Capitulo 11

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Sus manos sudaban más de la cuenta, su respiración era completamente irregular y ya no sabía cómo comportarse, había citado a Enid  para pasar la tarde juntas, como últimamente acostumbraban. Quería que todo saliera bien, ya no había manera de echarse hacia atrás, les prometió a sus amigos y a sí mismo que lo haría, que por fin diría todo lo que siente hacia la chica de menor estatura.

Estaba tan sumida en sus pensamientos, que por sorpresa le tomaron aquellos brazos que le rodearan el cuello, obligándole a volver a sí misma, notado aquella cabellera rubia que conocía tan bien. Sonrie para sí misma, posando sus manos en la cintura de la más joven, respondiendo el abrazo que le daba en forma de saludo, podria estar asi durante todo el día y no le molestaría para nada.

-Hola, Wednesday- Susurra dejando un casto beso en su mejilla, perturbando aún más sus pensamientos y sentimientos.- ¿Qué vamos a hacer hoy? - Termina de preguntar volviendo a su altura normal, separándose del cuerpo ajeno.

-Tenia pensado ir a dar vueltas al parque, tomar un helado y no sé, simplemente estar juntas- Dice comenzando a caminar a su par, en dirección al lugar que había dicho.

-Me encanta- Emocionada se cuelga a su brazo, siguiendo el camino que marcaba la más alto.

Charlaban de manera pausada mientras caminaba, se contaban de lo que había sido su monótono dia y de las cosas que tenían que hacer luego, nada que la otra no supiera, al parecer pasaban tanto tiempo juntas, que ya sabían el horario o cómo era la vida de la otra. Al momento de llegar al parque, todo era tranquilo, había alguno que otro niño jugando, pero todo era calmo.

-¡Mira el columpio! Ayúdame, Wednesday

Arrastrándolo del brazo, la lleva hacia el juego por el cual la más joven estaba emocionada. Sonriendo ante lo tierna que se veía la menor, por detrás le ayudaba a columpiarse mientras sus piernas colgaban, era una imagen bastante tierna, Enid disfrutando del juego para niños, mientras que Wednesday sonreía como una idiota enamorada. Se sienta en el otro columpio a su lado, que, a diferencia de la más joven, sus pies si tocaban el suelo.

-Cuando era un niña, Yoko siempre me traia al parque, pero luego con la presión de la escuela, ella entró a la universidad y yo quise comenzar con mi tienda, no pudimos venir nunca más como antes- Dice la menor rompiendo el silencio como en el que se encontraban. -Me gusta este lugar.

-Nunca fui de venir mucho al parque, estuve toda mi adolescencia estudiando, con mis amigos haciendo pequeñas reuniones en casas diferentes, y luego me interesė por los tatuajes, al igual que Ajax y Eugene, y de ahí, nunca tuve mucho tiempo hasta ahora, que ya estamos constituidos y puedo darme estos tiempos a mí misma- Explica brevemente todo lo que había pasado.

-En ese caso, ¿por qué decidiste venir aquí hoy?

-Quizá porqué nunca he pasado un día tranquilo aquí, siempre me han dicho que es calmado y necesitaba un dia asi- Suspira balanceándose suavemente. -Y sé que contigo puedo tener un dia perfecto.

La más joven se sonroja, desviando el tema a otro, para así poder concentrar la atención en algo más. Después de estar mucho rato en los columpios, hablando de distintos temas, Wednesday decide llevarla a un puesto de helados que habia, todo como de películas, quería hacer todo lo más perfecto posible, para así llevarse un buen recuerdo si la más joven la rechazaba.

Un helado con dos bolas de chocolate y otro con uno de vainilla, estaban sentadas en el césped, una frente a la otra, mientras comían. Se veían graciosas, a veces Enid se manchaba más de la cuenta y Wednesday se encargaba de limpiarla, o Enid manchaba a propósito a Wednesday para molestarle, ambas se veían como una pareja.

Entre Flores y Tatuajes | WenclairDonde viven las historias. Descúbrelo ahora