𝓵𝓮𝓽 𝓶𝓮 𝓵𝓸𝓿𝓮 𝔂𝓸𝓾 - (ᴋᴇɴʜɪɴᴀ)

𝓬𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 1

Muchas veces cuando niños hemos oido la frase "sueña en grande y lucha para lograrlo", esa emotiva frase que quizá para algunos era insignificante y sin sentidos, pero para otros como Hinata Shoyo, era tan solo el inico de lo que seria una gran carrera que lo llevaría a su sueño más anhelado,volverse el voleibolista más grande y reconocido de todo el mundo, tal y como lo era su idolo,"El pequeño gigante".

Se encontraba este pelinaranja corriendo de un lado a otro en su nueva y gran universidad ubicada en Tokio, mentiría si dijera que no estaba completamente orgulloso de todo el esfuerzo que le había llevado concluir los exámenes de admisión a dicha institución, si bien sus calificaciones no eran en extremo malas, tenía una que otra asignatura a la cual simplemente no le ponía atención o se dejaba llevar por el sueño y cansancio de sus posteriores entrenamientos y acababa dormido sobre su mesa, ignorando por completo los muchos llamados por parte de sus profesores en la preparatoria.

Se podría decir que el chico de 1,70 no era fanático del estudio en lo absoluto, pero eso no quitaba su gran determinación y facilidad para la prolijidad.

Se había propuesto a si mismo darlo todo en la universidad tanto como en el equipo de voley y asi poder llegar a ser el idolo en el que deseaba convertirse, claro ,si primero lograba encontrar su aula de clases.

De trayecto hacia el segundo edificio del lugar y sin poner demasiada atención sobre el pasillo que atravesaba Hinata iba casi corriendo en dirección a lo que el creía era su primera clase del día, matemáticas, "- que estupidez tener tantos salones si no tienen el nombre de las asignaturas pegadas en las puertas-",pensó el pelinaranja, totalmente frustrado al no tener aunque sea un mapa de la institución en las manos para lograr guiarse,la muchacha de las inscripciones no había sido para nada clara al decirle "un pasillo a la derecha y tres a la izquierda"¿cómo se supone que sabría el cual era derecha y cuál izquierda?iba a matar a alguien si no lograba llegar lo antes posible a dicho espacio en el cual lo esperaba su nuevo inicio de clases.

Por otra parte estaba el sentado en una de las bancas ubicadas en el medio parque que tenía la ya conocida para el universidad, para ser claros y sinceros el medio rubio no tenía ninguna intención de ingresar a sus clases, eso significaría soportar a muchas personas hablando y gritándose entre si, lo cual también implicaba arriegarse a comenzar el ciclo escolar con un terrible dolor de cabeza y ahogo para el, prefería quedarse sentado allí hasta que fuese la hora de desayunar y luego ver en qué clase se metía, algo totalmente normal para el y para los docentes del lugar, conocían en demacia el disgusto del menor hacia la multitud de personas o al ruido excesivo, por lo mismo simplemente le ofrecian clases extras o talleres en horas de estudio, asi siempre había sido llevadero tanto para kenma como para la institución.

No era ni pasadas las 8 cuando alguien interrumpió su sesión de "no haré nada así nadie me fastidia", tocándole el hombro con suavidad, se había prometido a si mismo que si el primer dia alguien llegaba a fastidiarlo le daría un buen golpe en la cabeza por interrumpirlo, pero al voltear y encontrarse con esos grandes y alegres ojos medio anaranjados, sintió como toda la rabia y fastidio se subían sobre un barco y se iban a la isla de "eso no pasará".

