4 - Miedo

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Notas del cap:

No tienen ni idea de las perras ganas que tengo de avanzar rápido esta historia para que vean dos escenas que me han vuelto loca a mí y me han puesto a gritar... pero sé que debo avanzar la trama lentamente, así que nada, vamos lento y tranquilo pero entre gritos XD

¡A leer!



Arco 2 ~Ave Temerosa~

4 – Miedo al Canto de la Guerra

De pronto se había vuelto un simple espectador de la escena que acontecía dentro de la habitación en el hotel...Chile había despertado con una resaca del demonio luego de haber bebido tanto como si no hubiera un jodido mañana... de haber sabido que al día siguiente lo que vería sería algo inesperado, hubiera optado por no beber y estar en sus cinco sentidos y no irritable. Aun así, observaba en silencio, siendo escuchados únicamente los hipidos del tricolor mexicano que sorbía en ocasiones muy raras su nariz y limpiaba sus lágrimas con el dorso de su mano

-Weon... tengo que limpiar también tus heridas o se infectaran- habla suavemente, queriendo sonar como siempre, pero sigiloso, viendo que el tricolor solo mira a las personas que yacen recostadas en la cama, manchados de sangre aunque ya curados. Las gasas, vendas y curitas habían sido utilizadas en su totalidad... la sangre aun no se detenía y México estaba haciendo todo un sobreesfuerzo tratando de detener los sangrados más importantes dentro de ambos countrys sin bandera. Chile guardo silencio cuando, de todos modos, lo que había dicho anteriormente, no había surtido efecto pues México ni siquiera se había dignado a escucharlo... o tal vez, simplemente no le había prestado atención pues era más importante para el ayudar a los que yacían semi muertos

-Haa... traeré mas vendas weon- suspira luego de saberse ignorado por quien limpia sus lagrimas y llama muy suave y gentil a los otros dos

Chile ha optado por salir momentáneamente de la habitación, encontrando la sala común de la habitación del hotel, suspira derrotado y temeroso. Había una escala de cosas que tomar como sumamente preocupantes. Lo primero seria tal vez el hecho de que lo que hay dentro de la habitación es un mexicano con un par de countrys sin país, lo segundo, los countrys sin país estaban tan heridos que prácticamente estarían moribundos, lo tercero, ambos countrys sin país tenían estrictamente protuberancias sobresalientes que él conocía perfectamente y eran en realidad extremidades pertenecientes a un par de alas (a saber de qué tipo de ave, pero eran alas a fin de cuentas) y, por su estado, era que llegaba el siguiente punto... estaban estas extremidades tan heridas y lastimadas que Chile sintió como propio ese dolor...

Pero bueno, lo que en realidad, era lo más alarmante y preocupante para Chile en estos momentos, no eran los countrys sin país... eso podría ser resuelto más tarde con una explicación sencilla y con mucha lógica. Lo que en estos momentos lo tenía con los nervios en alto aunque no lo demostrara, era justamente el tricolor. México estaba mostrando un hermoso e imponente par de alas de color café con las puntas de cada pluma en un tono de color carmesí sangriento igual de vivo y peligroso como el brillar en su mirada determinada y preocupada por los otros dos

-Mira weon... te traigo mas vendas y algodón para desinfectar las heridas- habla tranquilo, entrando de nuevo a la habitación con las cosas en las manos, siendo detenido por un simple comentario apenas susurrado de parte del mexicano quien, al menos, se ha dignado por fin a dirigirle la palabra a el

-Ellos son mis padres Chile... Imperio Azteca y mi madre Imperio Mexica... creí que los había perdido luego de la colonización de España- susurra suavemente, sus alas yacen regadas por la cama arrastrándose por el suelo, decaídas como la voz de quien habla, Chile abre sus ojos sorprendido de lo que escucha y de cómo, la voz de México se va rompiendo ante sus propias palabras. Un estremecimiento le llega cuando recuerda donde exactamente se encuentran todos en esos momentos

La Guerra de las PlumasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora