𝓵𝓮𝓽 𝓶𝓮 𝓵𝓸𝓿𝓮 𝔂𝓸𝓾 - (ᴋᴇɴʜɪɴᴀ)

𝓬𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 9 - ᴡʜᴏ ɪꜱ ʜᴇ?

¿Naranjita?¿está todo bien? - Dos preguntas fueron suficientes para conseguir que Hinata saliera de su trance imaginario, parpadeo un par de segundos y se giro por inercia buscando con la mirada al ojiambar, al no verlo volvió su vista hacia su vecino y como noto la despreocupación en su rostro, entendió que todo habia estado en su cabeza.

Y ustedes se preguntarán¿cómo es esto posible? sencillo, tomen asiento y déjenme explicar la situación. Tanta era la carga de conciencia que tenía Shoyo al tener citas dobles casi todos los días que ya su propia mente estaba comenzando a pasarlo a llevar, sus mejillas rápidamente se colorearon y asintió con rapidez buscando salir de aquel obvio momento traumático, debía de replantearse muchísimas ahora en los próximos días.

- Claro, sería un placer cenar contigo y conocer a snow, tan solo déjame ordenar un poco mi piso, es realmente un desorden.- y así fue como la inminente puerta negra se cerró por completo, dejando a un emocionado Sugawara del lado de afuera y a un exaltado ojinaranja del lado interior, tenía que buscar una solución rápida y una excusa para su galán a medio vestir esperándolo en su habitación, de verdad amaba meterse en desastres, pero suerte era de lo que carecía para luego buscar salir ileso.

Camino decidido en dirección a la habitación y al cruzar el marco de la misma toda idea que había tenido de invitar a kenma a irse de su cómodo departamento de fueron por un tobogán grande al divisar como el medio rubio estaba acurrucado a uno de los peluches favoritos de Hinata, se trataba de una pequeña manzanita rojiza con una bonita cara dibujada de forma tierna, tal escena lo dejó tan anonadado y encantado que no pudo decir palabra alguna, las había perdido en el aire al igual que cualquier pensamiento coherente, ¿cómo haría ahora?¿debía dejarlo dormir e irse con sugawara o simplemente cancelar aquella cena imprevista y disfrutar de la ternura que tenía enfrente?; mucho y nada cruzaba la mente del pelinaranja, el cual se dedico a suspirar rendido y tan solo seguir con su guión. Luego de acobijar a Kenma se cambio de ropa lo más rápido que pudo y se fue del departamento en completo luego de dejar una pequeña nota en la mesa principal:
" Volveré, lo prometo."

Toco el timbre vecino y se quedó pensando y pensando, le llenaba de culpa el solo pensamiento de haber dejado a Kozume solo en su departamento, pero ya había accedido a la cena, y si Hinata era algo, era fiel a su palabra.

- Vaya, que será lo que te tiene tan pensativo hoy.. - murmuro Sugawara captando su atención, este estaba apoyado sobre el marco de la puerta con expresión de gracia.

- Ah..buenas noches suga, de verdad gracias por invitarme a cenar. - Formuló una sonrisa de forma suave y creando una especie de reverencia cortés ingreso en el ya conocido departamento vecino.

Sugawara le siguió el paso y tras cerrar la puerta y voltear a verlo, contuvo una pequeña risilla que amenazaba con salir, en su mesa principal estaba todo hermosamente decorado para darle continuación a su cita de la tarde, ubicados en el medio se encontraba lienzos y herramientas de trabajo suficientes para dejar fluir sus ideas e inspiraciónes.

No tardaron mucho en comenzar y comer la pizza que acompañaba aquella bonita y artística velada, Hinata estaba algo desorientado al ya no saber que pintar, había reflejado sus ideas en los lienzos que tenía en su casa ya colgados y ahora solo se le venía a la mente naranjas y Kenma, cosa que se rehusaba a retratar, alzo la vista en buscá de inspiración y la imagen de su compañero de cena fue suficiente para dejarlo boquiabierto y con un mar de ideas.

