En los ojos de ella

<<Sigues estando bien>>

Hasy

Es martes por la tarde, estoy llegando a la universidad, cuando cruzo la puerta de entrada puedo ver a gente conocida sentada en los bancos del patio, veo a gente estudiando, a gente escuchando música, a gente que solo está mirando el atardecer junto a la playa, a gente con su pareja...
Oh... Cómo odio el amor, lo odio, pero a la vez, como adoro el amor, ese sentimiento de sentirte tan ingenuo ante todo, el no saber cómo te sientes puede ser tan frustrante en ciertos momentos y a la vez tan hermoso...
No sabría como explicar que es el amor.
Yo he estado enamorada, una vez, pero no acabó bien. No me duele recordar lo felices que fuimos, a veces me frustra el no poder volver a vivir esos momentos, el poder recordarlos pero no volver a recrearlos es lo doloroso.
Entro a las clases y me siento en uno de los sitios más al fondo, ya hay gente en clase, veo a todos estudiando. Eso me extraña, no hay exámenes hasta dentro de un par de semanas ¿no? Preguntaré por si acaso.

-Disculpa...Hanna ¿no? -digo acercándome a la chica cerca de mi sitio
-Sí, dime
-¿Para qué estás estudiando?
-Hasy, hoy hay examen -dice señalándome el tema

Oh no, ¿no era dentro de dos semanas?, no había estudiado casi nada, dios, no me había dado tiempo joder.

-¿Cómo?, ¿y qué otros exámenes hay? -le digo preocupada
-Esta semana este y el de biología, dentro de un par de semanas es la semana de exámenes, ¿tienes todos los que hay?
-Sí, esos sí, ¿cuándo es el de biología? -pregunto angustiada
-El jueves, de siete a nueve
-Oh joder, gracias
-No hay de que, ¿qué vas a hacer?, ¿has estudiado? -me dice mirándome preocupada
-No tengo ni idea, no sabía que era hoy, no me enteré cuando lo dijo

¿Y si me voy?, pensé. No puedo hacer eso, tengo que hacer el examen. Siempre me podría copiar, pero eso me sienta tan mal, me da miedo que me pillen. Intentaré hacer lo que pueda y el resto iré viendo por el camino.
Los minutos que me quedan saco el libro y me lo miro todo por encima, pero de poco sirve.
Suena el timbre, a los pocos minutos llega el profesor.

-Bien alumnos ,como sabéis hoy tenemos examen del tema 7

Estaba tan harta, tan cansada de cada día, tan harta de esforzarme y no sacar lo que quería...

-¿Es muy difícil? -pregunta una alumna llamada Sheila
-No lo creo -dice el profesor sonriéndole de lado

La muchacha sonríe. Esa chica no me da buenas vibras.
Una vez que ha terminado de repartir nos explica que pasará si nos pilla copiando o cosas así.

-Bien, el examen comienza... Ahora -dice mirando su reloj

Giro el examen y veo 20 preguntas, 15 de tipo test y las otras 5 de compresión.
Bueno, podría ser peor.
Lo primero que hago son las preguntas de tipo test, ya que puedo recordar más fácilmente lo que había estado estudiando. Dejo en blanco las que no recuerdo o no me suenan de nada para resolverlas después.
Cuando paso a los ejercicios de comprensión leo por encima los tres primeros, pero no puedo recordar nada, así que paso a la cuarta, la cual recordaba a la perfección ya que habíamos hecho una parecida en clase y yo lo había tenido bastante bien.
Una vez que he terminado todas las que podía recordar, me quedo un rato pensando. No sé si eso me llegará para sacar buena nota, debería intentar hacer más... Quedan 14 minutos para que se acabé el tiempo de examen, en ese mismo instante puedo ver como Sheila gira el examen a la hoja donde estoy yo, puedo ver prácticamente todas sus respuestas, empiezo a mirarlas disimuladamente para que el profesor no me vea. Cuando empiezo a comparar las respuestas suyas con las mías veo que tenemos muchas distintas.
Eso me parece raro, ya que en todos los exámenes que habíamos hecho ella había sacado muy buena nota, pero yo creía estar muy segura de las respuestas que había puesto en el examen. Como me faltaban algunas por poner miré a las suyas y copié las respuestas que ella había puesto, no estaba bastante segura de que estuvieran bien, pero como ella siempre sacaba dieces y nueves no cambié ninguna.

