Depend

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Christopher sentía su pecho arder y su cara doler, para los demás sonrió pero al observar de reojo a su pareja y a su amigo quiso quemarlo todo, destruir, romper todo a su paso. 
Hyunjin reía tan alegre, tan coqueto, y su compañero no era capaz tampoco de poner una distancia, esas miradas, el tono de voz, todo alimentaba su ira.
contando hasta el infinito es como mantuvo en calma aquellos celos que le consumían.

—Si Hyunjin y yo tenemos problemas, es cosa nuestra ¿No? No entiendo a qué se debe ahora tu cercanía con él. En el pasado dijiste ser mi amigo, fui amable contigo y te cuide, dijiste no ser como yo, dijiste estar seguro de quién eras y lo que querías. Pero ahora, intentas alejarlo de mí, coqueteando incontables veces en frente mío

Changbin atónito río un poco ante lo que pensó era una broma, toda aquella absurda situación lo parecía.

Christopher sentado con solo la luz de lámpara de la mesa de estar bebiendo un café frío, como si hubiera estado esperando por horas, a mitad de la noche esperando que saliera al baño pero  la mirada de su mayor no era broma.
Ojos rojos por horas de desvelo, el temblor en su cuerpo por el exceso de cafeína.

—No espero nada de tí. Pero si tienes un poco de decencia alejate de él.— comentó por último el mayor dejando completamente solo a Bin  quien por primera vez sintió miedo de a quien considera su Amigo, de su líder, del hombre que antes le protegía. Una desastrosa relación estaba sacando lo peor de él.

El mayor entro al cuarto que compartía con Hyunjin, en total oscuridad, con su celular alumbró un poco. El menor durmiendo en posición fetal, abrazando una almohada... Era la persona a la que juraba amar, pero desde hace tanto tiempo el pecho de Bangchan solo sentia dolor, celos, rencor.

Tenía tanto deseo de abrazar al menor...abrazarlo con tanta fuerza hasta asfixiarlo, escuchar y sentir el cuerpo contrario retorcerse en busca de aire, para poder así sentir de nuevo el amor que antes sentía. Si sentía que la había perdido para siempre, si sentía que no podría abrazarlo más, quizá podría empezar de nuevo, ser una buena persona, alguien diferente, que no hiciera sufrir a Hyunjin.

No lo había hecho concientemente, Apagar el brillo y sonrisa del menor no fue intencional pero aunque deseara con todas sus fuerzas cambiar, no podía, así era como era verdaderamente, una persona que causa dolor.

Porque se había escondido bajo una máscara de protección y cuidado pero solo eso, una máscara que ocultaba su verdadero ser.

Se sentó despacio en la cama, observando respirar al contrario, queriendo pasar sus manos por él, hasta llegar a su cuello, ahogarlo, asfixiarlo, hacerle sentir todo el dolor que Hyunjin le hacía sentir.

El ardor en los pulmones, aquellos celos que le daban unos dolores horribles de cabeza, el estrés constante.

Sabía a la perfección que sus pensamientos eran incorrectos, malos, sabía que de actuar tendría muchos problemas y cuando se daba cuenta, cuando en sus momentos íntimos a modo de castigo era rudo, la culpa llegaba, el deseo de cambiar.

No sucedía, no podía, sus sentimientos eran mucho más grandes que él, la montaña rusa de emociones, no sabía que hacer con todo eso...

Amaba a Hyunjin pero odiaba el buen concepto en en que lo tenían todos, sabía de su belleza física y amaba eso también, pero el menor usaba eso tan descaradamente, conseguía lo que quería con ello, lo hacía a propósito, para provocarlo, para hacerlo rabiar así.

Le gustaría que la gente se diese cuenta de ello, para dejar de ser el único malo en todo eso. Su desesperación era tanta que deseaba mucho que Hyun desapareciera para siempre, que no respirase más, lloraría mucho por él, demasiado, una parte de él se iría con Hyun pero también todos sus malos pensamientos.

★★★

Días después, cuando todo parecía normal y mejor nuevamente todo se rompió, Hyunjin se enteró por propia boca de Changbin aquel suceso con su líder.

—Por favor perdóname. Por favor, por favor.

—¡No! ¿Cómo puedo perdonar esto? ¡Changbin es nuestro amigo! Dudas de mi y de él, y lo amenazas. No sé cómo puedo estar con alguien como tú. 

—Por favor

Una vergonzosa discusión que había Sido escuchada por todos sus compañeros de grupo, algunos asustados pero Changbin y Jisung acostumbrados.

El mayor rogó un poco más, el solo quería que todo fuera como el inicio de su relación, aquel hermoso camino de miel y rosas, afecto puro pero Hyunjin tapó sus oídos y huyó, el estaba cansado de eso, de la desconfianza de Christopher y todas las falsas acusaciones.

Estaba muy cansado, pero no sabía salir de eso.

Horas después, en el departamento que compartían, después de que Christopher finalmente explorará rompiendo todo, lastimando sus manos al punto de sangrar Hyun le curó, con los labios húmedos de sus lágrimas besó aquellas manos prometiendo salir de aquella mala situación juntos.

Jamás mejoraría, eso lo sabían ojos ajenos, habría un muy mal final para ellos dos...








★★★★★★

Amigos míos esto solo es ficción. Siempre que vean banderitas rojas y puedan alejarse a tiempo de relaciones insanas, háganlo.



Hyunchan, O.S & DrabblesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora