"Promesa" [Muichirou X T/n]

Capítulo 16

Había estado bastante tiempo caminando y ya veía las puertas del Distrito. Tomé valor y entré a este, me sorprendió que en plena luz del día estaban trabajando como si fuera de noche. Es raro ya que los Distritos hacen sus movimientos en la noche por eso son un peligro para las personas que viven allí.

Si me acuerdo bien, esos muchachos...no recuerdo sus nombres, bueno el caso es que ellos no han regresado de su misión tampoco...luego de la muerte de aquel pilar ellos partieron con Uzui, pilar del sonido, a otra misión en un Distrito...creo que se llamaba el Distrito Rojo, eso fue hace días...

Vi en el medio de la gente una pequeña gatita, pude divisar una luna en su cabeza.
Era la gata de Azami, me acerqué a ella y acaricié su cabeza esta pareció reconocerme y empezó a caminar..yo la seguí, de seguro me lleva con Azami.

Entramos a un hotel y me guió al segundo piso. Entré a la habitación que me indicó y vi a Azami acostada en el futón, tenía un pañuelo en la frente y su respiración era agitada. Una señora estaba sentada a su lado velando de ella.

- ¿Quién eres tú y qué haces aquí? No puede entrar sin permiso joven. - La señora volteó a verme y me interrogó con la mirada, yo cerré la puerta y me acerqué a la cama.

- Vengo a traerle un antídoto, no se preocupe...jamás le haría daño y lamento entrar sin permiso pero es urgente..¿cómo se encuentra? - Hablé señalando a la chica.

- Está grave, ayer regresó herida...pude curar la gran mayoría de sus rasguños, pero hoy no despertó, está caliente, de hecho tiene fiebre... y su respiración es agitada y frágil, llamé a un doctor pero no supo que podía ser, solo dijo....que si seguía así su corazón dejaría de latir...si va a salvarla hágalo ya por favor. - Ella me explicó rápido y yo saqué el frasco que me había entregado el patrón. En un vaso de agua dejé caer su contenido, revolví rápido y dejé que ella lo bebiera con mi ayuda...solo espero que no sea demasiado tarde...

Una inmensa oscuridad me había tapado totalmente. No recuerdo haber despertado después de quedarme dormida para descansar.

Ahora los rayos de Sol entraban por la ventana dándome en el rostro, abrí mis ojos con pesadez sentí un peso en el pecho y al bajar mi mirada estaba Muichiro descansando...que lindo se veía durmiendo, sus cabellos caían sobre mi estómago y el apoyaba su cabeza en mi pecho mientras me abrazaba por la cintura...en qué momento llegó aquí.

Tomé valor y acaricié sus cabellos con el paso del tiempo este despertó, dirigió su mirada a la mía y conectamos. Se mantuvo un silencio cómodo.

- ¡Despertaste! - Rompió el silencio y me abrazó más fuerte escondiendo su rostro en mi cuello haciéndome cosquillas.

- Eh ¿sí?...un momento, ¿cuánto llevo durmiendo? - Él levanto la mirada.

- Dos días, yo llegué ayer y te salvé la vida merezco un gracias no? - Se sentó y cruzó de brazos levantando una ceja...Divino, como siempre.

- S-Si gracias..- Me levanté y me senté a su lado con las mejillas sonrojadas. El momento se interrumpió por mi abuela entrando con una bandeja, la cual dejó en una mesa, cuando levantó la vista empezó a llorar.

- Hija mía estás bien, ¡qué alegría.! Pensé que te perdería. - Se acercó a mi y me abrazó.

- Ya abuela, estoy bien no pasó nada malo gracias a Muichiro. - Ella se apartó y agradeció a el peli-menta que decía que no hacía falta.

- Por cierto, no me dijiste que tenías novio. Deberías habérmelo dicho Azami tengo derecho de saber en que andas. - Me sonrió con mirada pícara y yo me sonrojé al igual que mi compañero.

- N-No somos novios. - Hablé yo dirigiendo la vista hacia otro lado.

- Si claro, aún. - Respondió ella.

- ¡Abuela! - Ella solo empezó a reírse.

- Era broma mija, aunque quien sabe...me encantaría tener a este joven de nuero, escuchaste corazón. - Miró a Muichiro y este asintió con una sonrisa, ¿en serio?

- Abuela, ¿puedo ir a la tumba de mis padres antes de partir? - Ella asintió, estábamos en la puerta del lugar despidiéndome de ella.

- Claro que puedes ir, espero volvernos a ver mi niña. Muchiro, confío en tí y te dejo a mi nieta en tus manos protégela y mantenla a salvo por favor. - Abrazé a mí abuela y ella acarició la cabeza de Muichiro.

- No se preocupe, no dejaré que nada le pase. - Respondió él.

Tomé a Luna en brazos y fuimos a las tumbas de mis padres. En un balle de flores descansaban ambos, unidos y en paz. Me coloqué una peineta en forma de copo en el pelo, mi abuela me la regaló dijo que era de mi madre.

- ¿Ella era tu abuela?, si no quieres hablar de ello no hay problema. - Muichiro tomó mi mano y me miró a los ojos, yo sonreí.

- En realidad sí, ella es mi abuela, me enteré hace algunos días. Mis padres fueron devorados por un demonio y mi abuela huyó conmigo pero en esos tiempos ella no tenía nada que brindarme para poder mantenernos y por eso me abandonó. Aún así ella no me dejó de buscar y ahora es que me entero de ello, es difícil de tomar...pero lo acepto, sea donde sea que ellos estén yo los amo, por ser mis padres. -

(Multimedia es una referencia del lugar, créditos al autor)

Salimos del lugar y partimos a nuestro destino, de regreso a casa.

Datos:

•Azami y Muichiro ya están sintiendo un lindo y tierno amor el uno al otro, solo que no se han dado cuenta, o no por ahora.

• El veneno que Azami tomó si era bastante letal y más para el organismo de un ser humano, pero como no fue mucho lo que aspiró ella pudo llevarlo bastante bien, hasta que Muichiro llegó con el antídoto.