- Lamento molestarte..- pronunció avergonzado y algo agobiado un pequeño pelinaranja, el cual miraba al extraño enfrente suyo con algo de pena y a su vez perplejidad, el estaba luchando por encontrar su materia y el otro solo estaba sentado como si nada le importase. - no logro encontrar el salón de matemáticas de la clase 6-B..¿podría indicarme en dónde se encuentra?-

El medio rubio no reaccionó en los primeros segundos, estaba algo confundido al ver el rostro nada familiar frente a el, había captado casi al instante que era un alumno nuevo en la universidad y que no había sido bien informado sobre las aulas y los horarios, parpadeo un par de veces buscando salir del trance que los ojos del contrario le provocaban y carraspeó.

-¿Clase 6-B?claro..vas derecho por ese pasillo hasta los baños y doblas a tu izquierda, es el primer salón con puerta roja.- indico el mayor de los dos, con su mejor cara neutral, estaba algo afligido al tener a una persona completamente desconocida frente a el, cosa que a los segundos le dejo de impresionar y en su rostro se reflejo su tipica expresión de desinterés.

- Muchas gracias! - sonrió levemente el más pequeño, poniendo un poco chinos sus ojos gracias a la acción. - por cierto, me llamo Hinata Shoyo, fue un placer conocerte,espero nos crucemos pronto-. dijo y se dió media vuelta para volver a correr en dirección al pasillo, si debia ser sincero la expresión del tipo desconocido frente a el le había causado escalofríos y un leve arrepentimiento, se sentía un poco hipócrita al decir que esperaba volver a verlo cuando realmente esperaba no volverse a topar con esos ojos que lo habian intimidado, definitivamente algo había causado un presentimiento raro en el y prefirio mantenerse al margen de la situación y lejos de ese muchacho, el que habia logrado ponerlo nervioso con una mirada.

Y también,en la otra parte de la universidad se encontraba un kenma totalmente desorientado,¿solo se había acercado a preguntarle por un salón?¿acaso no había sido atento a las instrucciones de la mujer a cargo en la sala principal?,esas y muchas más preguntas inundaron la mente del medio rubio, le parecía algo absurdo e innecesario pensar tanto en aquella figura de cabello naranja que tan solo había visto por menos de 5 minutos, el no se caracterizaba por sobrepensar situaciones así y mucho menos con personas desconocidas, por lo que simplemente se colocó sus audífonos y comenzó a caminar por los alrededores, tenía que llevar su mente a otra cosa más interesante, o mejor dicho, tenía que borrar de su memoria esos ojos anaranjados, los cuales habían logrado erizarle la piel.

Una vez las almas se cruzan y se perciben,es imposible dejarlas pasar así porque si, es algo que ninguno tenía en mente o siquiera cercana a una opción, pero si algo tenían grabado era la mirada del otro, y las extrañas emociones que habían logrado sentir,¿sería acaso que el famosísimo descartador de pretendendiente de kozume por fin lograría darle un espacio en su corazón a algo más que no fuese un juego?¿sería Hinata capaz de manejar una relación y su concentración en su deporte?no lo saben ellos, no lo sabemos nosotros, lo que si es claro,es que esto apenas era un principio de todo lo que nos espera por recorrer.

//𝙃𝙊𝙇𝘼𝘼𝘼𝘼𝘼𝘼𝘼,𝙖𝙮,𝙗𝙪𝙚𝙣𝙤,𝙚𝙨𝙩𝙚 𝙚𝙨 𝙢𝙞 𝙥𝙧𝙞𝙢𝙚𝙧 𝙛𝙖𝙣𝙛𝙞𝙘,𝙚𝙨𝙥𝙚𝙧𝙤 𝙩𝙚𝙣𝙜𝙖 𝙖𝙥𝙤𝙮𝙤 𝙮 𝙡𝙚𝙨 𝙜𝙪𝙨𝙩𝙚 𝙩𝙖𝙣𝙩𝙤 𝙘𝙤𝙢𝙤 𝙖 𝙢í 𝙢𝙚 𝙫𝙖 𝙖 𝙜𝙪𝙨𝙩𝙖𝙧 𝙚𝙨𝙘𝙧𝙞𝙗𝙞𝙧𝙡𝙤 ^^
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