𝖠𝖫𝖨𝖡𝖨 › 𝙀𝙉𝙃𝙔𝙋𝙀𝙉

𝟓

Cuando Jay despertó, Sunoo seguía dormido profundamente, pero sabía que pronto despertaría por el hambre, ya que ambos se habían dormido sin cenar.

Se levantó con mucho cuidado y luego de ponerse una camiseta salió de la habitación sin hacer ruido.

Ya todos estaban levantados preparando sus desayunos.

—Dios, te ves terrible —Heeseung se burló.

Jay lo dejó pasar únicamente porque era el mayor, de lo contrario le habría gruñido. Su instinto territorial seguía ahí.

—¿Sunoo esta bien? —Jungwon preguntó preocupado.

—Sigue dormido, pero le llevaré algo de comer antes de que despierte y vea que no estoy ahí.

—¿Pasó algo anoche? ¿Fui de ayuda? —Jake pregunta, sinceramente preocupado.

Las veces que había cuidado de Sunoo realmente se le hacía difícil complacerlo y calmarlo.

—No quiso comer galletas, solo quería... ya sabes... —Jay carraspeó su garganta.

—Entonces si fui de ayuda.

—No, no hicimos nada, siempre trato de evitarlo.

—Podría ser peligroso —aportó Jungwon—, si se dejan llevar por sus instintos podrían olvidar el preservativo o podrías marcar a Sunoo.

—Deberías ponerle el collar antes de que se despierte —sugirió Heeseung.

—No voy a marcarlo, me se controlar  —defendió Jay.

—Hyung... —Jungwon lo miró con seriedad—, nunca se sabe, este celo parece ser mucho peor.

Al final decidió hacerlo. Preparó el desayuno para él y para Sunoo, y luego se dirigió a la habitación.

Dejó la bandeja sobre el tocador mientras buscaba el collar de Sunoo entre sus cosas. En los cajones de su ropa no estaba, ni en su mesa de noche, ni en el clóset. Regresó hacia el tocador y abrió los cajones, encontró el collar entre las mascarillas.

—Alfa... —un murmullo suave.

Mierda. Debía ser rápido, si Sunoo veía el collar no dejaría ponérselo.

Se giró hacia la cama con el collar en su espalda y se acercó despacio.

—Buenos días, corazón.

Sunoo sonrió y se levantó rápidamente sobre la cama caminando sobre sus rodillas hasta su alfa. Jay se inclinó hacía él dejándose abrazar y depósito varios besos en sus labios.

Sunoo cerró sus ojos encantado por la atención, quería todos los mimos de su alfa.

Jay aprovechó ese momento, alzó sus brazos con el collar en la mano para rodear el cuello de Sunoo sin que se diera cuenta. No obstante el omega se separó de él y notó lo que pretendía por lo que hábilmente se alejó quitándole el collar a Jay y lanzándolo lejos.

—Alfa... —masculló dolido y con sus ojos humedeciéndose—, ¿Por qué me pones eso? ¿No quieres marcarme?

—Sunoo... —Jay suspiró.

El menor comenzó a llorar incontrolablemente con sollozos ruidosos que se escucharon fuera de la habitación.

—¡No quieres marcarme! —gritó.

—Amor, claro que quiero, pero no podemos —Jay intentó acercarse a él, pero Sunoo retrocedió sobre la cama.

Se cubrió la cara sintiendo a su omega tan triste ante ese hecho. Jay quería ponerle un collar durante su celo, eso significaba que no lo quería.

—¿Tienes hambre? Traje el desayuno para ti, lo hice yo mismo, Sun.

Su alfa estaba tan enfadado y triste por poner así a su omega. Claro que quería marcarlo, lo deseaba tanto desde hace tiempo, pero simplemente no podían.

Jay se acercó con la bandeja hasta la cama y la dejó frente a Sunoo mientras que se sentaba junto a él.

Nada que un poco de sus feromonas no pudiera calmar.

Sunoo cesó su llanto cuando Jay comenzó a esparcir besos por su frente y mejillas.

—Claro que que quiero marcarte, amor, eres mi omega ¿Lo olvidas?

Sunoo hipó mirando a su alfa con los ojos empapados.

—Eres mi alfa y te amo.

—Y yo te amo a ti, mi omega.

No olviden dejar su estrellita ★