𓂃 ࣪JUPITER ִֶָ𐀔 || FREENBECKY || BECKFREEN ||♡

𓂃 ࣪˖Capítulo 2. ִֶָ𐀔

૮꒰ྀི⸝⸝SAROCHA CHANKIMHA ⸝⸝꒱ྀིა

—Si que te puso en tu lugar, Chankimha. A ver como te le zafas a esa profesora —se mofó Noey.

—No es para tanto, hemos tenido profesoras peores, es más, será fácil de controlar –jugué con mi piercing, sentándome en una de las sillas del comedor—. Es de esas que se creen superprofesoras, me aburren.

—Súper o no, te puso en tu lugar —dijo Heng —. Y admítelo, con esos aires de ser una profesora dura, te sienta porque te sienta, Freen.

—¿Se van a pasar la tarde completa hablando de la profesora? —rodé los ojos—. Hay cosas mejores.

—¿Cómo hablar de Saint? —inquirió Heng.

—Qué asco, por supuesto que no —me llevé la botella de agua a los labios y después de darle un sorbo, respondí—, hay cosas mucho mejores.

—Recordemos que a Freen no le gustan de su edad, ni mucho menos menores —dijo Noey.

—Cierto, entonces, ¿cuáles son esas cosas?

—Deja de ser tan genio, Heng –expresé con obvio sarcasmo—. Hablo de que podemos divertirnos, salir de fiesta, no lo sé, algo que no termine de arruinar nuestra patética vida.

—A las dos últimas fiestas que hemos ido, ha salido mal, ya no se si nos reciban —expuso Noey —. Que a todo esto, deberíamos preocuparnos más por lo de la profesora de...

—¡Basta con la idiota de Matemática! —interrumpí a Noey, ya algo enervada.

—No iba a hablar de ella, pero noto que si te dejó marcada, Freenky. Cuidado y te hace competencia —dijo Noey en un tono bromista.

No le respondí y me sumergí en mi mundo, más que ir de fiestas, quería no regresar a mi casa, ahí me esperaba un infierno en vida. Prefería ir de paseo o esquivar ese tipo de realidades, esperaba más un regaño que unos insultos, no quería despertar y ver a mi padre o escuchar a mi madre quejarse de los golpes. Mis pensamientos iban tan rápidos; que buscaba esquivarlos.

—Competencia y una mierda, no tengo que trabajar hoy, solo vámonos de fiesta por ahí. A molestar un poco.

—¿No te basta con las personas que molestamos aquí? —preguntó Heng.

—¿Y a ti no te basta con cerrar la boca? —le regalé una sonrisa falsa, regresando a Noey —. Necesito emborracharme para no sentir, eso necesito.

Era común hacerlo, a nadie le mortificaba ni mucho menos le afectaba que yo hiciera eso, para terminar con un dolor de cabeza insoportable al otro día, era una manera de aliviar el dolor emocional, el cual es mucho peor.

—Miren, hay una fiesta hoy, no sé si quieran apuntarse o prefieran ir a uno de esos bares —explicó Heng.

—Lo que sea —me puse de pie, para avanzar hacia la puerta—, aquí no permanezco ni un segundo más.

De camino a la salida, pude ver como la profesora Armstrong conversaba con Non, era de esos típicos profesores picaflor. No era la primera y sé que no sería la última.

—El profesor Non no se contuvo y ahí lo tienen, echándole el ojo a la profesora —dijo Heng en un tono burlesco.

—No sé quien de los dos perderá más tiempo —farfullé—. Son iguales.

—Eso no lo sabes —contradijo Noey —. Ella se ve muy buena persona.

—Y ni hablar de lo linda que es -se sabroceó Heng.

—Deja ese lado macho alfa de lado —lo miré mal—. Es atractiva, pero no es para tanto.

Era llamativa, de las pocas profesoras que sí podías consideras atractivas.