Pleasure | One-Shot's [Papulince x Panafresco]

Swap: ¿Qué Pasó Ayer?

Advertencia: palabras malsonantes, dismorfia corporal, trastornos alimenticios, problemas de ira.

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La música era demasiado alta, todos los presentes estaban demasiado drogados a esas alturas de la noche. Excepto el grupo de Luis, quien se encargaba de robar el dinero y cosas de valor de las personas distraídas, o que estaban cogiendo en las habitaciones del lugar.

Su atención se centró en un Miguel charlando amenamente con un chico: Raúl. Era momento de hacer su noche aún más divertida, hizo una seña a sus amigos. Se acercó por detrás de Miguel, haciendo una mueca a Raúl de que guardara silencio.

Miguel estaba enseñándole un amuleto de alto valor sentimental a Raúl mientras tomaban un poco. Luis dejó caer sobre Miguel un vaso lleno de alcohol.

-¡Ups, se me cayó! No te ví, ya sabes, con esa estatura es difícil-Y como si ese fuera el protocolo diario, Raúl se alejó con miedo y Miguel suspiró molesto.

-¿No puedes pasar un momento sin molestarme? No te hice nada-habló dándose la vuelta para ver a los ojos a Luis-¡Ni siquiera me crucé en tu camino hoy!, ¡Hay mucha más gente aquí!

-No se trata de si estás o no en mi camino. Tu presencia en cualquier lugar me desagrada, solo mírate, eres un total perdedor-Y otros dos vasos de alcohol cayeron sobre él, estaban fríos y con hielo. Qué humillante.

-Por favor, solo vine a despejarme un rato. ¿Puedo irme ya? No quiero problemas-Suplicó Miguel, haciéndose hacia atrás y buscando su chaqueta en la mesa de al lado.

-¡Ah, no! De aquí no te vas hasta que yo lo decida-y unos brazos tomaron a Miguel por la cintura, arrastrandolo y llevándolo al baño.

-¡No, Luis!, ¡Por favor, ya no me cruzaré en tu camino!-al llegar, lo soltaron y empujaron, haciendo que cayera en el suelo-¡Ugh! Por favor, déjame-se levantó con pesadez, sintiendo como tomaban sus cabellos, un grito salió entre sus labios mientras Luis le arrastraba hacia un inodoro y metía su cabeza en él.

-¡Qué divertido! Porfin estás donde perteneces, ahí es donde debe estar la mierda-Lo soltó, Miguel se separó rápido y a rastras se hizo a un lado del baño, mirando con temor a Luis y tosiendo, el amuleto que le mostraba antes a Raúl se salió de su bolsillo y Luis lo tomó-¿Cuánto crees que cueste? Se ve muy bonito, Miguel. Me cuesta creer que basuras como tú consigan tesoros tan lindos.

-¡Devuélvemelo! Te puedo dar cualquier cosa, pero eso no, por favor-Le miró, tratando de acercarse cautelosamente, no quería terminar de nuevo en el inodoro.

-Oh, no. No lo haré, tú no necesitas esto-Se burló mientras lo barría de pies a cabeza-Qué patético eres, das asco.-Luis guardó el amuleto en su bolsillo mientras se alejaba.

-¡TÚ!, ¡Tú que sabes acerca de lo que necesito? -gritó, acercándose a él sin importarle nada. No podía permitir que le robará ese amuleto-¡Solo te la pasas molestándome, grasoso de mierda! ¡No sabes nada acerca de mí, devuélveme eso, no te pertenece!-Comenzó a forcejear, y luego fue empujado por Luis, golpeando su cabeza contra el inodoro.

-Tienes razón, tampoco quiero saberlo. No quisiera estar en tu lugar, Miguel.

-¡Ojalá pudieras estarlo!-Se levantó como pudo y empujó ahora él a Luis con la poca fuerza que tenía, y este resbaló, cayendo al suelo y golpeando su cabeza. Perdió el conocimiento en el instante.