Instituto PLL

Capítulo 1: El diario de Mateo

INSTITUTO PLL

CAPÍTULO 1

Mateo se despertó y miró al reloj.

-7.00- dijo él

Y Mateo gritó

-¡Llego tarde a la escuela! ¡Tengo que llegar a la escuela ahora!- dijo Mateo, saliendo de un salto de la cama. Mateo se puso la ropa realmente rápido y salió corriendo de su habitación porque es rápido.- ¡No tengo tiempo para el desayuno!- dijo Mateo mientras pasaba corriendo al lado de la Mamá de Mateo.

-Te arrepentirás de esto,- dijo la Mamá de Mateo, echándole una mirada de odio desde los fogones de la cocina, llevando delantales y guantes para el horno en sus manos. A Mateo no le importaba. ¡Llegaba tarde! Mateo corrió afuera y corrió a la parada del autobús donde la gente se estaba subiendo al autobús.

-¡Diego! ¡Rosgon! ¡Esperadme!- dijo Mateo mientras corría hacia el autobús.

-Ey, Rosgon, es Mateo,- le dijo Diego a Rosgon en la parada del autobús.

-¡Llega tarde!- le dijo Rosgon a Diego antes de subirse al autobús. Mateo corrió muy rápido hacia el autobús y subió en el autobús después de Diego.

-Justo a tiempo,- dijo Mateo, jadeando y resollando como si estuviese haciendo el Cupid Shuffle por primera vez. Mateo se sentó al lado de Diego, y Rosgon se sentó detrás de ellos, ocupando ambos asientos.

-Soy muy malo,- dijo Rosgon, riéndose porque estaba sentado donde se podían sentar dos personas. Rosgon hacía esto todos los días y a nadie le molestaba, pero todos sabían que eso iba en contra tanto de las reglas del hombre como de las de Dios. El autobús empezó y condujo hasta la escuela y aparcó y se bajaron.

-Ahora estamos en la escuela,- dijo Diego.- Es hora de ir a clase.- Mateo también estaba en la escuela, así que fue a su primera clase del día, clase de Literatura. A Mateo no le gustaba mucho la Literatura, pero no le gustaba demasiado ninguna clase que no fuese sobre correr e ir muy rápido, que es lo que Mateo hace mejor. Mateo fue a su clase y se sentó en su asiento.

-Es el día del diario,- dijo la profesora de Literatura de Mateo, la Señorita Runa. La Señorita Runa era alta y blanca y tenía el pelo gris y no era guapa.- Sacad vuestros diarios y ponedlos en una pila y leeré una de vuestras entradas a la clase- Mateo sacó su diario negro y (se) corrió hasta el frente de la clase rápidamente y le puso su diario en la mesa , todo con su cabeza baja y no hablando ni mirando a nadie. Mateo era tan rápido que lo hizo el primero. Todo el mundo lo hizo después y más despacio.

La señorita Runa agarró un diario de la pila y Mateo supo que era el suyo porque era igual que el diario de Mateo. ¡Mateo lo sabía porque había escrito en él tantas veces que era una locura! La Señorita Runa lo abrió por una página totalmente aleatoria y fue la peor página que podría haber escogido. Empezó a leer.

-Querido Diario, he llamado hoy al médico por un problema. Tengo un problema con mis pelotas. Me pican y me resulta difícil sentarme con ellas porque me pican mucho. Me tengo que restregar contra superficies de estuco y restregarlas arriba y abajo en ellas para aliviar el picor. Las cremas solo hacen que el sudor de mis pelotas huela como el aliento de un pura sangre y creo que Ghost (mi NoVia) se ha dado cuenta. Espero que mi médico me llame. Con amor, Mateo.

-¡Oh no deja de leer!- dijo Mateo, pero reaccionó muy tarde porque ya se había leer, todo entero. Todo el mundo en la clase se rió y Mateo se sintió como un idiota capullo porque ahora todos saben de sus problemas de pelotas. Mateo sintió su ira hirviendo en su interior como una piscina de lava en un volcán.- ¡Dejad de reíros de mí! ¡No se lo contéis a nadie!- gritó Mateo pero todos se estaban riendo tan alto que no le escucharon y Mateo estaba muy avergonzado y enfadado y triste pero más avergonzado salió corriendo de la clase rápido. Mateo corrió hasta su taquilla y abrió y gritó dentro. - ¡Esto apesta!- y Palabrotas también.

-Cuál es el problema,- dijo Diego.- ¿Estás enfadado? dijo Diego. Mateo estaba enfadado así que asintió.- Deberías decirle a todos que no pasa nada por tener un problema con tus pelotas y que ellos también tendrán problemas que no querrán que los demás sepan así que dejad de reíros de mí.- Mateo pensó que Diego tenía razón porque Diego era listo. Rosgon estaba allí también, así que dijo

-¿Mateo qué es eso que he oído de que estás teniendo problemas con tu pene y tus pelotas?- Mateo estaba muy enfadado de nuevo así que le pegó a Rosgon y huyó rápido

A donde Mateo corrió fue a su siguiente clase (ahora era la segunda hora así que estaba bien), y esa era la clase de Historia.

-¡Ey Ghost!- dijo Mateo,- ¡Mira esto!- y Mateo hizo un movimiento de baile.

-Wow, mola, vamos a besarnos- dijo Ghost y Mateo y Ghost se besaron allí mismo en la clase y algunas de las otras personas en la clase lo vieron pero el profesor no estaba allí todavía así que no se metieron en problemas y quién le va a decir a Mateo que no puede besar a su no via en clase. Ghost besó a Mateo tan fuerte que él estaba pensando "Tengamos sexo" pero no lo dijo porque el profesor ya habría aparecido para cuando hubiesen empezado a tener sexo en clase de Historia. Mateo la besó de vuelta realmente fuerte y era sexy para todos.

El profesor llegó e hicieron clase pero Mateo se limitó a mirar a Ghost todo el rato que estaba sentada al lado de Manu y Leo. Ghost y Manu y Leo hablaban y miraban a Mateo a veces y se reían y Mateo pensó que Ghost les estaba contando lo alucinantes que eran los besos de Mateo pero no. Manu y  Leo le estaban contando a Ghost sobre el problam gay de pelotas que tenía Mateo y Ghost era la NoVia de Mateo pero pensó que simplemente era lo más gracioso del mundo. La clase terminó y Mateo fue rápido hacia Ghost y no se paró por el camino.

-Ey Ghost por qué le has contado a Manu y Leo sobre lo fuerte que nos besamos - dijo Mateo con una sonrisa en su cara que significaba que no le importaba que Ghost hiciese esto y en realidad sí que quería que lo hiciese porque le hacía parecer más guay

-En realidad Manu y Leo me estaban hablando sobre los problemas con tus pelotas y pene y agujero del culo que todo el mundo ha descubierto en tu clase de Inglés.- Wow Mateo estaba sorprendido, no sabía qué decir.