Hotel Hazbin

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—Y le dije: Si vuelves a jalar uno de mis cuerno mientras estoy de espaldas,te golpeare tan duro que no volveras a despertar.—Balbuceo ____ mientras caminaba torpemente a su habitación.

—Te juro que si llegas a vomitarme encima yo mismo me encargaré de que tu no vuelvas a despertar.—Gruño Husk, el cual estaba llevándote a tu habitación, habías tomado toda la noche y no estabas en la capacidad de ir por tu cuenta a su cuarto, el demonio te sostuvo con cuidado de no dejarte caer mientras tu arrastrabas los pies.— ¿Dónde mierda conseguiste estos zapatos? Están pesados.—Se quejo ya que en su otra mano sostenia tus botas con plataforma.

—Shh,mami respeta el flow—Dijo con una sonrisa boba y luego dejo caer su cabeza.—¿A dónde vamos? Quiero comer helado.

—Cierra la boca o te meteré estas botas hasta la garganta.—Amenazó, si había algo que odiara Husk aparte de casi todo en su vida,era tener que lidiar con borrachos.

—Oh,Huskie~ no sabía que tenias esa clase de fetiches raros.—____ se burlo.-

—Te lo advierto ____,deja de hablar.—Gruño Husk mientras se detenía en la habitación de la nombrada.—Bien,aquí te dejo,ojalá te ahogues en tu vomito.

____ y Husk no eran prácticamente "amigos", trataban de no hablarse,si no en casos muy importantes. Nadie sabía porque no se trataban pero por Alastor sabían que ustedes dos se conocían desde hace mucho tiempo.

____ por su parte miro la puerta de su habitación,su vista era algo borrosa y sentía que todo le daba vueltas. Trato de tomar el pomo de la puerta pero no pudo.—Mierda ¿cuándo empezó a moverse esto?—Preguntó,ya que no podia encontrar la manera de abrir la puerta.

—Santa mierda, eres incluso más inútil de lo que recordaba.—Husk te aparto y abrió la puerta,se estaba desesperando.—Ahora entra y dejame en paz.

-Gracias mein Schatz—La mujer sonrio y entro a su habitación. Husk por su parte se congelo  al escucharte.

Hace mucho que no la escuchaba hablar en alemán,su cola se movio animadamente y él no pudo evitarlo,  se sonrojo levemente mientras rodaba los ojos y se alejaba.

—Lo que sea.—Murmuro de mal humor, aunque por dentro estaba levemente nervioso, eso lo había hecho recordar viejos tiempos donde él no la odiaba tanto.