Salir del departamento fue demasiado rápido. Cuando llegó la ambulancia los paramédicos subieron a Dazai a una camilla y rápidamente le proporcionaron los primeros auxilios correspondientes.
Recuerda subirse a la ambulancia con el pelirrojo. Su pijama azul ahora estaba manchada de color carmesí al igual que sus manos.
Lo último que logro observar antes de que la ambulancia se pusiera en marcha fue que Tanizaki estaba llamando a alguien, lo más probable es que fuera al presidente y Naomi intentaba tranquilizar a Kyōka y Kenji.
Se disculparía con ellos una vez que toda esta pesadilla terminará...
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El monitor cardíaco le daba esperanza, mientras siguiera sonando significaría que el corazón del castaño seguía latiendo.
Que todavía seguía con vida...
El pelirrojo a su lado se veía agotado, su ropa también contenía manchas de sangre, su cabello estaba bastante alborotado y sus ojos transmitían un sentimiento agridulce.
De pronto aquella mirada azulina se posó en él y emitió una emoción diferente.
Quizás lástima.
O tal vez comprensión y tristeza.
—No creí que fuera capaz de hacerlo— mencionó el mafioso, desviando su mirada nuevamente hacia Dazai.
—Siempre lo hace... — contestó Atsushi en un tono bajo.
—Por supuesto — inquirió Chuuya con una risa seca. —Pero solo lo hace para sentir que la muerte no lo ha abandonado. Cuando se tira a un río y siente que le falta el oxígeno, saldrá a la superficie. Cuando intenta ahorcarse o probar un veneno, procura que alguien esté presente porque sabe que estarán al pendiente de él o lo regañarán por querer intentarlo—
—Sin embargo, esta vez es diferente, se hirió a sí mismo con la intención de no volver a despertar. Aunque creo que eso tú ya lo sabes... — terminó por decir el pelirrojo.
Y por supuesto, nada está lejos de la realidad, es algo que siempre pasaba por la cabeza de Atsushi, pero siempre se engañaba a sí mismo diciendo que solamente estaba exagerado al sobre pensar las cosas.
—No es la primera vez que hace algo así... — Volvió a hablar el ejecutivo, captando nuevamente la atención del detective pensando que le hablaba a él, pero más bien parecía que aquellas palabras iban dirigidas para sí mismo.
—¿Siempre terminaba de esta forma?— pregunto el albino con lágrimas al borde de sus ojos.
Pero Atsushi no necesitó una respuesta, la mirada del mafioso afirmaba su pregunta.
¿Cómo aquella mirada tan expresiva y brillante le podía corresponder a alguien que pertenece a la oscuridad?
—Dazai siempre ha sido así desde que lo conocí, una persona sin ningún deseo de vivir. Era molesto tenerlo de compañero, gracias a él tuve que aprender todo sobre primeros auxilios y más de una vez cocí sus heridas—
—Pero también hubo un tiempo donde no intentó atentar contra su vida... fue cuando conoció a Sakunosuke y al traidor de Sakaguchi— relató Chuuya con un sentimiento indescifrable. —Hasta cierto punto con ellos actuaba como un adolescente normal, hablaba, bromeaba y reía abiertamente como si los tres hubieran sido amigos de toda la vida; sin embargo, en la mafia la vida de nadie está garantizada, cualquier persona podría morir de la noche a la mañana—
Chuuya podía recordar tan vívidamente a aquel joven castaño de 15 años, un niño con una mirada escalofriante que no le importaba su vida ni la de los demás, alguien que no le afectaba insultar, golpear o torturar.
Aquel albino había conocido la mejor versión del ex-mafioso. Una versión diferente superficialmente, alguien que dejó aquellos pensamientos oscuros e intrusivos en lo más profundo de su alma.
—Gracias... — inquirió Atsushi de repente.
¿Por qué me agradeces?—preguntó el pelirrojo.
—Porque incluso antes de que Dazai hubiera conocido a Oda ya tenía a alguien con quien contar, una persona que pudiera curar sus heridas. Así que, gracias por mantenerlo con vida... — declaró el peliblanco con una pequeña sonrisa, dejando a la persona frente suya con una mirada de sorpresa.
—No eres tu la persona que debe agradecerme— expresó el mafioso, ahora con un tono serio.
—Lo sé, pero aun así quiero hacerlo... aunque tengo la impresión de que Dazai también está muy agradecido, pero no lo dirá porque lastimaría orgullo— afirmó el detective, recibiendo una pequeña risa como respuesta.
Entonces la ambulancia detuvo, dando a entender que habían llegado al hospital.
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Vivir (Soukoku)
Fanfiction¿Alguien lloraría por ti si el día de mañana dejaras de respirar? Las personas siempre estamos rodeados de dos tipos de personas. Gente honesta que busca tener una buena relación contigo y su contraparte, personas que no dudarán utilizarte para su p...