38

3.1K 532 54
                                    

Tan pronto como Sergio salió de la recámara, Max se volvió hacia sus hermanos.

—Dime la verdad. Todo. ¿Cómo está Sergio? ¿Estaba herido?

—No lo sé—, dijo Liam honestamente. —Él ha rechazado cualquier tipo de ayuda. Se ha enfocado solo en ti y en tu recuperación. Se cayó de tu caballo de una forma terrible, pero se levantó, montó de nuevo y nos condujo hacia ti.

Max maldijo mientras el dolor aumentaba en su hombro.

—No deberías haberlo permitido. Él debería haber sido cuidado primero.

Daniel se río. —No viste a tu pequeño esposo, hermano. Tenía a todo el mundo aterrorizado. Gritaba como si estuviera demente cada vez que alguien entraba a tu habitación. No permitía a nadie más que a mí, Liam, Victoria, el padre Christian y Oscar cerca de ti, y al padre solo se le permitió si no intentaba darte los últimos ritos. No permitía que nadie te viera, ni siquiera por un momento, estaba preocupado ante la idea de que no sobrevivirías. Era un espectáculo para la vista.

—Nos asustaste a todos—, dijo Liam bruscamente.

—¿Qué pasó? —, Preguntó Max. —Para mí todo es un poco borroso. Recuerdo que Sergio me gritaba, cuando volteé y desenvainé mi espada vi a un hombre a caballo acercándose. Lo siguiente que recuerdo es arrojarme a un lado para evitar la flecha y luego me golpee la cabeza. No sé nada más.

—Lo que sucedió es que Sergio espantó a tu atacante gritando como si los sabuesos del infierno lo persiguieran, entonces tomó tu espada, preparado para luchar para protegerte. El jinete huyó, luego Sergio se arrojó sobre tu caballo y cabalgó gritando todo el camino de regreso a la fortaleza. Corrió a toda velocidad hacia el patio y luego tu caballo lo arrojó sobre su cabeza. Nos llevó de vuelta a ti, te trajimos en un camastro. Se negó a regresar con Daniel y caminó a tu lado todo el camino. No se ha movido de tu lado desde entonces. Se negó a comer, a cuidarse y a dormir.

—Él pequeño tonto—, graznó Max. —¿Qué haría sin él? No puedo perderlo.

Se dijo en voz alta antes de que pudiera pensar en dejar de expresar sus sentimientos por Sergio. Estaba furioso por los riesgos que había corrido y estaba temblando de miedo al darse cuenta de que lo podía haber perdido tan fácilmente. Daniel y Liam no dijeron nada en respuesta a su declaración, pero pudo ver el reconocimiento en sus ojos.

—¿Quién hizo esto? ¿Lo localizaste? —Exigió Max.

Sus hermanos menores intercambiaron miradas incómodas. —Dime—, dijo en voz baja.

—Para Sergio, ha sido más difícil de lo que crees—, dijo Daniel en voz baja.

Max se congeló, sus venas se convirtieron en hielo.

—Dijiste que no estaba herido. ¿Le puso las manos encima?

Daniel negó con la cabeza.

—No, tranquilo. Sergio... Él vio al arquero. Él fue capaz de darnos información de identificación.

—Posible información de identificación—, interrumpió Liam.

Daniel asintió.

—No sabemos aún qué hacer con eso. Hemos enviado soldados para buscar en la zona y hemos agregado patrullas adicionales a nuestra frontera para garantizar la seguridad del clan, pero no actuamos según la información que Sergio nos dio hasta que habláramos contigo.

Max negó con el cabeza confundido.

—¿Sergio identificó al hombre que me disparó y tú no actuaste?.

Clan Verstappen 1° [CHESTAPPEN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora