La Guerra de las Plumas

26 - Ave Traidora

Notas del cap:

Si bueno, hasta aquí llego el misterio de quien está detrás del chisme ¿verdad? En fin... disfruten 7w7 que las cosas se ponen caóticas demasiado rápido muajajajaja

VAMOS a gritar 7w7 ho, si, Advertencia. Este capítulo tiene un gore +18

¡A leer!

26 - Ave Traidora

Decir, que aquello que había pasado en su propio territorio era peligroso, muy posiblemente seria quedarse corto. México era consciente del peligro que habían pasado las aves con la simple sapiencia que habían sido descubiertos, que un grupo de personas iban en dirección a ellos. Fueran humanos o countryhumans (que por cierto, aun no sabía) era ya un peligro por si mismo ¿Qué podría esperar a continuación?

Para bien o para mal, no había sabido nada de Nazi luego de la discusión que habían tenido en la que el alemán había golpeado hasta el cansancio al mexicano; sabia que seguiría molesto, pero también que, obviando de su enfado, si ocurría algo de verdad importante, Nazi le informaría de inmediato. Entonces, o lo que había pasado no había sido percibido por Nazi, o estaba enfrentándose a algo peor en estos instantes mientras ellos estaban a mitad de sus propios problemas

México chasqueo la lengua, sabía que esos momentos tranquilos en su pequeña cabaña junto al resto de las aves no serian para siempre y, como un obertura tranquila, darían paso al caos de la verdadera guerra. Sus enemigos se habían dado cuenta ya de sus planes. Era momento de actuar o morir

Percibió un suspiro de parte de alguno de los countrys que hoy le acompañaban en un transporte. Todos, una vez más, usando aspectos humanos para pasar desapercibidos, esta vez estaban en medio de un bosque que delimitaba algunos de sus territorios, lejano a su guarida anterior y que les daba la misma libertad para poder estar tranquilos, bueno, hasta que las cosas volvieran a ponerse feas. México intento no pensar en eso demasiado, tenía otra cosas en mente, como la información de su madre Mexica que por fin, había dado el ultimo indicio que tanto necesitaba el latino para poder dar con el templo de Atlantis. Ya, era solo cuestión de tiempo

─Weon ─hablo Chile cansado del auto─ ¿Falta mucho? ─se quejo de nuevo, jadeando y mirando por la carretera los largos caminos que parecían interminables pues llevaban desde la noche conduciendo y aun ahora, que eran las doce del nuevo día, no llegaban a su destino

─De hecho si ─suspira el latino─ ya llegamos ─menciona, reduciendo la velocidad y saliendo de las autopistas para ir en dirección del bosque, una vez más, adentrándose en la espesura que rápidamente los acaba tragando─ solo será cuestión de otra hora y media de viaje por el bosque y habremos llegado ─suspira el tricolor─ aguanten otro poco ¿Si?

Solo hubo suspiros cansados como respuesta... no era fácil aguantar caminos tan largos en las pequeñas latas que representaban los autos, menos para los countryhumans que, aunque su aspecto era más humano, tendían a tener una actitud más necesitada de naturaleza que de concreto y tecnología...

Aun así, para bien o para mal, nadie se quejo

─¿Por qué tenemos que ocultarnos de nuevo? ─pregunta Venezuela luego de terminar de jugar un videojuego y hastiarse de haberlo completado─ ¿No podemos simplemente seguir en nuestros territorios?

─No podemos ─responde el mexicano captando la atención de todos los countrys y la organización presente─ nos guste o no, si han descubierto la cabaña en donde antes nos estábamos quedando, es entonces, demasiado factible que nos estén buscando a nosotros específicamente ─hubo un silencio, y el tricolor miro por el retrovisor a los countrys─ a nosotros como aves