempre la manera de entrar a hurtadillas para verlo, esperando encontrarlo despierto y que se mantuviera así por un rato, quería estar con el y escuchar todos esos elgios que lo hacían sentir tan bien y al mismo tiempo tan extraño, como si esas amables palabras le hicieran despegar sus pies del suelo haciéndolo capaz de hacer cualquier cosa que se propusiera. Lo había notado antes, esa extraña sensación en su pecho que lo obligaba a buscar al pelirrojo todo el tiempo, ya fuera en la vida real o en sus sueños, incluso en sus propios pensamientos, se colaba en su cabeza y entre mezclaba todo ahí dentro para dejar una enorme y extraña telaraña en la que solo se adherían sus brillantes ojos color de sol.

-  ¿Inosuke? - abrió los ojos en cuanto fué consciente de un aroma dulce en la habitación, girando su cabeza y encontrando al salvaje con su cabeza recostada en la orilla de la cama y un pequeño pastelillo justo al lado mientras se mantenía sentado en el suelo  - ¿Cuánto tiempo llevas ahí? -

- Desde antes que saliera el sol - se levantó y con un gesto triunfal se regodeó de la idea de llevar algo que pudiera olfatear y así hacerlo despertar antes mientras que Tanjiro alimentaba su ego reconociendo la buena idea que había tenido. Vió extrañado como le ofrecía el pequeño plato, algo raro en el que ofreciera comida solo así pero aún así la tomo y agradeció por ello - no es gratis Monjiro, hay algo que quiero preguntarte, es sobre algo que vi en ese lugar en el que estuvimos - apenas y había dado la primera mordida cuando ya se estaba ahogando, siempre pensó en Inosuke como un niño pequeño al que debe de explicarsele ciertas cosas, especialmente lo relacionado a las relaciones personales, pero no estaba preparado para esa conversación. Tomó algo de agua de la mesita de al lado mientras recibía un regaño del salvaje a su lado, haciendo la menor cantidad de ruido posible para que no fueran a sacarlo de nuevo y una vez que el susto pasó, continuó hablando mientras la cara de Tanjiro se ponía cada vez mas roja. Esperaba encontrar las mejores palabras para explicar lo que creía estaba por preguntar, intentando no morir de vergüenza o por la propia mano del chico que probablemente se molestaría con el al no obtener la respuesta que creía la mejor. Los nervios comenzaban a adueñarse de cada rincón de su cabeza mientras hablaba de los muchos hombres que entraban en aquella casa mientras eran llevados del brazo por diferentes mujeres hacia diferentes habitaciones, incluso mencionó un par que se habían detenido a mirarlo y uno que otro desafortunado que se atrevió a tocarlo pensando que era una chica linda. Mientras más hablaba más parecía acercarse a esa temible pregunta que no se sentía capaz de responder, no era la persona adecuada y tampoco sentía que podría encontrar las palabras correctas para el hasta que al fin se quedó en silencio unos segundos, respirando profundo mientras pensaba - vi como algunos tipos juntaban sus caras a las de esas mujeres, nunca había visto eso Kentaro ¿Qué significa? -

- ¿Eh? ¿Hablas de los besos? - Inosuke repitió aquella nueva palabra mientras Tanjiro asentía nervioso - creí que preguntarías sobre lo que hacían esas personas en las habitaciones cerradas -

- ¡¿Insinúas que soy tan idiota como para no saber que se estaban apareando?! - apareando, sí que sabía -más o menos- lo que pasaba, pero que preguntara por algo tan simple como eso le había dejado sorprendido. Trató de aclarar la situación y cuando al fin pudo tranquilizar al chico con mascara pudo escuchar algo que debió ser obvio para el - en las montañas pude ver como los animales se relacionaban entre ellos, es algo normal, pero nunca vi algo como eso, los animales no lo hacen, por eso te estoy preguntando idiota, no me salgas con que no sabes porque ya te comiste mi pastelillo -

- No, no, descuida, te lo explicaré - Inosuke se quedó muy tranquilo mientras veía como se tocaba la barbilla mientras pensaba por un momento en qué decir - verás, los besos son algo natural en las personas que confían en la otra, normalmente son una forma de expresar afecto a la persona que es mas especial para ti. Más bien, es una forma de expresar cariño en una pare... - se quedó en silencio, su cuerpo no le respondía y su cabeza no alcanzaba a entender del todo lo que acababa de suceder, y es que de la nada, Inosuke se levantó la mascara, se acercó rápidamente y le plantó un pequeño beso en los labios. Había sido algo rápido, apenas unos segundos, pero era como si ese momento lo hubiera vivido en cámara lenta y hubiera alcanzado a ver sus ojos cerrados abrirse al momento de separarse de su rostro completamente ruborizado - ...¿por qué? -

- Es una sensación extraña, aunque agradable - dijo tocándose los labios suavemente con la punta de sus dedos.

