No puedo parar de pensar en spreen, sus ojos, sus labios, sus suaves orejas, sus musculos tan marcados, todo de él me encantaba, su dulce olor, sus fuertes hormonas que con solo oler las te ahogan de lo fuertes que son, pero eso me encanta aun más, su forma delicada que me besa y la que me toca.
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Su fuerte impotencia que impone me encanta, todo de él es para mí una maravilla.
(No sabe lo que le espera al pobre quackity 😭)
Pov Spreen :
No me di cuenta pero me quedé dormidos en la oficina, ayer no puede descansar nada, todo el dia estuve planeado, el ataque al reyno del Norte ( Todavía no se cómo llamarlo ) :'{
Narra autor :
Después de asimilar que se durmió en su oficina, se para para ir al enorme comedor, dónde lo esperaban sus padres.
-Buenos días.- dijo Vegetta y Rubius.
-Buenos días.- dijo Spreen un cansado
- parece que no dormiste mucho cariño.- dice Rubius.
- No la verdad es que no, todo el día estuve con los guardias, checando los planos, para atacar cuánto antes.-
- ¿Osea que toda esta preparado?- dice su padre Vegetta
-Solo deme la orden y detonare todo.- dice Spreen muy seriamente.
Sus padres sueltan una leve sonrisa al escuchar las palabras de su hijo.
-somos muy afortunados de tenerte.- dice su padre Rubius para luego pararse el abrazar a su lindo hijo
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-¡Papá suéltame!!- Grito el oso.
- En el momento que lleguen los reyes del norte, quiero que detones todo su reyno solo como advertencia.-
- si padre.-
-ahora tráeme al principito.-
Es así comos spreen de la habitación para dirigirse ala habitación que se encontraba quackity, para verlo sentado en su cama leyendo.
- Buenos días cachorro.-
- ¡Spreen!-
Dice el pato para correr y abalanzarse arriba de spreen, que este lo atrapó.
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-¡Te extrañe mucho!-
Dijo el pato para besar al oso.
- yo también quackity.-
Dijo para devolver el dulce beso.
-Hoy en mi último día contigo...- Dice el Omega triste
- Amm si...- Dice fingiendo tristeza.
- tus padres no tardan en venir, ven vamos al salón principal.-
El Omega siguió a su alfa nuevamente alos tronos, del mismo día de ayer. Para nuevamente ver al mismo guardia venir así ellos.
-el rey y la Reyna ya están aquí.-
-Dejenlos entrar.- dice Vegetta.
Spreen agarro nuevamente a quackity para ponerlo nuevamente en sus piernas besandolo por todas partes asiendo que quackity no parara de gemir.
Nuevamente llega el rey y su esposa entrar.
-Te dije que soltarás a mi hijo maldito animal.- dice el rey.
Spreen no le hace caso y sigue en sus cosas.
- Tengan los malditos papeles y suelten a mi hijo.- grito
Siendo recogidos por un guardía y entregados a Vegetta.
- Un gusto hacer negocios.-
- guardias.- grita Rubius.
Para luego entrar guardias que se acercan a ellos, que los agarran fuertemente a Juan y a Ari que estos intenta zafarse, pero es en vano.
-¡Que hacen!-
-¡Devuelveme a mi hijo o te arrepentirás!- grito severamente el rey.
Dijo para luego intentar lanzar una maldición. Pero este fue callado y atado, para llevárselos.
-¡Quackity!- grito la Reyna
-¡Mamá, Papá!-
Grito desesperamente quackity, intentado correr a por su padres pero no puedo ya que Spreen lo tenía fuertemente agarrado dejandole heridas en su piel.
-¡Suéltame spreen!- Dijo sacando lágrimas por sus ojos.
-¡Hijo!- grito el rey
-Que escándalo.- Dice Rubius cansado.
-Llevense al Omega.- Ordena Vegetta.
Para luego venir guardias, y agarrar a quackity y llevarlo nuevamente a una celda.
Dejando a Spreen preocupado.
-Que haran con el.- Preguntó un poco preocupado
- Matarlos, ¿Que no es obvio? Para que los quiero vivos, además no me puedo arriesgar a qué puedan escapar al igual que quackity.
