✧That's Not My Neighbor | Milkman✧

•✧Bonus✧•

-Meses antes de la tragedia.-

—Tengo hambre...

Él caminaba por los pasillos del edificio sus pasos eran lentos y precisos, también mantenía la cabeza baja para evitar que alguien viera sus ojos sedientos de sangre. Sedientos de sangre y quizás algo más...

—Cariño, soy yo. Abreme la puerta por favor.

—¡Ya voy! —Rapidamente la joven se acercó a la puerta del departamento y la abrió.— ¡Francis! —Gritó con alegría.

—Hola, cariño...

—Hoy llegaste temprano. Aunque te veo algo cansado, ¿estás bien?

—Sí, solo que estoy algo hambriento.

—Bien, la cena está lista. Por favor pasa.

Él soltó un suspiro y después entró al departamento. Lo primero que hizo fue dejar su gorra sobre el perchero de la puerta, también se desató el corbatín dejando a la vista su cuello.

—Que día de mierda...

—No te preocupes, Francis. La cena ya está lista.

—¿Y qué preparaste de cenar?

—Ven, te mostraré mi receta familiar.

Los dos caminaron hasta la cocina e inmediatamente después de entrar sintieron el olor a cena recién preparada. Francis se acercó a la estufa y lo primero que observó fue una gran olla con sopa.

—Se ve bastante bien...

—¡Lo sé! Es deliciosa. —Ella le dió una suave sonrisa y después se dió la vuelta para buscar algunos platos en el gabinete.— Podrías ir por unos vasos, por favor. Yo buscaré los platos.

Él obedeció las orden y comenzó a buscar algunos vasos. Después de unos segundos él se dió la vuelta para colocar los vasos sobre la barra, inmediatamente se detuvo al ver a su esposa en una posición bastante peculiar.

La joven ___ estaba buscando en el gabinete que estaba debajo de la barra, en su búsqueda ella quedo en una posición de espaldas en la cual su trasero quedaba bastante expuesto, lo único que lo cubría era su larga falda. La posición era peculiar pues era bastante similar a la de estar en "4" o estilo perrito".

—No deberías mostrar pan frente a los hambrientos, cariño. —Él le sonrió y después la sujeto de los hombros para ponerla contra la barra.

—A-ah... ¿Francis? ¿Qué estás haciendo?

—Cuando llegué aquí yo tenía mucha hambre. Parece que tendrás que alimentarme.

—Francis yo-

Antes de que ella pudiera responder sintió como su marido le levantaba la falda. Un escalofrío recorrió por su espalda, él estaba siendo más atrevido que de costumbre, algo bastante peculiar pues el solía ser un hombre bastante serio e incluso cortante.

—O-Oye...

—No te preocupes, tu esposo se encargará. —Él no perdió el tiempo, comenzó a bajar las bragas de su esposa. Una vez estás estuvieron en el suelo él comenzó a meter sus dedos por la vagina de su esposa, al inicio los movía lentamente pero después de unos segundos comenzó a hacer movimientos más rápidos.— Esto es interesante... Tus fluidos son muy espesos.

—Mhm... N-No digas c-cosas así...

—Lo que sea. —Metió otro dedo por la parte de atrás y comenzó a estimular lentamente. Él podía sentir como las paredes de la chica apretaban sus dedos.— Creo que ya puedo meter mi pene.

—¡¿Qué?! Espera un momen-

Sus palabras no pudieron ser completadas pues de un momento a otro la joven arqueó su espalda de manera exagerada, nunca espero que él metiera su pene de una sola estocada.

—F-Francis...

Ni siquiera pudo formular una palabra, sentía como sus piernas temblaban mientras intentaba mantenerse en pie apoyándose contra la barra de la cocina.
Sin duda está vez su esposo estaba siendo más rudo y desesperado que de costumbre.

—No te preocupes, cariño. Solo déjate llevar. —Ni siquiera espero respuesta, comenzó a meter y sacar su pene de manera desesperada. Daba embestidas buscando su propio placer, quería que las paredes de la chica lo apretaran tanto que logren partirlo en dos.— Oh cariño... Eres la mejor.

—E-Esto duele... Duele mucho.

—Tranquila, no suelo durar más de dos minutos. —Él continúo con sus embestidas y para aumentar la profundidad la tomo fuertemente de las caderas. Sus uñas estaban clavadas en la piel de la joven ___, la cual solo soltabas gemidos y jadeos descontrolados.

—F-Francis... Estoy apunto de-

—Lo sé, yo también.

—Entonces que sea juntos...

Ella volteo su cabeza para mirar a su esposo, él inmediatamente la besó en los labios para ahogar un gemido. Los dos se besaron con pasión hasta que la joven sintió como su esposo se venia dentro de ella, sintió toda su semilla caliente hasta lo más profundo de su interior. Eso sin duda la dejaría embarazada.

—Francis yo-

—No te preocupes, no quedarás embarazada pues... —Él se detuvo antes de decir otra cosa. No podía decirle que era imposible tener hijos porque él era un doppelganger y ella una humana.— Pues no lo sé. Dejemos que suerte este de nuestro lado.

—Hm... Está bien.

—Bien entonces, ¿ya podemos cenar esa deliciosa sopa que preparaste?

—¡Claro! También preparé puré de papa.

—Genial, entonces a cenar se a dicho.

Él no pudo saciar sus deseos de sangre, sin embargo pudo satisfacer sus deseos primarios.

-FIN DEL BONUS-