- ¿Pero por qué me besaste? - un rostro confundido lo miró de vuelta, no entendiendo por qué de la nada parecía emanar una extraña cantidad de vibraciones confusas y nerviosas a todas partes - Inosuke, ese fué mi primer...  mi primer... - ni siquiera era capaz de decirlo en voz alta, como podría hacerlo, que su amigo y compañero le hubiera robado de ese modo su primer beso lo hacía confundirse aún mas. Un segundo le estaba explicando lo que era un beso y al siguiente ya estaba así de cerca, sin darle tiempo si quiera de reaccionar - ¿por qué? -

- ¿De qué estás hablando? Dijiste que los besos se le dan a la persona en quien confías, y yo confío en ti Kentaro - oh no, debió haber comenzado por decir que los besos eran cosa de pareja, tal vez así habría podido evitar reclamos de su parte. No, había sido su culpa por no dejarlo terminar de hablar.

- ¡Pero no puedes ir por ahí besando a todas las personas en quien confías! -

- ¿Por quién me tomas imbécil? Acabas de decir que es para mostrar afecto a una persona especial. Te la pasas diciéndome que muestre más afecto a las personas y en cuanto elijo a quien es especial para mi te atreves a portarte así ¡Deberías estar honrado al ser elejido como la persona mas especial y en la que más confía el rey de la montaña! -

- ¿Más especial? - tenía toda la intención de darle un buen regaño pero esa explicacion era demasiado para el, Inosuke lo consideraba su persona mas especial y eso hacía latir su pequeño corazón. Gracias a eso, ya no tenía ganas de gritarle, pero ahora se sentía nervioso sobre como tomaría las cosas ahora - debiste terminar de escucharme primero, aunque tal vez debí haber empezado por ahí. Inosuke, los besos solo se le dan a tu pareja, no puedes ir por ahí repartiendo besos, son algo muy íntimo - esperaba sonar lo mas tranquilo posible mientras sentía como le ardía el rostro y sus nervios se disparaban esperando que al menos el golpe que le diera no fuera tan fuerte. A pesar de poder estar sentado aún seguía herido. Levantó la mirada al no escuchar nada y cuando lo hizo se dió cuenta del violento sonrojo en el rostro contrario, que parecía luchar con todas sus fuerzas mantenerse calmado - la verdad ese también fué mi primer beso - el abrumador y pesado silencio que se había formado fué cortado por la voz rasposa del azabache preguntando si eso era importante - si, es el primer contacto que se tiene con... el amor... - ahora sentía demasiada pena - ...aunque también depende de cada persona -

- Entonces está bien - no esperaba que actuara tan tranquilo, aunque su olfato le decía que también estaba nervioso al igual que el - si es importante entonces está bien que haya sido contigo, ya te dije que eres especial y que confío en ti, eso es suficiente para mí - se levantó de la cama, había estado ahí desde que el pelirrojo se enderezó al despertar dispuesto a responder sus dudas. Se volvió a poner su mascara y se dispuso a irse cuando la mano de Tanjiro lo tomó por el brazo, recordandole que no podía besar a nadie mas y que por favor lo recordara, cosa que ahora si hizo perder la paciencia al salvaje que tanto esfuerzo la había tomado conservar - ¡No soy idiota, ya te dije que no lo haría con nadie mas maldito imbécil! - en ese momento entró Aoi acompañada de las tres niñas mariposa dispuestas a hechar al ruidoso alborotador que no era capaz de dejar descansar a Tanjiro ni un solo día, pues desde que había despertado no se le separaba por mucho tiempo.

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Nueva historia, DianaH81194 me convenció de subir esta primero 😘 disfrútala

Y no se olviden de votar y sobre todo comentar, adoro leerlos a todos, hasta el próximo capitulo gente, chao

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