Loyal Moon. - Lestappen

Epilogue: yours for eternity.

Una vez al campeón del mundo, Max Verstappen, le preguntaron si tenía planeado casarse y formar una familia.

Él respondió lo siguiente: "Absolutamente, cada vez que miro a mi novio, veo un futuro a su lado, nos veo con niños y envejeciendo juntos. Pero no es un futuro cercano, quiero vivir esa etapa por completo, ser un padre y esposo presente, entonces probablemente esperaré hasta retirarme."

La entrevista le dio la vuelta al mundo pero fue olvidada con el paso de los años, hasta el día en que la noticia tan esperada se hizo pública.

Con una foto de argollas en sus dedos y otra de Max arrodillado en las playas de Mónaco mientras Charles lo admira con lágrimas en sus ojos, y obviamente, comunicados de parte de ambos equipos, se anunció al mundo su compromiso a principios de la temporada 2032.

Todos celebraron por la pareja pero también tuvieron que aceptar el significado que este paso tendría en la carrera de los pilotos, y ese fue un tema de discusión por un año entero.

El final de la temporada se celebraría en ese mismo circuito en el que el mundo vio a Max Verstappen convertirse por primera vez en campeón del mundo con el equipo al que juró lealtad. El Gran Premio de Abu Dhabi, llegó más rápido de lo que cualquiera hubiera deseado.

Max se paró en el lugar más alto del podio una vez más y por primera vez en casi dos décadas de ser piloto de Fórmula 1, todos lo aplaudieron.

Ese día no solo ganó su noveno campeonato sino que también se ganó el respeto del mundo, ese que sólo se obtiene tras el retiro o la muerte, ese que no solo viene de los fans sino también de quienes lo abuchearon en algún punto de su carrera.

Max Verstappen fue un piloto que marcó la historia y rompió récords hasta el último día que condujo para la Fórmula 1, es por ello que todo el mundo siente el vacío de dejar ir a alguien tan valioso, lo vio en los ojos de su equipo, en los de otros pilotos, incluso en los de algunas personas con las que nunca compartió palabra, obviamente en los de Charles a su lado y para consuelo o sufrimiento de su corazón, también lo vio en los ojos de su padre que por algún motivo asistió a su última carrera.

Pero su retiro como piloto nunca significó abandonar el deporte para él, y tampoco forzó a su pareja a seguir sus pasos, por eso para el año que siguió a su retiro, ya estando felizmente casado, se le vio apoyando a su esposo en todo momento.

...

"¿Listo?" Pregunta Charles desde el interior del camerino, está apunto de hacer su primera sesión de fotos de la temporada para enseñar el nuevo uniforme.

"Que sí, me estás impacientando, Leclerc." Max contesta frustrado y apenado de las miradas que le dan todos en el set, mira a un punto invisible en el suelo hasta que escucha la puerta abrirse y entonces su mirada se posa sobre el monegasco.

Una mezcla de emociones se apodera de él y no sabe si sentir nostalgia, amor, alegría, entonces se va por expresar lo primero que se le viene a la mente.

"Mierda, te ves increíblemente caliente, cariño." Afirma sin vergüenza alguna y siente aún más miradas sobre él, Charles abre los ojos y le señala que se calle. "¿Qué? No dije ninguna mentira, era obvio que el azul te iba a quedar de maravilla."

"Es verdad, el azul resalta el color de tu piel." Otra voz se hace presente, una más adulta. Cristian los saluda a ambos con gentileza, a Charles con un apretón de manos y a Max con un fuerte abrazo. "Extrañaba verte, hijo."

"Pues no me extrañarás mucho de ahora en adelante, si lo convencí de tomar mi asiento es precisamente para que Redbull nunca se libre de mi presencia." Sentencia Max haciendo reír al mayor.

Charles los observa en silencio con una sonrisa en sus labios hasta que siente un brazo pasarse por sus hombros y jalarlo hacia el costado de un cuerpo ajeno, al mirar a su lado se encuentra con conocidos rizos y ojos incluso más verdes que los suyos.

"Eso dímelo a mí, pensé que tendría toda la atención para mí cuando por fin te retiraras y ahora tengo de compañero al hombre más atractivo de la parrilla." Lando se une a la conversación bromeando, sigue teniendo ese humor sarcástico de siempre pero ha crecido mucho a ojos de la pareja.

Charles finalmente puede entender cuando Max le decía que Redbull era una familia, su familia, el ambiente de bienvenida que ha tenido desde el momento en que se oficializó su relación y más cuando puso su firma en ese contrato hace un par de meses, siente que ha encontrado un lugar seguro, incluso si su corazón nunca se sentirá tan cómodo en ningún lugar como cuando solía vestir de rojo.

...

Claro que hubo muchos cambios en sus vidas desde aquella vez en el balcón de ese restaurante donde hablaron de la luna por primera vez, pero de eso se trata la vida, todo cambia para bien o para mal.

Charles continua corriendo un par de años más, Max participa en una que otra carrera de resistencia y sigue activo en el sim racing, siempre acompañando a su compañero de vida de un lado al otro. Un día de pronto aparece frente a las cámaras una bebé de un par de meses de edad en sus brazos y cuando Charles la levanta y le da vueltas en el aire tras una victoria más, para los espectadores no cabe duda de que se han convertido en padres.

Max es feliz como nunca creyó que lo sería, Charles es feliz como sabe que lo merece. Y de vez en cuando se sientan en el pasto de su jardín, con su pequeña a su lado y los gatos y el perro correteando alrededor, admiran a la bola de luz en el cielo y le agradecen por acompañarlos a donde sea que vayan, por concederles la oportunidad de estar juntos para siempre.

Porque las almas gemelas son para siempre, y el amor que viene con ellas trasciende toda explicación lógica.

Y a veces, la felicidad está tan solo a un par de copas de champagne y una luna llena de distancia.

...

Digo, sí se casaron, nueve años después, pero se casaron <3

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