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Prólogo: La UNSC Aurora y el Descubrimiento de Monitio Caelum
Después de un año tras la guerra Humano-Covenant, hubo exploraciones para detectar la tecnología Forerunner con el propósito de desmantelarla y controlarla. Se encontraron algunos anillos Halo, como por ejemplo la instalación 03 o el redescubrimiento de la 05, pero nunca volvieron a encontrar un planeta escudo, o bueno, un planeta que tuviera rastros Forerunner. Otros planes que tenía la humanidad era buscar planetas habitables para su colonización, ya que durante la guerra perdieron muchos mundos importantes. Aunque la terraformación de los planetas dañados tenía un alto costo de recursos, se optó por realizar ambas opciones: terraformar y buscar por los rincones de la galaxia planetas para la vida humana.
La UNSC Aurora, una nave de exploración de la clase Autumn, se alza majestuosamente en el vacío estelar, una hazaña de ingeniería y tecnología humana. Esta nave, conocida por su capacidad de largos viajes y su resistencia en entornos hostiles, ha sido una piedra angular en los esfuerzos de exploración de la UNSC.
Este crucero de clase Autumn está diseñado para misiones prolongadas y exploración intergaláctica. La UNSC Aurora se destaca como una de las naves designadas para la misión de reconocimiento de planetas habitables. Equipada con los sistemas más modernos de detección y análisis de señales de posibles exoplanetas para colonización humana, su tripulación de élite está preparada para enfrentar los desafíos más grandes que el universo les pueda presentar.
Sin embargo, la Aurora no se encuentra en los confines conocidos de la galaxia por casualidad. Su destino le llevó a las fronteras más alejadas del espacio humano, siguiendo un rumbo inexacto que ha desconcertado a los miembros de la UNSC ante la repentina desaparición del crucero.
Durante 10 meses de rumbo, los astrónomos de la UNSC Aurora detectaron un planeta muy peculiar. Era un exoplaneta, pero tenía una anomalía en el tejido mismo del espacio, una distorsión que parecía desafiar las leyes mismas de la física. Intrigados por este misterio cósmico, se inició una larga investigación para determinar si era habitable para los humanos. Cuando se acercaron al sistema donde se encontraba este planeta, notaron que tenía unos anillos muy delgados en su órbita y una gran esfera que parecía estar hecha de algún tipo de metal.
Después de días de investigación y estudio, los científicos descubrieron que este peculiar planeta estaba vinculado a una antigua señal Forerunner, un eco del pasado que resonaba a través de sus anillos hacia el espacio y el tiempo. Esta señal, apenas perceptible entre el ruido cósmico, llevó a la Aurora a emprender su odisea hacia lo desconocido.
Siguiendo con su descubrimiento del planeta y la investigación de esta señal Forerunner, la UNSC Aurora se aventuró más allá de ese mundo desconocido y olvidado de la galaxia. Su recorrido hasta este sistema al que nombraron Luminae Nexus, "Luminae" hace referencia a la luz y energía del sol, mientras que "Nexus" sugiere un punto central o unión en el sistema estelar. Este sistema, solo contaba con un gigante gaseoso al que llamaron Helios y su sol al que llamaron Lumina, pero este planeta Forerunner estaba por descubrirse.
Después de haber atravesado vastas distancias estelares y desafiando los peligros del espacio profundo, la misión de la UNSC Aurora era clara: descubrir el origen de esta señal misteriosa y revelar los secretos ocultos de este mundo.
Y así, después de una investigación de esta extraña señal que emitía, la Aurora finalmente reveló su primer secreto: A este mundo, los Forerunners lo llamaban Monitio Caelum. "Monitio Caelum" puede ser interpretado como "Advertencia del Cielo" en latín. Aquí está el significado de cada parte del nombre:
Monitio: En latín, "monitio" significa "advertencia" o "aviso". Sugiere algo que advierte o alerta sobre algo importante o significativo.
Caelum: También en latín, "caelum" se traduce como "cielo" o "espacio celestial". Hace referencia al mundo celestial, al cielo estrellado y a todo lo que está más allá de la atmósfera terrestre.
Ante ellos se extendía un paisaje celestial lleno de maravillas y misterios, un mundo antiguo que aguardaba ser explorado y comprendido. La UNSC Aurora estaba más que lista para descubrir qué había en su atmósfera olvidada. ¿Encontrarían desafíos que pondrían a prueba su valentía, decisiones que determinarían el curso de la historia? ¿O un descubrimiento que cambiaría para siempre la comprensión de la humanidad sobre su lugar en el universo?
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Halo: Monitio Caelum
Science FictionEn las vastas profundidades del espacio, más allá de los límites conocidos de la humanidad, un equipo de exploración de la UNSC ha descubierto un fenómeno extraordinario. Un misterioso planeta escudo de origen Forerunner ha sido detectado, llevando...