Somos tu familia

4.

Me llegó la inspiración así que doble cap :3

Aviso para que sepan (aunque a estás alturas ya no importa mucho) Como bien saben bungou es un anime de comedia :) y la historia también será de comedia :D

Disfruten~

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¿Alguna vez han hecho cosas por un impulso y al final se arrepienten o no saben que decir?. Bueno, ese es el caso actual de Nakahara Chuuya, uno de nuestros protagonista.

Pero bueno en fin, las palabras están dichas y no tenemos marcha atrás.

— Osamu primero que nada...¡Baja ese maldito cuchillo! — exclamo enojado el pelirrojo mientras lo señalaba

— ¡No lo haré hasta que me digas quien eres enano! — soltó el castaño mientras sostenía el cuchillo con fuerza, de hecho el cuchillo estaba lejos de chuuya pero bueno es el demonio prodigio y es necesario actuar con cuidado

Una parte de chuuya se alegró al escuchar ese apodo y otra parte (su hermoso carácter) se enojo aún. — ¿¡A quien verga llamas enano, maldito desperdicio de vendajes!? —

— Tienes razón, enano se queda corto, aunque bueno corto ya eres, pero queda mejor duende. — murmuro Dazai mientras lo miraba

— Jodete. — susurro mientras mantenía su mirada fija en el, no podía perder más tiempo. — Tu sabes quien soy ¡Recuérdalo! —

El castaño suspiro. — Por enésima vez  ¡No tengo ni la puta idea de quién eres! — exclamo mientras soltaba e cuchillo algo harto de esto

El pelirrojo negó. — Oh vamos, 7 malditos años a tu lado como tú compañero, como tú...tu...— mantuvo la frase en el aire y suspiro. — estos malditos 7 años no pueden tirarse a la basura —

Dazai ladeó la cabeza. — ¿Desde cuándo mi vida empeoro para que entonces te conozca desde hace años? — se escucho como bufo chuuya y dazai se encogio de hombros. — Como sea, si tanto insistes y solo con esto logro sacarte de aquí entonces dime algo que solo tu y yo sepamos —

Le pelirrojo lo miro confundído — no servirá de nada por qué no recuerdas nada sobre mi —. Osamu asintió mientras esperaba que el pelirrojo se diera por vencido, aunque paso lo contrario. — pero recuerdas cosas sobre ti —

Dazai lo miro mientras su mirada se oscurecia. — No sabes nada de mi —

Chuuya negó. — Se lo que me has contado, esas noches de insomnio me contaste tu vida en la mafia — susurro mientras se acercaba a él y después hablaba seguro. — solo buscas una razón para vivir, no quieres morir Osamu —

El castaño lo miro con los ojos llenos de sopresa e incredulidad, trato de alejarse pero el pelirrojo se lo impidió.

— Se perfectamente que no me recuerdas pero lo harás — murmuró mientras rozaba su venda en la mano y después hablo. — ¿Sabes por qué estás aquí? ¿Que recuerdas de ti? —

Las preguntas de chuuya resonaron en la mente del castaño mientras se preguntaba si en verdad tenía que responder todo esto, aunque planeba evitar una discusión así que hablo.

— Me llamo Dazai Osamu, tengo...tengo... — se quedó pensando en su respuesta

— 22, 22 años — completo chuuya su frase mientras lo miraba

«¿Cómo es que sigo vivo hasta tal edad? Ni para morir sirvo» pensó el castaño mientras suspiraba.

— ajá eso, también soy un ejecutivo de la mafia — continuo no muy seguro.

Chuuya ladeó la cabeza ¿Entonces si perdió la memoria por qué recuerda esto?. Se quedó confundido hasta que sonrió encontrando una explicación.

— Debo admitir que eres un genio — murmuró malhumorado mientras miraba al castaño

— ¿Apenas te das cuenta? — sonrió de manera engreída dazai y entonces chuuya se levantó.

— Si si como sea, trata de no morir mientras no estoy — exclamo mientras caminaba hacia la puerta

— En ese caso requiero saber el nombre de mi valioso "compañero" —

Chuuya refunfuño al escuchar eso y antes de salir hablo

— Chuuya. Nakahara Chuuya — hablo mientras salía del departamento

— Alias chibi — sonrió Dazai levemente mientras se dirigía a la cocina

El pelirrojo camino hacia la oficina de su jefe y una vez que el autorizo su entrada al abrir la puerta de la oficina saludo

— Mori-san, tengo buenas noticias — dijo el ojiazul con una sonrisa brillante (vaya cambio de actitud)

—Oh vamos vamos cuéntame Chuuya-kun — sonrió mientras invitaba a él pelirrojo a tomar asiento y este accedió

— Dazai no perdió toda su memoria — hablo mientras lo miraba

Mori ladeó la cabeza — ¿Tenemos pruebas? ¿Que no sean el que sabe su nombre y su rango en la Port mafia? —

Chuuya asintió. — El recuerda algunas cosas, incluso peleamos — murmuró mientras pensaba, ¿Desde cuándo lo ponía tan feliz pelear con la momia?

— Un gran avance — soltó Mori con una risa baja mientras se estiraba

— De hecho si y tiene vagos recuerdos de la Port mafia, su pasado y algunas cosas pero aún así no recuerda a la agencia— hablo mientras se mantenia pensativa

Mori sonrió mientras tomaba un libro y escuchaba

Lo que resto del día fue normal a excepción de varias preguntas de parte de Akutagawa para saber cómo se encontraba Dazai, pero nada difícil de resolver.

Había pasado una semana desde el incidente y a pesar de que una parte de chuuya se emocionaba por el hecho de que la agencia no buscará a dazai y que podría quedarse en la mafia, por otra parte de sentía mal por eso, Dazai se veía tan feliz y vivo cuando estaba con los de la agencia que no se sentía bien quitándole todo eso y aunque el Dazai de ahora no podía extrañar algo que en su memoria nunca tuvo, el sabía que él se sentía vacío.

Aunque bueno todo su pesar desapareció cuando encontró a todos los integrantes de la agencia en la recepción del edificio de la Port mafia

— ¿¡Pero que verga!? —

Todos e incluso el presidente de la agencia se encontraban frente a él con una sola duda en mente. ¿Que le paso a Dazai? . Esperaba esto fuera pacífico ya que no quería gastar energías en ellos

— ¿Dazai-san se encuentra bien? — pregunto un chico peliblanco y adorable, oh sí, Nakajima Atsushi el poseedor del tigre.

— Tiene los cuidados médicos necesarios — hablo firme chuuya mientras se cruzaba de brazos

— Pero Dazai-san necesita a su familia cerca — hablo un chico rubio y alegre por todos lados, Kenji con quién se había enfrentado

Estas palabras afectaron a chuuya de una manera que ni el se esperaba, solo fue capaz de responder de forma seca y cortante.

— No. nosotros, yo, somos su familia —

Ahora sí, quedó.

Bye-bye