2024. | Taekook.

March 24th 2024: lo siento.

Los días habían transcurrido tranquilamente, pues, aunque habían permanecido encerrados en aquella habitación de la tienda y esto porqué cada vez que intentaban salir para llegar a casa se veían Interrumpidos por un montón de caminantes que se les cruzaban en el trayecto haciendo que quedarse en ese lugar les fuera más conveniente que ir al apartamento del menor, de por si no estaba tan malo estar ahí aunque a veces; como ahora estaban sentados uno frente al otro sin mucho que decir después de horas cogiendo como si lo demás no tuviera relevancia alguna.

Jungkook se acercó al mayor escabulléndose entre sus piernas para acomodarse sobre ellas apoyando su cabeza en el hombro del chico a la par que cerraba los ojos, cayendo casi al instante en un placido sueño; Taehyung por el contrario permanecía atento mientras acariciaba la cintura del pelinegro detallando con la mirada las marcas púrpuras y algunas ya verdosas que le había hecho al menor en los últimos días, mientras más se concentraba en los detalles del chico más perdido en sus recuerdos se quedaba hasta que la pesadez en sus ojos se hizo presente haciéndolo quedar hundido en estos.

El infante veía como los adultos vestidos complemente de negro y cubiertos en una capa de hipocresía le brindaban el pésame, tanto a él como su hermano mayor; Kim NamJoon.

La familia que desde siempre fueron bastante funcional ahora estaba hecha pedazos por un accidente que dejó en la orfandad a dos chicos, un castañito de once años y un adolescente de dieciséis. Dos chicos bastantes inteligentes como para sospechar que aquello fue ocasionado, pero ambos se mantenían ignorantes a sus suposiciones o al menos el mayor de los Kim; NamJoon.

Taehyung siempre tuvo presente la muerte de sus padres y aunque se mostraba como un chico que irradiaba felicidad la realidad es que era todo lo contrario, o bueno, eso hasta que conoció a Jungkook. La verdad es que Taehyung ya había visto al chico unas cuantas veces antes de aquella fiesta cuando tuvo por fin ese acercamiento de manera directa, la primera vez que el moreno vio al chico fue justamente en el funeral de sus padres, ¿Cómo Tae podría olvidarlo? Aquel chiquillo que se mantenía pegado a su madre mientras sus ojitos pendiente a todo se posaron en los suyos, y el mayor había olvidado por un instante todos sus malestares.

El menor de manera tímida le había sonreído al castaño, no sabiendo que este era el hijo de los amigos de sus padre del que tanto le hablaban, el mayor de ambos le devolvió una sonrisa para luego irse al lado de su hermano mayor.

Cuando el mayor volvió abrir los ojos como si por instinto fuera, logró deslumbrar una sombra que se acercaba a ellos, trató de defenderse pero antes de que se pudiera poner de pie un tubo impactó contra su cabeza dejándolo casi al borde de la inconsciencia y sangrando en el suelo, la puerta del cuarto de almacén abierta y un Jungkook inmovilizado mientras intentaba gritar frente a él.

¿Caminantes? Pensó, pero eso era imposible.

POV Jungkook.

Logré correr junto a Tae gritando su nombre múltiples veces, vi la sangre manchar mi mando lo que me hizo sentir más desesperado a tal punto en el que no supe cuando mi rostro se encontraba empapado de lágrimas, mi vista nublada y con el ceño fruncido voltee a ver quienes fueron los causantes de eso. ¿Y el por qué?

— ¿POR QUÉ MIERDA HICIERON ESO? ¿QUÉ LES HICIMOS? ¡Somos humanos! – grité haciendo notar mi desesperación.

Uno de ellos solo soltó una risa burlona mientras caminaba hasta llegar a mi, tomó de forma brusca mis cabellos haciendo que suelte un quejido, me miró fijamente y cuando quise reaccionar mi mejilla ardía por el golpe que me había dado, llevé mi mano a esa zona sin cortar la mirada y sin dejar de llorar. Estaba bastante confundido, asustado y mucho más por lo que le habían causado a mi acompañante.

— Procura cuidar tus palabras.— Chasqueó la lengua mirándome de arriba a abajo.  —Amárralo y tíralo en la camioneta. Lo quiero de juguete y...

Antes de terminar de hablar pude ver cómo comenzó a golpear el cuerpo de Taehyung en el suelo, quise detenerlo pero dos personas me sujetaron. Solo pude observar cómo el amor de mi vida era casi masacrado frente a mis ojos y como siempre no pude hacer nada, no pude moverme ni cuando me sacaron de ahí, ni cuando me amarraron y me tiraron como una basura en la parte trasera de una camioneta.

Pensé que en cualquier momento Tae iba a salir de ahí, me sacaría de aquí y mataría a cada uno por agredirnos pero eso no pasó... y cada milla que recorríamos sentía mi cuerpo pesado, mi corazón ahogado y mis ganas de vivir siendo casi nulas.

Lo siento tanto, Taehyunie.

Hizo lo imposible por mantenerme con vida, él ahora no está, voy a ser usado como una prostituta y luego moriré de la peor forma. ¿Vale si quiera la pena resistirse?

.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

Cielos, hola. Después de cuatro meses he vuelto. Volveré a actualizar con más frecuencia y muchas gracias por seguir mi historia. <3

Hasta el próximo viernes.