RADIOAPPLE - Cortejo

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Ahí estaba el demonio radio sudando frio al haber sido víctima de una pesadilla obligándolo a despertarse inmediatamente.

¿Que había soñado? Pues fácil estos últimos días a notado que su cuerpo se pone nervioso cuando está al lado de aquel ángel caído, padre de Charlie y lo peor rey de el infierno.

Sus sueños eran algo raros por haci decirlo, en ellos Lucifer lo acorrala y se acerca lentamente a su rostro para besarlo pero eso nunca pasa porque el demonio se levanta antes.

¿A eso le tenia miedo?

No, a eso no le tenía miedo, tenía miedo a enamorarse, para el el amor es una tontería, que te hace perder el juicio.

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El pelirrojo ya no pudo reconciliar el sueño, así que bajo a tomar una bebida, talves eso le calme y pueda dormir mejor.

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Que le trae por aquí, jefe— pregunta un gato con alas un poco confundido, sabía perfectamente que su jefe estaba mal, se notaba, estos días estaba distraído, con ojeras y evitaba encontrarse con el padre de Charlie.¿Acaso el rey había amenazado a Alastor?

Solo necesito un trago — hablo mientras se sobaba un poco los ojos indicando lo cansado que está.

Husk era el nombre de aquel felino, el solo se limitó a no hacer preguntas y servir el trago que era algo no tan fuerte pero a la ves tampoco suave, sabía que su jefe nunca toma, fácilmente se podía emborrachar al tercer vaso.

Y así paso Alastor estaba borracho en la barra murmurando el nombre de el rey, por supuesto husk no iba a desaprovechar está oportunidad y le pregunto: ¿Que te traes con el rey?

Alastor lo pensó un poco y finalmente habló: No lo se...es tan hermoso con sus patitos, su piel blanquecina, esa mirada que me atraviesa el alma y ese cuerpecito.—se golpea la cabeza en la barra— soy un idiota! Como pude caer en su juego.

Husk río por lo bajo, así que su jefe, el corazón de piedra, el overlond más temido, estaba enamorado! Jaja qué mal chiste. Aunque si se notaba el pelirrojo decía la verdad, como buen cantinero que era le aconsejo a su jefe: simplemente cortejalo, si te acepta bien y si no también, después de todo no creo que se muera por amor.

Es que así lo siento, me duele el pecho cuando no estoy a su lado—suspiro— lo intentaré, pero tendré que informarme, nunca he cortejado a na-

Estaba justo por terminar de hablar y se quedó dormido, husk no lo culpaba estando borracho y con sueño era imposible no dormirse, quería llevarlo a su habitación pero cada ves que se acercaba el demonio lo quería atravesar con sus tentáculos.

El felino resignado lo dejo dormir, iba a disfrutar la vergüenza que iba a pasar su jefe al día siguiente cuando todos lo vean dormir en la barra.