ENGÁÑAME SI PUEDES.(JONGTAE) (2MIN).🔞 (🌈)

Once.

Al regresar a casa hasta el día siguiente, el rostro de Taemin reflejaba una mezcla de satisfacción y felicidad, pero también de agotamiento y dolor. Las intensas horas de placer compartidas con Minho lo habían dejado extenuado, pero más decidido que nunca a conseguir el divorcio. —Ya no puedo seguir así —pensó.  —Esta situación con Jonghyun tiene que acabar, sí o sí.

Absorto en sus turbulentos pensamientos, apenas notó que la casa estaba sumida en la oscuridad cuando abrió la puerta. Supuso que Jjong se había marchado en cuanto le informó que no regresaría en dos días. Tan exhausto estaba que simplemente siguió su camino hacia la habitación. Sin embargo, se detuvo en seco al escuchar ruidos procedentes del dormitorio de su esposo.

Entre el silencio reinante, alcanzó a distinguir gemidos. Taemin entrecerró los ojos, intentando discernir lo que Jonghyun decía, pero no lograba entenderlo. Abrió la puerta pensando que algo grave le ocurría. Estaba convencido de que Jonghyun debía de estar ebrio o, peor aún, en peligro de asfixia. Entró precipitadamente, solo para descubrir con estupor que su esposo mantenía relaciones sexuales con otro hombre, quien le proporcionaba placer oral en una posición a horcajadas.

—¡Eres... eres un verdadero desgraciado, Jonghyun! Esto es lo último que faltaba, traer a tu zorra en turno y meterla en la casa. Jamás imaginé que te atreverías a tanto. —El desconocido saltó de la cama, cayendo de lado con un grito de sorpresa. "¡Ahhhh!" — gemía del tremendo susto. —Taemin, ¿qué demonios haces aquí? Se suponía que no regresarías hasta dentro de dos días. Tú mismo dijiste que estabas con tu amante, cuando te llame por teléfono. —Vociferó Jonghyun con molestia.

 En medio de su sorpresa, Taemin entendió que una oportunidad así nunca se le volvería a presentar en la vida. Era ingenuo, pero no tonto. —Pues te engañé, te tendí una trampa. Sabía que si te hacía creer que me iba con alguien, inmediatamente meterías a una zorra en la casa. Y mira, no me equivoqué. Eres un ser despreciable. De ahora en adelante, estarás solo con tus padres. Quiero el divorcio, y me lo vas a dar.

—No, Taemin. —Jonghyun se levantó de la cama y se arrodilló ante él. —No puedes abandonarme. Tú me debes todo lo que eres. Yo te saqué de ese maldito pueblo donde no eras más que un pobre idiota del que todos se burlaban. Gracias a mí, eres un señor casado y respetable. Eres un Kim. —Después de pronunciar esas palabras, se levantó y dejó de rogar. Así era él, en un momento podía sentirse débil y abatido, pero al siguiente adoptaba una actitud prepotente y altanera.

Además, muy pronto seremos padres, y no puedo creer que seas capaz de abandonar a nuestro hijo a su suerte. Mejor concéntrate en lo que sabes hacer bien. Guardar silencio. No tienes ni la valentía para encontrar un verdadero amor. ¿Quién podría quererte a ti? Debes mirarte al espejo y darte cuenta de que eres tan insípido.  ¡Ja! Un amante, ¿En serio  Taemin? Ingenuo.

 —Sabes, Jonghyun, sacas lo peor de mí. Y tú, muchachito estúpido, deja de mirar. Será mejor que te vistas y te largues ahora mismo, antes de que te eche a patadas de mi casa. — El hombre asintió y buscó rápidamente su ropa, ni siquiera se la puso, salió de la habitación con pasos largos.

—¿Estás celoso, Taemin? No puedo creer que aún sientas amor por mí.  —No, Jonghyun, no te hagas ilusiones. Tú ya no significas nada para mí. Lo único que siento por ti es lástima. Eres un perdedor igual que yo, pero a diferencia de ti, he decidido cambiar y recuperar mi vida y mi dignidad.

 Ya todo estaba dicho por parte de Taemin, y la verdad es que no se arrepentía de nada de lo que dijo; ya no quería seguir siendo el cheque al portador de Jonghyun. De ahora en adelante defendería su libertad. Luego de eso se fue directo a su habitación; quería calmarse un poco antes de pensar en lo que haría. Tenía que calcular muy bien las cosas antes de dar el siguiente paso. Ya no había vuelta atrás y una equivocación sería perder.