Por qué solo tú puedes ser mi salvación y mi perdición, eres tú la unica y aún así, no estás aquí.
Sanzu es parte de bonte, el segundo a cargo de la mafia mas temida en Japón, es un hombre leal a su jefe... ¡Pero tú!...estas a apunto de hacer que to...
Gota pequeña, mi dolor. La tiré al mar. Al hondo del mar. Luego me dije: ¡A tu sabor ya puedes navegar! Más me perdió la poca fe... La poca fe de mi cantar. Entre onda y cielo naufragué. Y era un dolor inmenso el mar.
POV Sanzu:
Estaba llamando a kakucho por el incendio de nuestro club
Kakucho fue incendiada tribu estoy aquí y me largo pronto llegará la policía, necesito saber qué pasó con la farmacéutica de los pendejos de los Kaulitz.
Kakucho: informaré a Manjiro está conmigo y no es un buen momento, está peliando con Koko
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Sanzu: bueno luego me dirás que paso y por qué se están peleando. Mientras tanto te veo en 3 horas donde siempre.
Colgué el teléfono, es un hombre fiel kakucho a sus ideales fáciles de seguir.
Manejaba por la ciudad, Tokio es nuestra me detuve un rato donde pasó la pelea de tenjaku. Recuerdo cuando Ran y Rindou salieron de la cárcel y los busqué eran necesarios para todo esto que somos hoy y el día que le jure lealtad a Manjiro.
Carajo que rápido pasa el tiempo, ahora sí somos jodidamente ricos, cada uno estuvo justo en el momento exacto o quizá no tanto.
*Sonaba el teléfono*
Mire mi teléfono era Manjiro
Sanzu: dígame, jefe
Manjiro: tengo ya a Hanma como me sugeriste y bueno no salió bien
Sanzu: ¿No? Que curioso creí que sería buena idea como lo plantie, si es que tengo razón - ya iba de nuevo para mí coche- los kaulitz tienen algo que ver y obviamente la mocosa también
Manjiro: no dudo que los kaulitz tienen algo que ver hasta también Koko lo pensó
Sanzu: ve, punto para mí
Manjiro: pero el no estuvo deacuerdo
Sanzu: ¿El pequeño gato se puso roñoso?
Manjiro: si por qué también investigaremos al ratón.
Sanzu: ¿Y?
Manjiro: pues...
Sanzu: no me digas que también se lo tiro la puta barata del ratón
Manjiro: no, lo dudo si lo hubiera hecho ya no tendríamos a Koko entre nosotros
