Capítulo 45

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"¿Qué quieres decir? ¿Dilo de nuevo?"

Creo que Xu Tangyi, si hubiera sabido que Feng Jie y yo teníamos algo que ver, con el grado de protección de mis deficiencias, supongo que habría estado furioso en este momento.

"No dije nada. Acabo de decir que dejaste tu teléfono móvil conmigo". Feng Jie se detuvo y me dijo con una sonrisa: "Sin embargo, parece estar muy enfadado".

Tan pronto como cayeron las palabras de Feng Jie, mi teléfono móvil sonó a tiempo, era Xu Tangyi.

No lo recogí de inmediato, pero miré a Feng Jie con frialdad y dije: "Puedes irte".

Feng Jie no se vio obligado a guardarlo esta vez. Solo me miró profundamente y soltó la mano en el marco de la puerta, e inmediatamente cerré la puerta.

Mientras caminaba hacia el dormitorio, cogí el teléfono.

Antes de que me pusieran el teléfono en el oído, escuché la voz enojada de Xu Tangyi: "¡Tú apellido es Feng, será mejor que no toques a mi hermano antes de que vuelva!"

Estuve en silencio por un momento: "Hermano, soy yo".

El lado opuesto se sorprendió por un momento: "¿A Nian?"

Entonces Xu Tangyi preguntó: "¿El hombre de apellido Feng sigue contigo? No te preocupes. Acabo de informar a Zhang Lu de lo que han pasado. No cuelgues el teléfono ahora."

"No, se ha ido". Añadí: "No te preocupes, estoy en casa".

"¿Estás en casa? Xu Tangyi, dudo de Feng, pareció pensar en algo rápidamente y preguntó: "¿Se mudó al 1602?"

"Lo hizo".

"¿Cuándo ha venido aquí? ¿Por qué no me lo dijiste?"

"No lo sabía, pero ahora no me hará nada". Después de una pausa, volví a decir: "Hermano, no soy un niño. Tenemos la misma edad, ¿verdad?"

"Entonces yo también soy tu hermano".

Me quedé sin palabras por un momento, y el teléfono estuvo en silencio por un momento.

Unos segundos más tarde, Xu Tangyi se ralenticó un poco: "A Nian, voy a participar en una reunión de licitación mañana por la tarde. Realmente no puedo irme, pero puedo volver por la noche. Antes de eso, quédate en casa y no vayas a ninguna parte. Le pediré a Zhang Lu y a otros que llamen a algunas personas más para que se queden en casa para acompañarte".

Justo cuando estaba a punto de decir que no tenía que ser tan problemático, escuché la llamada telefónica y Xu Tangyi hizo una voz baja.

"Nian, no tengas miedo. Te protegeré".

Las palabras no exportadas se convirtieron en una bola de algodón en un instante, pegada en mi garganta, y una acidez la llenó en un instante. Esta acidez se extendió rápidamente a mi corazón, haciéndolo tan agrio en un desastre.

Exhalé e hice todo lo posible para no temblar debido a la emoción, y acepté suavemente.

"Está bien".

Zhang Lu fue uno de los guardaespaldas enviados por Xu Tangyi para que me siguiera de vuelta a la ciudad A la última vez. Vino muy rápido y se llevó a otras tres personas con él.

Gracias a la casa relativamente grande de Xu Tangyi entraron, de lo contrario los cuatro hombres altos se pararían en la sala de estar y estarían apretados.

Cuando la tía Fang vio por primera vez a tanta gente de repente en la casa, se sorprendió. Después de saber que era un guardaespaldas, no dijo mucho. Solo preguntó si debería cocinarles en el futuro.

Domesticación mórbida Donde viven las historias. Descúbrelo ahora