One shots Isamira

Un aroma extraño

Se que me tarde mucho, pero he estado realmente agotado, nos están empezando a poner mas presión en la Universidad ya que estoy cerca de mi ultimo año, de hecho ya el próximo es mi ultimo año y ya no están metiendo presión con el tema de la tesis y no mentiré, he estado un poco estresado, pero se que es parte de todo el proceso, en fin disfruten el capitulo y disculpen el retrazo.

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Isabela caminaba con elegancia por las bulliciosas calles del mercado del Encanto, su cabello oscuro ondeando suavemente con la brisa mientras se dirigía a su tienda de perfumes favorita, esa mañana había notado que su frasco favorito estaba casi vacío y no podía permitirse quedarse sin él ya que el aroma de su perfume era uno que no solo era el favorito de ella.

Una vez en la tienda y tras un rato de búsqueda entre los estantes perfumados, Isabela finalmente encontró lo que buscaba lo tomo y lo fue a pagar feliz de que podría seguir usando aquel perfume que tanto le gustaba.

Sin embargo, cuando Isabela llego a Casita y se roció con el perfume que había adquirido, algo pareció estar ligeramente fuera de lugar, el aroma no era exactamente como recordaba. Frunciendo el ceño, se acercó para oler su muñeca, confirmando sus sospechas: se había equivocado de perfume. Un escalofrío de preocupación recorrió su espalda mientras se preguntaba cómo pudo haber cometido un error tan simple, reviso la etiqueta del perfume y noto que en efecto era la marca correcta, así como el frasco era casi idéntico, pero el aroma ciertamente no lo era.

Decidiendo no hacer un gran problema de ello, Isabela pensó que podría solucionarlo al día siguiente. Después de todo, ¿qué daño podría hacer un día con un perfume diferente?

Sin embargo, a medida que avanzaba el día e Isabela pasaba tiempo con su familia y otros miembros del pueblo las miradas curiosas y extrañadas no se hicieron esperar y sin que ella se diera cuenta los comentarios y teorías sobre su nuevo perfume pronto pasaron de ser algo pequeño e insignificante en una tormenta de rumores y comentarios que pronto llegaron a cierta persona.

Entre los susurros y las miradas furtivas, las palabras distorsionadas empezaron a tomar forma. Y antes de que Isabela pudiera darse cuenta, la noticia de que ella llevaba un perfume extraño había llegado a oídos de Mirabel, quien había interpretado mal la situación eso y que los comentarios distorsionados generaron en la joven una escena bastante exagerada de los hechos reales.

Sin embargo Mirabel no era alguien que fuera paciente y tranquila por lo que rápidamente fue en busca de Isabela para confirmar si los rumores eran reales y de si su hermana había sido capaz realmente de engañarla y averiguar quien era aquella mujer que se atrevía a interponerse entre ella e Isabela.

Sin detenerse a considerar las consecuencias, Mirabel se embarcó en una búsqueda frenética por todo el Encanto, siguiendo a Isabela en silencio mientras intentaba averiguar quién era la intrusa que amenazaba con robarle el amor de su hermana.

Pero Isabela era bastante perceptiva y rápidamente la descubrió acercándose a ella con una sonrisa suave.

"Mira, si quieres mi atención no necesitas seguirme ¿sabes?" Mirabel al verse descubierta no sabía qué hacer.

"Amm no, no es eso... yo solo quería saber si querías que volviéramos juntas a Casita" Mirabel trato de forzar una sonrisa.

"Sabes que estaré encantada de hacerlo, vamos" Isabela extendió su mano con una sonrisa y Mirabel la acepto, empezando a encaminarse rumbo a Casita.

Mirabel miraba a Isabela con una mezcla de confusión y dudas, preguntarle a Isabela sobre el perfume, pero las palabras parecían atascarse en su garganta, temiendo descubrir algo que no quería escuchar, pero finalmente, reuniendo valor, Mirabel respiró hondo y se detuvo, obligando a Isabela a hacer lo mismo.

"Um, Isabela, ¿puedo preguntarte algo?" Isabela, notando la expresión preocupada de su hermana, asintió con suavidad, preocupada por lo que Mirabel podría estar pensando.

"Claro, Mira. ¿Qué pasa?" Mirabel dudaba intentando encontrar las palabras adecuadas para expresar sus preocupaciones sin sonar demasiado paranoica o agresiva.

"Bueno, es solo que... he notado que has estado usando un perfume diferente últimamente, y..." Mirabel realmente no sabía cómo terminar la pregunta, le era difícil.

"Si, ¿Y... qué pasa con eso? ¿Sera que no te gusta?" Isabela empezaba a sentirse nerviosa.

"No, no es eso... Es solo que... escuché algunas cosas hoy, y... me preocupaba que... tal vez... estuvieras viendo a alguien más y... usando su perfume..." Mirabel miraba con algo de temor a Isabela la cual parecía congelada junto a ella.

"¡Oh por Dios, Mira!, ¡no! ¡Nunca haría algo así! Te lo prometo, mi amor por ti es lo más importante para mí, y nunca te engañaría de esa manera" Isabela parecía alarmada por la pregunta de Mirabel.

"¿Entonces... entonces no estás...viendo a nadie más?" Mirabel se sentía algo avergonzada por dudar después de solo haber escuchado aquellos rumores.

"Claro que no, de hecho, el perfume que estoy usando... lo tome por accidente" Mirabel miro a Isabela la cual suspiro y empezó a explicarle sobre como había tomado el perfume equivocado mientras buscaba el suyo ya que se le estaba acabando y había ido a buscar uno nuevo.

"Ya veo... lamento haber hecho suposiciones erróneas sobre ti"

"Oye está bien, escuchaste a varias personas pensar lo mismo, pero tuviste el valor de venir y preguntarme y eso lo agradezco"

"Pero eso no es excusa para poner en duda tu lealtad hacia nuestra relación"

"Descuida lo entiendo, debi haberme percatado y aclarar los malos entendidos, pero no creí que realmente escalara tanto"

"Bueno es bien sabido que tu solo sueles usar un tipo de perfume"

"Bueno eso es por que se que el olor te gusta y a mi también..." Isabela se sonrojo levemente.

"Mañana iremos juntas por un nuevo frasco de tu perfume habitual" Mirabel le sonrió a Isabela.

"¿Es una cita?" Isabela enarco una ceja mientras le sonreía.

"Puede ser..." Mirabel le guiño un ojo y sonrió.

"Te quiero Mira" Isabela le sonrió devuelta y entrelazo su mano a la de Mirabel.

"Yo también a ti Isa"

Ambas retomaron su camino de regreso a Casita donde de seguro les esperaría más diversión y preguntas sobre el pequeño error de Isabela con su perfume.

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Se que es algo corto, pero fue una idea que me vino de repente y dije ¿por que no? y aquí estamos, un saludo a todos y yo me voy a dormir que tengo sueño y mañana madrugo.