Frente a si tenía a sugawara completamente despeinado y con una rebanada de pizza en los labios, unos bellos lentes blancos realzaban por completo aquellos orbes grises que tanto resaltaban en el y a través del mismo vidrio se podía divisar ligeras pecas esparcidas en su piel, definitivamente era una musa excelente (y un hermoso partido, todos los sabemos). Sin pensarlo de más comenzó a bocetear con lápiz y borrar con una goma todo lo que venía siendo la base del retrato, no se quería perder de ningún detalle o cosita mínima que hicieran imperfecto el cuadro, sin duda lo conservaría y colgaría si llegaba a quedarle tal y como lo estaba graficando en su mente.

Por otro lado, sugawara estaba totalmente inmerso en su pintura, hace ya unos 15 minutos había comenzado a dar las primeras luces a su obra y estaba quedándole espectacular bajo su ojo crítico.
Se trataba de un lienzo cuadrado en el cual yacían Hinata Shoyo sentado sobre un piso de madera marrón claro, completamente alegre y con una hermosa sonrisa en el rostro, sonrisa que iba dedicada al pequeño animal blanco situado en sus pequeños brazos, porque si, estaba retratando a su crush con su pequeño snow,¿que más tierno que eso?

Al rededor de 30 minutos reloj habían transcurrido en aquel departamento y el más bajo de los dos ya sentía las piernas cansadas de estar sentado, por lo que se disculpo de forma dulce y pregunto por el baño, debía lavarse un poco la cara y caminar ya que estaba de pasada, en aquel trayecto aprovecho el recorrido hasta la última puerta de aquel pasillo para mirar los diversos cuadros familiares colgados, le llenaba el pecho de ternura ver las fotos de su peliblanco pequeño en brazos de una mujer muy similar a el, "ha de ser su madre" penso Hinata y siguió de largo hasta finalmente llegar a la habitación de baño, el cual estaba perfectamente limpio y ordenado.

El sonido del timbre y un grito de felicidad fueron los sucesos que lo hicieron salir de su tan íntimo momento, camino con discreción y preocupación hasta la sala y al divisar aquella cabellera peliblanco volvió a respirar con tranquilidad, o eso creyó, no tardo ni medio segundo en divisar la cabellera castaña oscura, aquel individuo desconocido para Hinata tenia un porte completamente elegante pese a su altura, no debia de medir mucho más que el y eso se reflejaba en la clara diferencia de tamaños entre el nombrado y sugawara, quienes se encontraban en lo que parecia un cómodo abrazo.

- Umh, ya debo irme Suga, mañana tengo clase temprano. - Dijo sin titubear un claro e incómodo Shoyo, el peliblanco tardo un par de segundos en girar a verlo, su expresión era de tal emoción que removió algo en el corazón de Hinata, algo seguramente no muy bueno.

- Hina! ven ven, acércate. - Pidió el ojigris dando saltitos en su lugar, ahora se encontraba unos pasos alejado del castaño frente a el, quien había dejado de sonreír inmediatamente Hinata había aparecido en su campo de visión. - El es akaashi, mejor amigo de toda la vida - presento sugawara con una sonrisa totalmente grande y brillante, la visita inesperada realmente le estaba haciendo ilusión.

- Es un placer al fin conocerte, Hinata. - Murmura en tono bajo y escalofriante el ahora conocido "akaashi" al tiempo que extendía su blanca mano a Shoyo, quien la miró con desconfianza pero a los segundos accedió al apretón de manos, el cual se sintió como tocar el fuego mismo, algo realmente no iba bien y sus alertas internas ya comenzaban a sonar.

Se dice por ahí que cuando dos almas se alejan y luego se vuelven a encontrar, es porque estaban destinadas¿que opinan ustedes?

//HOLAAAAA, lo vuelvo a subir porque se subió cortado💔💔, espero realmente sea de su agrado y les guste leerlo tanto como a mi escribirlo, nos vemossss🎀🎀//