BAIRD

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Zoro busco como loco al cenzontle, todos buscaban al pájaro cuando dos niños salieron del bosque sucios. Tenían rasguños en los brazos y la niña tenía el cabello cortado de un lado por eso lloraba a mares.

—¡Niños! ¿Donde estaban? ¿Que les pasó?—preguntó Nojiko al verlos caminar a ella.

—Se la llevó—dice la niña limpiándose las lágrimas.

—Dime, ¿Quién? ¿Quién se llevó a quien?—les pregunta Nojiko con más tranquilidad.

—Al pájaro... Ese hombre se llevó al pájaro azul—responde el otro niño.












Baird era un lugar hermoso, lleno de aves hermosas y árboles frondosos. Era difícil entrar a Baird y no podías volar. Y cuando la grulla blanca y majestuosa llegó no dejo que Han-Lily tocará el suelo. La mantuvo en sus dedos sonriendo por llegar a casa.

De piel blanca y hermosos ojos grises ve como los niños van al acantilado para aprender a volar, todos con grilletes relucientes y nuevos, al parecer recién pulidos, iban deprisa y detrás de ellos estaba una chica de yukata roja y de cabellera negra con mirada filosa. Esta lo ve y sin sonreír se acerca con una gran atención hacía el cenzontle.

—No esperaba encontrarte aquí, Hao-Rose...—saluda sonriendo aunque está lo ignora para ver a Han-Lily. El chico la aleja de ella con velocidad. —No la puedes tocar...

—Me aseguraba de que estuviera bien—le dice manteniendo su serenidad.

—El cenzontle está bien...

—El cenzontle tiene nombre...

—Y si sabes lo que te conviene no vas a decirlo en voz alta—le dice el chico de blanco poniéndose serio. —Me tengo que ir, se me hace tarde—comenta recuperando su sonrisa.

—Nos veremos de nuevo, Lou-Yue—le dice para ir a ver a los niños.

El grillete de Hao-Rose era pequeño, y el de Lou-Yue era oscuro, algo dañado por su camino. El canto del cenzontle lo hizo volver a la realidad.

—No te preocupes, ella no es mala... Solo no le agrado—Han-Lily sacudió su cabeza, Lou-Yue sabía que estaba confundida, pero en respuesta solo sonrió. —Te están esperando...

Siguió con su camino hasta llegar al pequeño palacio del capitán Gruia. Sabía que eran de la misma especie, pero el capitán era mucho más grande que él. Sonrió a las personas que estaban ahí y le abrieron la puerta.
Los pasillos eran blancos y los pilares azules. Era su hogar, pero no también una prisión. Han-Lily sintió el ambiente pesado buscando protección de Lou-Yue.

—Tranquila, aquí no va a pasarte nada...—le dice tratando de tranquilizarla.

Cuando estaban por entrar al salón principal, escucha algo extraño dentro, pero lo ignora y entra sin previo aviso encontrándose con un gran número de aves mensajeras reunidas ahí, había en promedio a 60 aves ahí...

Reconoció a muchas, como a Bo-Been que ya no sonreía como antes, a Tsu-Jara sin confianza, a Qian-Lavender intimidada... Igual que los demás, al chico Kan-Arni, Mir-Blas y Cho-Ying. Todos parecían estarla pasando mal.

—¡Lou-Yue! Espero que tengas buenas noticias—le llama el hombre que estaba en frente.

Este se puso de pie de su trono blanco, era alto, delgado, de facciones finas y cabellera blanca. Su hanfu era azul con detalles dorados y negros... Destacaba su elegancia y, sobre todo, era el único en la habitación que llevaba zapatos.

—La traje de vuelta, mi capitán—le dice Lou-Yue sonriendo levantando al cenzontle.

El capitán Gruia dio un suspiro de alivio al verla, pero enseguida volteó a ver a las tres responsables de su estado.

—Es un pájaro... Esta llena de plumas—habla mientras camina acercándose a las tres que estaban a un lado de Lou-Yue. —Dime que al menos vuela...—le pregunta al chico de blanco y este asiente.

Han-Lily estaba tan asustada que busco desesperadamente esconderse en la mano de Lou-Yue.

—No como antes, pero si puede emprender el vuelo—responde.

El capitán Gruia estaba molesto. —Tenías una tarea, y esa era traerla de vuelta intacta—le dice a Tsu que estaba con la cabeza agachada.

—Me tome atribuciones porque ella traiciono al capitan—dice como defensa.

—¿Por eso la destrozaste?—le pregunta el capitán Gruia poniéndose frente a ella. —Te pedí que la buscaras, y que la trajeras. Era una tarea sencilla de cumplir...—Gruia tomo a Tsu por el cuello y la elevó separando sus pies del suelo. —, ¿Crees que tus explicaciones van a hacerme algo? Mírala...

Gruia dirigió la mirada de Tsu a Han, está estaba escondida en los dedos de Lou.

—Ahora mi cenzontle es inútil—le dice dejándola. Tsu comienza a toser por la falta de aire mientras Bo y Qian van a ayudarla. —Dame a mi cenzontle, Lou...

Lou va y extiende su mano para que Gruia la tomara. Este sonriente la toma y aunque Han estaba en completo pánico.

—No tengas miedo, pequeña sabandija. Te pondré en tu lugar, odio cuando estropean mis cosas—murmura Gruia al tomarla con ambas manos par aque no se fuera. Este gira para irse cuando escucha un grito llamándolo.

—Usted siempre ha sido demasiado permisivo con ella, ¡Es injusto!—le grita Tsu cuando Gruia estaba alejándose.  —¡Rea nos trató mal y usted nos juro igualdad de condiciones y esa promesa duró poco!

—Tsu, ya basta. No lo empeores—le pide Bo llorando mientras todas las aves veían con impacto la escena.

—¿Acaso le tiene lástima?

—Tsu, cállate, por favor—le pide Qian tratando de detenerla.

—Piensa en tus palabras, zanate—la llama Gruia.

—Mataste a Rea... Debiste matarla a ella también—le dice Tsu.

—¿De que habla señor?—pregunta Kan-Arni consternado.

—Han pasado años, zanate, para de una vez—le dice Gruia.

—¿Rea acaso le pidió que cuidara a su hija?—le pregunta Tsu resignada a morir ahí mismo.

Las aves mensajeras estaban tan impactadas que les daba miedo ver al capitán Gruia, con el simple suspiro del hombre los hace petrificarse y agachar la cabeza.

—Lou-Yue... El zanate necesita descansar—le dice el capitán sonriendo sin ninguna empatía. —, ¿Puedes llevarla a su habitación?

Tsu aturdida nos deja que Lou la toque, sus amigas lloraban al verla desesperada. Gruia solo veía como Lou-Yue la tomaba estratégicamente.
Las personas pájaro tienen un punto sensible, en el que si lo tocas tu control de trasformación deja de ser tuyo y se vuelve en el que te controla.

Han | ONE PIECE. Roronoa ZoroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora