Instituto PLL

Capítulo 18: El Asesino

INSTITUTO PLL

CAPÍTULO 18

Manu corrió hacia Mateo y Arcus que estaban entonces en su habitación con su pene yendo a un millón de kilómetros por ora.

-Aquí viene vuestra muerte, ¡directa de mi entrepierna!- dijo Manu mientras corría hacia ellos, sin detenerse.

-¡Aah!- gritó Mateo. Mateo era rápido y hábil para hacerlo, así que corrió hacia delante y entre las piernas de Manu, bajo su cuerpo y golpeó su cabeza contra el pene de Manu mientras pasaba. Seguía sosteniendo a Arcus, el bebé. Mateo corrió a otro muro de la habitación, pero Manu corrió derecho de vuelta a él con su movimiento de penetración de gran peruano, y Mateo le esquivó de nuevo, y continuó pasando una y otra vez.- ¡Para!- gritó Mateo.- ¡Deja de hacer esto!- Mateo estaba harto de golpear su cabeza dentro del pene de Manu. Estaba empezando a dejar una marca, y era vergonzoso para Mateo tener la marca del pene de otra persona en tu cabeza.- Será mejor que esto se me vaya antes de la escuela,- dijo Mateo, frotando la marca que el pene de Manu había dejado en su frente

-¡No! ¡Debes morir!- dijo Manu y continuó siendo el asesino que había resultado ser.

-¡No! ¡Para! ¡Venga!- dijo Mateo, gritando, y se estaba enfadando mucho. Pero Manu corrió hacia él otra vez y Mateo continuó golpeando su gruesa polla negra de peruano y ahora continuaba volviéndose dura cada vez que la golpeaba. Mateo supuso que cosas raras como esta eran sexy para Manu. Mateo continuó golpeando su pene y haciéndolo más y más duro hasta que una vez, Mateo se deslizó bajo donde estaba su pene y tal y lo golpeó con su cabeza de nuevo así que eyaculó semen desde su pene y por el suelo en un gran y largo charco como un tobogán cubierto de mayonesa.

-¡Muy bien!- dijo Mateo. Manu parecía impactado, como si no se hubiese dado cuenta de que su pene se estaba transformando en un pene duro. Ahora Mateo lanzó a Arcus al charco de semen de Manu. Arcus se deslizó por el semen de Manu como una lancha bebé e hizo un giro de montaña rusa y voló hacia arriba a Manu. Arcus aterrizó en alguna parte sobre él e hizo una voltereta hacia delante y llegó a su cabeza donde le metió los dedos en los ojos a Manu, y Manu empezó a gritar.

-¡Ahhh! ¡Puto bebé! ¡Eso duele! ¡Te mataré!- gritó Manu mientras Arcus caía rodando de su cuerpo hacia la puerta de su habitación.

-¡Por aquí, Mateo!- dijo Arcus mientras Manu continuaba frotando sus ojos que le dolían por el ataque. Mateo corrió hacia la puerta y con sus piernas aceleradas, la tiró abajo como un luchador profesional levantando a una persona y golpeándola contra el suelo a través de una puerta. Mateo cogió entonces a Arcus y corrió a través de la puerta y por el pasillo a través de la casa de Manu y vio montones de cosas negras y cosas que eran sobre peruanos, y también cosas malas como habitaciones llenas de drogas y armas, e incluso cosas como esos raros videos porno africanos. Entonces cogió una puerta diferente y la abrió y entró en un lado diferente y cerró la puerta y puso algunas cosas delante de la puerta para bloquearla. Entonces con un ruido fuerte de pisar fuerte como si una bola de bolos con piernas estuviese saltando arriba y abajo en el suelo y golpeándolo fuerte. Manu llegó a la puerta y puso su cuerpo en ella intentando pasar a través de ella como un pene entrando en una gran vagina dura.

-¡Abre esto por favor!- gritó Manu mientras intentaba tirarla abajo.

-¡No! ¿Por qué has matado a Leo?- le gritó Mateo a Leo que estaba al otro lado de la puerta que era complicada de atravesar.

-¡Porque Rosgon la cagó! ¡Rosgon o Fvee debían matar al otro cuando lucharon en el vestíbulo de la escuela esa vez! Hice que esa pelea sucediese porque quería que uno de ellos muriese porque ambos son maestros maricones y ellos son las únicas personas que podrían derrotarme y convertirse en el nuevo capitán del Equipo de Fútbol. ¡Así que fui a casa de Rosgon en su lugar después y le reemplacé con un Leo robot y me llevé al verdadero Leo a casa y mastiqué su cuerpo roto y lo convertí en carne que puedo usar para comidas! ¡No era usable para nadie, especialmente no para mí, ninguno de vosotros AHHHHHH!- gritó Manu y gritó y golpeó la puerta pero seguía sin poder traspasarla.

-¿De dónde sacaste un robot de Leo? ¿Está DD involucrado? ¡Esto puede arruinar las cosas para siempre, no lo sabes!- le dijo Mateo de vuelta a Manu como un barco enviándole un mensaje a otro barco.

-Cuando empiezas a hacer crímenes, te vuelves oscuro ¡y yo ahora me he vuelto más oscuro que Limbo! ¡He hecho amigos en Al Qaeda y ellos me hicieron un robot Leo usando la tecnología de Osama Ben Laden! ¡Era a prueba de balas e iba a matar primero a Rosgon y luego a Fvee en el hospital y entonces quizá a todos vosotros si hubiese querido pero tú lo fastidiaste todo, puto idiota. AHHHHHH!- Manu golpeó en la puerta tan fuerte que realmente se empezó a romper.

-¡Salgamos de aquí!- dijo Arcus.- ¡Podemos llamar a la policía! ¡Simplemente salgamos de aquí y pongámoslo a salvo!- Entonces Mateo y Arcus salieron corriendo de la casa pero justo cuando estaban haciendo eso, Manu atravesó la puerta y saltó como un aligátor hacia Mateo y Arcus y los golpeó contra el suelo y aterrizó sobre ellos.

-¡Ahora os mataré justo como hice con Leo!- dijo Manu y abrió su boca realmente grande para morder sus cuerpos. Pero todo de pronto algo salió del cielo y los cogió y Manu fue dejado allí en el suelo pareciendo un perdedor adolescente.

-Ahora estamos en el aire,- dijo Diego.- ¡Os he rescatado!- Diego estaba usando su pene volador para volar y estaba sujetando a Mateo que estaba sujetando a Arcus. ¿Eran como un helicóptero?

-¡Cómo! ¿Cómo has sabido que estábamos aquí?- dijo Mateo, que estaba muy impactado de estar en esta situación.

-Revisé el robot de Leo y descubrí que era de Al Qaeda y entré en la base de datos del gobierno y descubrí que Leo era amigo de Al Qaeda.- dijo Diego, el inteligente amigo de Mateo.

-¡Pero pensaba que estabas enfadado conmigo!- dijo Mateo, con un sonido cuestionante.

-Estoy harto de estar enfadado contigo. Volvemos a ser mejores amigos.- Dijo Diego.

-¡Mola, ahora vamos a por Manu!- dijo Mateo. Por ahora estaban encima de las nubes, que es muy alto.- ¡Vuela hacia abajo y le arrancaré la cara de una patada!

Diego voló rápido hacia abajo y Mateo se agarró a Arcus realmente fuerte. Mateo tenía su pierna fuera patear y fueron hacia abajo más deprisa que una estrella fugaz siendo disparada por una pistola. Fueron hacia abajo de vuelta al suelo donde estaba Manu y patearon la cara de Manu. La cabeza de Manu casi giró porque le pegaron muy fuerte, pero ahora estaba en el suelo.- ¡Diego! ¡Haz eso una vez más!- dijo Mateo.

Mateo voló hacia arriba y entonces Mateo reveló sus pelotas incluso aunque podía ver casi el país entero desde allí arriba. No le importaba porque esto era más importante. Mateo se rascó las pelotas y sujetó a Arcus mientras Diego volaba hacia abajo rápido de nuevo. Las pelotas de Mateo se arrastraban por detrás de él en el cielo y entonces cayeron hasta el fondo del suelo y las pelotas enfermas de Mateo golpearon justo en la cara de Manu.

-¡NOOOO!- gritó Manu mientras las pelotas de Mateo le golpeaban dentro de la boca y nariz y ojos como una bolsa de plástico llena de pudín. Manu miró al cielo y puso cara de gilipollas por última vez y entonces se convirtió en piedra y entonces se convirtió en polvo y ahora estaba muerto.

-Puedo estar contento por una vez de que mis pelotas sean muy venenosas,- dijo Mateo mientras miraba a la montaña de polvo que era Mateo antes de que muriese y entrecerró un poco los ojos.- Está muerto y ahora todo el mundo está bien.

-Gracias a Dios,- les dijo Arcus.- Esto ha sido demasiado emocionante para una noche.

-Miradlo por el lado positivo,- les dijo Diego.- ¡Dos de los peores maricones adolescentes del Instituto están muertos!

-Sí, ahora todo está arreglado,- dijo Mateo.

Se llevaron el cuerpo de Leo con ellos pero no el de Leo (que ahora es una montaña de polvo) porque pensaron que no merecía que fuesen majos con él. Entonces fueron a casa para estar listos para la escuela mañana y Mateo pensó, "Todavía hay más problemas con los que lidiar en el Instituto. Esto no ha acabado, especialmente no para mí."