¿Dulce Pecado? ~AlastorxLucifer~

Capítulo 4 (Pasado de Lucifer)

Caminando por aquel lugar todo lleno de vida se encontraba un demonio radio que no tenía su aura maligna o una apariencia que haga temer, tenía la forma de un 'Angel', desde que rompió aquel objeto que le dio Lucifer lo llevo al pasado.

Entonces así era el cielo antes, supongo que no a de haber cambiado tanto en mi actualidad. -Alastor que era un alma que no merecía pertenecer al cielo, realmente no le importaba donde terminó quedando, para el era lo mismo estar en el paraíso como en el infierno, nunca vio la diferencia

Recorriendo más aquel lugar estaba en busca de alguien, aquella persona se hacía llamar Luzbel o más bien como se le conocía en su actualidad 'Lucifer'. Estando desubicado decidió detenerse un momento para analizar el lugar, hasta que alguien le habló

Disculpa, ¿Quien eres? -lo decía de una forma suave y con una curiosidad por aquella persona que nunca había visto en ese lugar o por lo menos que se haya fijado no

Alastor girandose para ver quien era, se le quedó viendo un momento, su apariencia era curiosamente muy inocente y algo atractiva...después de pensarlo un poco noto quien era, era Lucifer, ahora que se fijaba bien tenían un gran parecido, con la diferencia de que tenía rasgos más 'delicados' a diferencia del gobernante del infierno o por lo menos así parecía cuando usaba su ropa algo anticuada, la ropa de Luzbel era un color blanco con filos dorados, sus ojos eran curiosamente de un tono dorado claro y además de que su mirada reflejaba la inocencia y la complejidad.

¿Solo aparecí aquí, donde se supone que estoy? -no mentía en si Alastor, pero si mintió en no saber donde estaba, era lógico que era el cielo empezando por todo lo colorido y ordenado que era, además de pacífico, era un ambiente diferente al infierno

Acaso tú.. .¡Eres un nuevo ángel que creo nuestro padre! -lo dijo con entusiasmo y felicidad al ver a otro ángel en ese lugar- ¡Oh! Disculpa mis modales, un gusto soy Lucifer el portador de luz y estrella de la mañana, por cierto suelen decirme más Luzbel, puedes decirme como más cómodo te sientas y ¡Bienvenido al cielo! -acercandose a Alastor tomo su mano y hablo- Vamos te enseño el lugar, ¡Te aseguro que te divertirás!

Alastor estaba algo incomodo por el contacto, no era alguien que le gustará ese tipo de contacto, de echo no le gustaba ninguno, pero trataba de no decir nada ya que terminaría siendo descubierto y Luzbel le haría muchas preguntas en caso de que cometa un error

Recorrieron muchos lugares, hasta que se detuvieron en uno que era el favorito de Luzbel- Esta es la cascada celestial. -lo dice soltando la mano de Alastor, dándole un alivio, para después acercarse y tocar un poco el agua que era muy cristalina y de un tono dorado- Se dice que cualquier duda que tengas debes quedarte en este lugar y encontrarás la paz, bueno eso dicen, ¿Que te parece, a que es hermoso? -empezó a recorrer el agua con su mano de una forma delicada

Si le digo la verdad se molestara o talvez no, pensaba Alastor- Si, se nota que purifica hasta tu alma. -mentí, realmente no me gustaba aquel lugar, de por sí todo no me gustaba, era muy colorido y conociendo el propósito de esa cascada me parecía absurdo, pensaba decir algo más hasta que apareció otro ángel reflejando una luz brillante con su presencia, parecía buscar a Luzbel

¡Luzbel! -lo decía la serafín con un tono de molestia, parecía estar regañando a Lucifer

Ay, ahora que hice Sera. -lo dice acercandose de inmediato y en el proceso recibe un pequeño golpe en la cabeza- ...auch, pero que paso?

Se suponía que debías estar con nuestro padre, ya sabes que esta planeando una nueva creación y quiere tu opinión, como eres su consentido. -mientras lo dice se fija que había otra persona con ellos y pregunta- ¿Quien es el?