Secuestro

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Dos reinos, 2 reyes en busca de todos el poder. Es hay cuando nos encontramos a un rey llamado Rubius y su esposo Vegetta un alfa dominante en busca de todas las riquezas y terrenos del mundo, el rey del reyno más cruel, feroz y hostil, considerado uno de más fuertes, que tiene fama de que sus aldeanos son mas fuerte más que nada. Es ahí cuando nos encontramos a el príncipe Spreen un alfa, de pelo negro, ojos morados brillantes, de 1,82

 Es ahí cuando nos encontramos a el príncipe Spreen un alfa, de pelo negro, ojos morados brillantes, de 1,82

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el mas temido de todos y cada uno de los reinos, por ser terriblemente feroz y hostil. Decidido planear un plan para acabar con los sus más grandes enemigos. Al príncipe, para poder estorcionar a su Reyno y pedir el reyno a cambio de su querido hijo. Es por eso que Spreen decidio infiltrarse en el reyno. Con ayuda de su amigo llamado Luzu lograron infiltrarse con cautela hasta encontrarse con el príncipe Omega peli negro de ojos negros, complexión delgada de 1,62, estaba sentado debajo de un arbol de cerezos, leyendo un libro 📖.

SPREEN y su amigo se acercaron a el

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SPREEN y su amigo se acercaron a el.

-Disculpa- dice Spreen con una voz gruesa.

-¿Si?- dice el pequeño Omega con su voz dulce.

-Emm (mierda ¿que le digo?)- dice en su mente.

- Su padre el rey pide su presencia- interrumpe su amigo.

- Sisisi, síguenos.- dice Spreen.

El Omega de ojos azules se para y cierra su libro, para seguir a los demonios infiltrados. Hasta llevarlo a lo orilla de los dos reinos.

-¿Que hacemos aquí?... Sospecha.

Para luego darse vuelta, para ver cómo es noqueado, y metido a una bolsa de basura, y llevado a una celda.

-Mis queridos hijos- dice el rey Rubius.

-Estoy muy orgulloso de hustedes.-

- De ahora en adelante este chico estará a cargo suyo.-

para luego salir de la habitación y dejarlos solos en la celda con el pequeño chico, aún dormido en el suelo.

-¿Que haremos con el?- pregunto Luzu.

-No lo sé.-

-¿Que piensa hacer follartelo? Río, para luego darle un codazo a su amigo.

-¿Que dices?- rie.

-Tal vez y pueda...- bromea Spreen.

-Como quieras yo me voy hiendo, usa protección.- Así fue que salio de la habitación riéndose.

Spreen se agacha para ver el rostro de este podre angel. Cada vez más acercándose hasta estar a pocos centímetros del rostro del Omega. Cuando vió que este abrió los ojos poco a poco, dejando ver sus hermoso ojos negros, para luego gritar, y arrastrarse como puedo.

-¿Que paso pequeño cachorro? ¿Te asustaste?- para luego reírse de la impresión del Omega.

-¿¡Dónde estoy?! ¡¿Quien eres tu y que quieres de mí?!- sacando pequeñas lágrimas de sus ojos color diamante.

-De ahora en adelante tu cuidador.- dijo mirándolo, con una sonrisa pícara,

-¡¿Que mierda dices?!.- Grito enojado, aunque con un poco de miedo.

-Cuida tus palabras pequeño.- dijo seriamente Spreen

Y este solo se quedó callado, intentado analizar lo que está pasando.

-¿Que me aras...?- dijo con miedo.

Este no dijo nada y solo se le acerco para agarrar su barbilla delicadamente, y acercandola ala suya.

-Valla que si eres hermoso- Dijo el alfa.

Para luego pararse e irse sin decir nada más. Para luego cerrar la celda con llave.

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