Story Time #3

331 37 26
                                    

Chismesito de las chicas que le dieron chocolates a shoto y terminamos enterandonos que eran unas cariñosas.

Lenguaje explícito y vulgar ⚠️

°

Si leyeron el capitulo anterior donde me agarraba las mechas con unas tipas locas, sabrán que antes de eso, shoto y yo habíamos tenido una conversación donde el se ofreció a darme de los chocolates qué le dieron ese día por San Valentín.

Pues en si tenía planeado darme los chocolates PERO NO TODOS, el mismo dijo que se los llevaría a su casa para regalárselos a Fuyumi y a Endeavor.

Y adivinen.

Terminó regalándome todos los chocolates por que se sintió culpable por lo que sucedió a la salida.

Entre esos chocolates claramente también me regaló los que le habían entregado las chicas de las que voy a hablar.

Me encontraba al día siguiente en clase con Midnight después de haber hablado con los padres de las locas del centro.

Como no había desayunado aproveché la cabezota de Katsuki para cubrirme y sacar los chocolates que había empacado esa mañana.

Abrí con cuidado el empaque para no hacer mucho ruido y empecé a comer.
Katsuki con su oído super sonico logró oírme y se giró para ver que comía.

─No te muevas que me ven bobo.─ me incline hacia la izquierda para evitar estar a la vista de Midnight.

El levantó una ceja y no se movió se su lugar, estiró el brazo y me arrebató un chocolate.

Rata hebrea.─ lo maldije en español cuando se dió la vuelta.

A los pocos segundos sentí cuando un papel golpeó mi cabeza, me giré y estaban Mina, Denki y Shindo haciéndome ojitos para que les diera chocolate.

Rodé los ojos con fastidio, negarles comida se sentía como no darle un pancito a un perrito flaco de la calle.

Con precaución les lancé los chocolates y me quedé sin nada. Logré comerme únicamente un chocolate y con aburrimiento empecé a quitarle el papel pegado a la cajita para distraerme.

─¿Y esto?─ pregunté en un susurro para mi misma al ver un número con un enlace pegado detrás de la cajita.

Al instante recordé que esos eran lo chocolates qué las chicas del día anterior le habían dado a Shoto. Ignoré el número y centré mi atención en el link que se habían tomado el tiempo de copiar.

Saqué mi celular y empecé a copiar tal cual el link en el buscador. Al instante me mandó a una página muy sospechosa qué preguntaba si era mayor de edad.

Nada más me bastó darle click al botón de si, para que me apareciera un culo enorme en toda la pantalla.

─¡No! ¡no!─ me sobresalté como tonta a pesar de que era bastante obvio el contenido que me aparecería luego de darle clic.

Traté de esconder el celular en mi pecho y miré a ambos lados para verificar que nadie lo haya visto, cuando lo confirmé me incorporé más precavida y le bajé el brillo al celular.

Mi RD de BNHADonde viven las historias. Descúbrelo ahora