2| La danza del eclipse

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── Se las decisiones que tomó madre, ya tu reinado se acabó por así decirlo.

── Debes casarte con una princesa europea. Hay muchas opciones, no permitiré que te cases con una musulmana asquerosa.

── Tu no insultes a los musulmanes y lo sabes muy bien, puede que no te cayeron muy bien en las cruzadas pero eso fue ya antes. Ya Constantinopla no existe, ahora es Estmabul y hay oportunidad de casarme con una princesa otomana, eso me servirá para crear una alianza.

Arthur miro a su madre quien había participado en las cruzadas hace mucho tiempo y no le caia bien los musulmanes pero no había opción, las princesas europeas no le gustaba mucho y no tenía opción, se podia casar con una princesa otomana sin problema alguno a pesar de lo que paso hace años.

La madre de este: Morrigan había gobernado por mucho tiempo desde la época de los reinos celtas hasta la llegada de la dinastía Tudor despues de la guerra de las dos rosas, abdicó a favor de su primogénito.

── Esta bien, dejo que te cases con quien quieras.  ── Morrigan miro a otro lado ya que su hijo tenía razón  ──. Tu ganas Arthur.

── Gracias mamá.  ── el inglés sonrió mientras se retiraba de los aposentos.

  Sabía que habia opciones de muchas princesas europeas de Francia, Sacro Imperio, Italia, etc. También habían parte de la nobleza que muchos codiciaban casar a una de sus hijas con él de ojos azules pero se negaba a casarse, quería vivir el amor.

── Thur.

── María, Victoria.  ── Arthur se agachó para abrazar a las dos pequeñas princesas  ──. ¿Donde están su hermano Arturo?.

── Esta dormido.  ── María sonrió mientras se separaba del abrazo a diferencia de su hermana menor ──. Se quedo dormido en sus lecciones y lo llevaron a acostar.

── Ya veo.

Las dos niñas eran hijas de Enrique VIII y de Catalina de Aragón, siendo nietos de los Reyes Católicos. María era la mayor seguido de Arturo y la pequeña Victoria, eran unos niños dulces y alegres.

── Padre.

── Jacques, Briana.  ── saludo a sus dos hijos mayores  ──. ¿Ya culminaron con sus clases?.

── Si papá, ya terminamos las clases.

── Eso me alegra mis niños.  ── Arthur sonrió mientras cargaba a María y a Victoria  ──. Vamos a comer algo, ¿Les parece?.  ── ellos asintieron para ir a la cocina.





•••

── Vamos pequeños quédense quietos.  ── Aysun intentaba bañar a sus tres sobrinos pero estaban inquietos  ──. Cálmense, ya después iran con su mamá.

  En el hannam se encontraba la de cabellos negros de 17 años bañando a sus tres sobrinos ya que su hermana Hürrem se encontraba dormida.

── ¿Que pasa?  ── escucho la voz de Lale  ──. ¿Necesitas ayuda Aysun?  ── estaba recostada en la entrada disfrutando de aquella escena divertida.

── Por favor. Hürrem está muy cansada y además me encargo de bañarlos.  ── Aysun sonrió cuando Lale se adentro y se arremango para ayudarlos a bañarlos  ──. Y además son muy inquietos.

── Así eran Kadir, Ahmed y Amira, inquietos que no le gustaba bañarse.  ── dejo caer el agua en la cabeza de la pequeña Mihrimah quien disfrutaba del baño  ──. Me recuerda mucho a ellos.

── Si.  ── Aysun tomo una toalla para cargar a Mehemd y secarlo con cuidado. Lale se encargó de las dos pequeñas  ──. Se nota que tienes un gran amor por los niños.

── Claro, porque yo tengo hijos y siempre me gustaba de cuidar de Şehzade y sultanas cuando eran bebés. ── Lale sonrió mientras iba a los aposentos de Aysun  ──. ¿Hürrem te dejo la ropa?.

── Si. Ya está ahí en mi habitación.  ── entraron con cuidado y Lale se encargó de vestirlos y Aysun de peinarlos, se notaba una gran amistad.

── Sultana.  ── una criada de Lale entro  ──. La madre sultana le está llamando, desea ver a sus nietos.

── Un momento.   ── Lale tomo en brazos a las mellizas  ──. Ven vamos Aysun.  ── fueron a los aposentos de Hafsa Sultán, la madre sultana.

Al entrar la pelirroja le dio un asentimiento mientras Aysun hacia una reverencia.

── Mis nietos preciosos. Acerquenlos.  ── Hafsa sonrió cuando vio a sus tres nietos  ──. Mis leones, están bien arreglados. ¿Los bañaron?.

── Así es.  ── Aysun asintió  ──. Recién están bañados y están frescos.

── Con razón.  ── Hafsa sonrió  ──. Son unos niños preciosos y valientes, pero veo que tienen sueño.

── Entonces me los llevo.  ── Aysun tomo a Mihrimah y a Mahtab con cuidado mientras Lale a Mehmed  ──. Con permiso, nos retiramos madre sultana.  ── hizo una reverencia para luego retirarse con Lale.

Aysun al regresar a sus aposentos, acostó a sus sobrinos en su cama rodeándolos de almohadas como protección y le ordenó a una criada que los vigile.

── Está noche habrá un eclipse. ¿Te gustaría verlo conmigo mediante el telescopio?  ── invito la pelirroja a la joven.

── Con gusto, no tengo problema.  ── Aysun sonrió  ──. De niña mi papá me enseñó el dibujo de un eclipse que vio y es precioso. La unión del sol y la luna es única.  ── confesó.





•••

La noche se hizo presente y el eclipse se hizo igual presente

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La noche se hizo presente y el eclipse se hizo igual presente. Era como una danza del sol y la luna que se unían cada cierto tiempo.

Delicada y dulce, hermosa, que expresaba un amor que era prohibido pero separados. Que tal vez en otra vida se iban a juntar para poder tener su amor.

Sin saber que un amor estaría por juntarse de nuevo...A pesar de todo iban a estar juntos para siempre.

¿O no?.

Que un rey inglés y una princesa otomana se iban a consagrar en un profundo amor.

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