-¡Se acabó el tiempo! -grita el profesor

Fuimos entregándole los exámenes uno a uno.

-Tenía razón profe, era muy fácil -dice Sheila entregándoselo
-Me alegro mucho señorita Sheila, recuerde que está tarde se queda para preparar el taller -dice el profesor sonriéndole
-Cierto

...

Todavía quedaban unas tres horas para que pudiera llegar a mi casa, cuando el profesor se fue no pasaron ni cinco minutos hasta que vino el otro. Hoy nos daría la nota de los exámenes del otro día.

-Estoy bastante decepcionado, pensé que los exámenes habían salido mejor chicos -dijo empezando a repartir los exámenes

Eso me preocupa, a mí me había salido bien, o eso creía, ahora ya no lo tenía tan claro.

-Hasy, no se que ha pasado -dice dándome el examen con cara de decepción

Con ansias giro el examen para ver mi nota.

-Que... -digo notando como se me acelera el corazón

Un suspenso... Había suspendido.
Noto como mi cara arde, como empiezo a no poder controlar mis lágrimas y como mi pie se mueve inconscientemente debajo de la mesa. Necesito salir de aquí.

-¿Puedo ir al baño? -le pregunto tapándome un poco la cara al profesor
-Sí, claro

Salgo corriendo de la clase y me meto al primer baño que encuentro, cierro la puerta y me siento en la taza subiendo mis rodillas a la altura de mi cara.
Y en ese mismo instante es cuando caen, todo el esfuerzo, toda la dedicación que había dedicado ahora cae por mi cara en forma de lágrimas, estoy cansada de que por mucho que lo intente no lo consiga, no tengo ganas de hacer nada. Lloro más alto, hablando conmigo misma para intentar tranquilizarme pero no funciona...
No sé cuándo tiempo pasa pero escucho a alguien entrar, intento que no se me escuché pero poco sirve, alguien acaba de preguntar.

-¿Todo va bien? -pregunta una voz masculina

Me he debido de meter a uno de los baños mixtos, si es que no me he equivocado y he acabado en uno de chicos.

-Si, no pasa nada -digo secándome las lágrimas con la manga
-¿Segura? -pregunta otra vez esa voz
-Por favor, déjame, todo va bien -digo bajando las piernas de la taza del váter
-Está bien...

Espero un par de minutos y cuando creo que no hay nadie abro la puerta y salgo. Pero veo que no estoy sola.

-¿Eres el chico de antes? - digo con la voz aún un poco cortada
- Sí, ya me iba, no te preocupes -dice cogiendo su mochila

En ese momento vuelvo a la realidad y veo como de desordenado tengo el pelo y lo roja que tengo la cara, ¿cómo puedo dejar que alguien que no sea cercano a mí me vea así?

-Oh, que vergüenza dios -digo tapándome un poco la cara
El chico sonríe
-¿Vergüenza porqué? -dice mirándome- todo el mundo llora
-Lo sé, lo digo por las pintas que tengo -digo lavándome la cara
-Aún así, sigues estando bien -dice parado en la puerta
-Gracias, supongo -digo ahora un poco más relajada
-Soy Nick por cierto -dice acercándose y poniendo su mano en frente de mí
-Hasy -digo estrechándole la mano- ¿En que curso estás Nick?
-Hemos coincidido en un par de clases me parece, estoy en el equipo de fútbol de aquí
-Pues no te recuerdo de nada, lo siento -digo encogiéndome de hombros
-Oh... No te preocupes -dice un poco decepcionado
-Ya te puedes ir si quieres -le insinué
-¿Por qué llorabas? -me pregunta directamente

Me sorprendo ante eso, ¿por qué se lo diría a él?

-Solo si lo quieres contar claro -dice contemplando mi gesto
-No gracias, estoy bien, un gusto conocerte Nick -digo terminado la conversación
-Chao' Hasy -dice yéndose

Le hago un gesto con la cabeza para despedirme y sigo lavándome la cara.
Peino mi pelo con los dedos y me aseguro de no estar roja para volver a clase, aunque ya para lo que quedaba no merecía la pena ir.
Cuando estoy saliendo del baño escucho el timbre sonar haciendo que se escuchen las sillas arrastrándose. Llego a clase, recojo mi mochila y decido irme, no me apetece seguir pasándolo mal hoy.