Desastre

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¿Si de la nada te ofrecieran ser reencarnado en un mundo de fantasía, cómo reaccionarías?

La gran mayoría de la gente ni siquiera se lo pensaría y se arrojaría de cabeza. Después de todo, la idea de vivir aventuras suena infinitamente más atractiva que la monotonía que tenemos en nuestro mundo. Sin embargo, muchos no toman en cuenta la letra pequeña del contrato.

Y es que al estar en un mundo diferente, los desafíos que enfrentarás también serán diferentes y, en ocasiones, peores y mucho más peligrosos.

Es así como yo, un universitario de 20 años, acabé en un cuerpo de la mitad de mi edad. A las puertas de un centro Pokémon. Agotado, con sangre seca en mis antebrazos y pequeños cortes en toda mi ropa.

Esto no se suponía que fuera así, se suponía que debía estar en casa durmiendo tras una jornada laboral para luego despertar a las 5 AM e ir a la universidad. Si tan solo ese maldito autobús no se hubiera pasado la luz roja. Apenas había terminado de pagar mi moto que usaba para trasladarme y ahora todo ese esfuerzo se fue a la basura dado que estoy muerto.

¿Pero probablemente pensarías que una nueva oportunidad en el mundo Pokémon, de todos los lugares, compensaría lo perdido, ¿verdad?

Después de todo, tienes la oportunidad de atrapar y entrenar criaturas mágicas con superpoderes, vivir increíbles aventuras, recolectar las medallas, desafiar al alto mando y al campeón. O al menos eso es lo que dice el folleto, ya que mi primer día como entrenador fue todo menos eso.

En su primer día, la gente probablemente se imagina a sí misma volviéndose mejor amiga de su Pokémon inicial de inmediato y atrapando a todos los Pokémon que vean hasta tener completada la pokédex o algo así.

Bueno, voy a decirte algo gracioso. ¿Quieres saber cuántos Pokémon tengo ahora mismo en la mitad de mi primer día como entrenador?

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Vamos... Piénsalo bien.

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Si escogiste uno o más, estás equivocado.

Así es, tengo literalmente CERO Pokémon conmigo ahora mismo. Mi capacidad para atrapar Pokémon tendría que medirse en números negativos.

Pero oye, siendo el maldito Ash Ketchum, debiste haber comenzado con ese legendario Pikachu. Un Pokémon absurdamente poderoso que fue capaz de empatar con un latios y vencer a un regice.

Bueno, tal vez en el canon original Ash se volvió amigo de Pikachu de inmediato y emprendió una gran aventura con su Pokémon inicial en su hombro. Pero yo no pude hacer que la maldita cosa me obedeciera.

No importa lo que intenté: súplicas, sobornos, amenazas, incluso le ofrecí liberarlo si me ayudaba a atrapar algún otro Pokémon. No sirvió de nada y él permaneció arriba de un árbol burlándose de mí. Traté de obligarlo a bajar arrojándole una piedra pero él solo la esquivó y me lanzó una descarga eléctrica que esquivé por poco. Recuerdo oír un graznido a mi espalda y darme la vuelta. Vi a un spearow muy enojado con chispas eléctricas brotando de su cuerpo. Un par de graznidos después y un spearow se transformó en decenas.


Esas cosas pueden ser débiles individualmente, pero juntas pueden llegar a matarte si te atacan sin parar. Y tenían la intención de hacerlo, ya que no importa cuánto corriéramos, no dejaban de atacarnos con esos picos afilados.

Pokémon: Rehaciendo la historia ( Reencarnación en Ash Ketchum )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora