Molly sonrió al ver a su amiga Marie y corrió hasta donde estaba ella para sentarse a su lado
- Hola
- Molly - sonríe la niña - ¿Como estás?
- Bien ¿Estás comiendo?
- ¿Quieres probar? Mamá me hizo panqueques y ya no me compro hamburguesas como todos los días
- Me alegro tanto..... mamá me preparó ensalada de frutas - dijo mientras abría su lonchera - ¿Quieres probar?
- Si, se ve delicioso pero antes de probarlo quiero darte las gracias
- ¿A mí?
La de ojos azules asintió - gracias por ayudarnos, mamá empezó a trabajar en una de las empresas de tu mamá, tenemos una casa bonita y muy grande, ya no nos vamos a mojar cuando llueva - Molly sonrió de lado por qué ella también había pasado por eso
- Yo también pasé por eso, no tenía un hogar hasta que apareció mami Lauren y se enamoró de mamá Camila
- Gracias de verdad Molly, eres una gran amiga - la niña la abraza
- Te quiero mucho Marie..... tengo que confesarte algo pero espero que nuestra amistad no cambie
- Dime, te prometo que nada entre nosotras cambiará, siempre seremos amigas
- Es que no se cómo decirte..... yo no soy una niña completa
Marie frunció su ceño - no entiendo
- Que no soy del todo niña - l dice acomodándose las piernas cruzadas - tengo un...... tengo un amigo en medio d mis piernas, tía Dinah me dice que es un amigo que de grande lo utilizaré mucho - frunció su ceño - no la entiendo, mi mamá siempre le termina pegando la cabeza
- Digamos que eres mitad chica y mitad chico ¿Así?
Molly asintió e inmediatamente sintió la mano de Marie encima de la suya
- Yo te quiero así tuvieras tres ojos - se rieron - te quiero Molly
- Yo también te quiero a ti, eres muy bonita Marie
La pequeña niña se ruborizó ante las palabras de la ojiverde
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Por otra parte Camila se encontraba en su habitación tomando la ropa que Lauren había dejado tirado en la habitación cuando regresó en la madrugada, la ojiverde nuevamente había salido y lo que vio en la camisa de Lauren le dolió mucho, tenía labial rojo aquello quería decir que le estaba siendo infiel, pero ¿Por qué le dolía? Camila sabía perfectamente que Lauren iba a hacerlo por qué ella no la quiere, se lo dijo varias veces
- Camila, cariño tenemos que...... - clara se quedó mirando la camisa manchada y no lo podía creer - que significa eso
Camila sonrió de lado - nada, solo son cosas de Lauren - volvió a recoger lo demás - ¿Estamos listas para irnos a la empresa?
- Si, pero antes déjame decirte que aquello no me gusta para nada, cuántas veces ha salido por las noches?
- Desde que estamos juntas, osea estos tres días.... llega ebria puedo saberlo por el olor a alcohol de su camisa - Camila le extiende la camisa - por favor no le diga nada, no quiero que ella piense que yo le estoy diciendo esto para que la regaño o cosas así
- Pero no puedo quedarme quieta al saber que ella está haciendo esto, ahora tiene una familia
- Clara, ella no siente amor por mí, está conmigo por lo de su abuela..... también por qué quiere a Molly pero no por amor hacia mi
- He visto como la miras últimamente ¿Sientes algo por ella? Mi hija te gusta en serio
- Mejor no hablemos de eso
- Está bien, pero me quedo con un estoy enamorada de Lauren - sonríe clara - deja eso allí que las empleadas vienen a recogerlo después, vámonos a la empresa
- Si
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Por otra parte se encontraba Lauren mirando la pantalla de su computadora, le hacía extraño que Camila no viniera aún, dos toques hicieron que sacara los ojos de la pantalla
- Ya vine - sonríe Camila
- Ya veo - lauren no quita la mirada de la pantalla - ¿Todo bien? Estaba por llamarte por qué no venías aún
- Tú mamá me invitó a un lugar, disculpame pero no pude negarme
Lauren sonrió - entiendo..... estás hermosa hoy
Camila prefirió no decirle nada ni tampoco mirarla
Pasaron dos semanas y Lauren no dejaba de salir por las noches, y en todas las ocasiones su camisa venía de lápiz labial pero Camila no podía reclamarle nada
Aquella noche lauren había salido y su hija Molly se encontraba en la cama de sus madres donde decidió quedarse a hacerle compañía un momento, Camila pensaban que Molly no se daba cuenta pero está si lo hacía, sabía que su madre Lauren no paraba en las noches en casa y que no dormía con su madre Camila, también había escuchado que llegaba ebria y aquello le estaba molestando a la pequeña
- Quisiera que mamá y tu estuvieran bien
Camila se quedó mirándola a los ojos - estamos bien cariño
- Eso no es verdad, mamá Lauren no duerme aquí, no me mientas mamá
Camila suspiró - está bien, pero quizas por qué tiene compromisos
- ¿De noche? Yo casi no la veo y no juega conmigo como antes - dijo tristemente
Tras decir eso se acurrucó en el pecho de su mamá y se quedó dormida al instante, las horas pasaron y estaban por ser a las cuatro de la mañana cuando sintió la puerta abrirse
- Lauren ¿Eres tú? - la ojiverde encendió las luces para que comprobar que era ella - que bueno que estás en casa
Al acercarse a la ojiverde lo agarra con fuerza de la cintura - tengo ganas Camila
- No vamos a hacer nada Lauren, estás ebria, apenas te puedes parar
- Vamos a hacerlo por qué yo así lo quiero
- Te dije que no Lauren - la ojiverde la estaba besando a la fuerza sin saber que Molly estaba viéndolo todo - suéltame Lauren, te dije que no quiero
- ¡Te dijo que la soltaras!