En ese momento, Jasmine se sintió un poco incómoda mientras decía, "Sr. Wade, por favor no se lo tome en serio. El Sr. Yaleman tiene un mal genio".
Charlie negó con la cabeza de forma indiferente antes de decir, "Entremos ahora".
Los invitados entraron al lugar uno tras otro. El anfitrión no era otro que Finn Baxendale, el propietario del Pabellón de Tesoro. Subió al escenario y dio un discurso de rutina para iniciar la sección de subastas.
Después de eso, ¡la subasta comenzó oficialmente!
Debido a la repentina cancelación de la última subasta, ese día había el doble de invitados presentes en la subasta.
El primer artículo que fue colocado en el escenario, cortesía de dos damas, fue un antiguo quemador de incienso de cobre cubierto de niebla blanca y un olor fragante.
En ese momento, el subastador presentó el primer artículo. "Este es un Quemador de Incienso Inverso, que es uno de los tesoros usados por el rey en el pasado. A nadie se le permitía usarlo sin la autorización del propio rey. Además, el método de producción de este quemador de incienso ya se ha perdido durante generaciones ¡y es casi imposible reproducir el mismo artículo hoy en día!".
Tan pronto como terminó de hablar, le indicó a su asistente que encendiera el incienso.
En ese momento, la asistente, que vestía un cheongsam, excavó cuidadosamente un puñado de incienso con una cuchara de plata antes de encenderlo.
Mientras el humo blanco caía lentamente en cascada por el quemador de incienso, las grullas de pino en el quemador de incienso se veían extremadamente vívidas, como si estuvieran ligeramente agitando sus alas.
El leve olor a incienso llenó la sala de subastas y fue muy refrescante.
Charlie asintió con la cabeza antes de decir, "Este es un auténtico ámbar gris hecho de cachalote. Hoy en día es casi imposible comprar este tipo de incienso artesanal".
El subastador golpeó el mazo dos veces antes de decir, "El precio inicial de este Quemador de Incienso Inverso es de ochocientos mil dólares y el aumento de precio por cada oferta es de cien mil dólares".
El quemador de incienso estaba hecho de manera exquisita y era un objeto de colección raro. Por lo tanto, el precio de la subasta era muy razonable.
Al poco tiempo, el quemador de incienso fue subastado por 1,6 millones de dólares.
Después de eso, el subastador comenzó a subastar varias otras antigüedades de alta calidad.
El ambiente en la sala de subastas era muy tenso mientras los invitados continuaban pujando por artículos que les llamaban la atención.
Jacob vio la subasta con entusiasmo. Habría participado en la subasta un par de veces si hubiera tenido el dinero para hacerlo.
Sin embargo, Charlie no tenía ningún interés en esos artículos en absoluto.
A pesar de que todos eran antigüedades muy raras y preciosas, todos estos artículos tenían poco o ningún valor para él.
En ese momento, el asistente sacó de repente un collar con perlas púrpuras que parecían brillar.
El subastador presentó el artículo. "Estas perlas púrpuras naturales son del Mar de China Oriental. Solo una de estas perlas púrpuras se puede elegir entre mil perlas. Las perlas son redondas y de tamaño uniforme y este es un producto extremadamente raro".
El precio de subasta de ese collar de perlas púrpuras no era demasiado caro, con un precio inicial de tan solo cuatrocientos mil dólares.
Charlie levantó la mano inmediatamente para pujar por el collar.
"¡Quinientos mil dólares!"
Los párpados de Jacob temblaron cuando dijo, "¿Qué estás haciendo? El collar de perlas probablemente vale solo decenas de miles de dólares. ¿Por qué pagas quinientos mil dólares por esto? ¡No seas ridículo!"
Charlie miró fijamente las perlas púrpuras y solo podía pensar en Claire en ese momento. Después de eso, sonrió antes de decir, "Creo que Claire definitivamente se verá muy hermosa con ese collar
de perlas. Las perlas púrpuras ayudan a calmar los nervios. Claire ha estado bajo mucha presión y últimamente no ha dormido bien".
En cuanto se enteró de que Charlie estaba comprando el collar de perlas para su hija, Jacob cerró la boca porque no tenía nada más que decir.
Como el valor del collar de perlas no era demasiado alto, nadie más pujó por el collar.
Justo cuando el subastador estaba a punto de golpear el mazo, una voz sonó de repente desde la parte trasera de la sala de subastas.
"¡Seiscientos mil dólares!"
Charlie buscó el sonido para mirar a la persona que hizo la oferta.
En ese momento, vio a Adam de la familia Quinton mirándolo mientras se burlaba. Después de eso, le dijo a Charlie, "¡Lo siento, pero también estoy enamorado de ese collar!"
Charlie no pudo evitar fruncir el ceño tan pronto como vio a Adam. ¿Qué hacía aquí? ¿No dijo Graham que ya lo había encerrado en casa?
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El yerno millonario
RandomCharli Wade era el yerno que todos despreciaban, pero su verdadera identidad como heredero de una familia prominente seguía siendo un secreto. ¡juró que algún día, aquellos que lo rechazaron se arrodillarían ante él suplicando por su misericordia, e...
