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Una semana después...

Su cabeza vuela entre lo que pensará su madre si besa a un hombre y lo que pensará si no consigue ese lugar en el ministerio.

Decide que es mejor besar a Wood, su madre no se tiene por que enterar y podrá conseguir ese trabajo.

El campo de quidditch está desierto, así que decide acabar con eso cuanto antes

Lo toma por sorpresa, une sus labios rodeando el cuello del castaño con sus brazos.

Wood cierra los ojos luego de comprender que estaba pasando y acaricia la cintura del pelirrojo con sus manos.

Es un beso largo, la adrenalina está a flor de piel, "se siente bien besar" piensa Weasley.

Se separan por falta de aire.

Percy está más rojo de lo que es normalmente, combinando con su cabello.

-¿Qué...?

-Realmente necesito tu ayuda.

-Pero si les dije a tus hermanos que me busques hace una semana, iba a hacerlo aunque no me besaras.

-Malditos idiotas.

-Me agradó.

-¿Qué?

-Que me gustó el beso.

-Sí, como sea, debo aprender y ganar ese partido.

-¿Qué? 

-Mcgonagall lo pidió- extiende una nota.

-Oh no- se queja, obvio perderán si Percy no toca una escoba desde hace años.

-¿No? pero te besé.

-Perderemos el partido, tengo mis estrategias perfectamente hechas, mis jugadores perfectamente colocados.

-Es orden de la profesora.

-Bien- suspira, sabe que contra Mcgonagall no hay nada que hacer- pero debes esforzarte mucho, pasarás las vacaciones de primavera acá.

-¿No tienes vida social o qué?

-¿Tu la tienes?- sube una ceja.

-Me caes mal.

Anti quidditch//PerciverDonde viven las historias. Descúbrelo ahora