¿Qué Hubiera Pasado Si?- Fanfic Chrischel

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-Mami, podemos ir allá- pregunta milenka señalando los columpios-

-Si, ay no más, no los quiero lejos de mi bien-

-Si mami- dice milenka para después  arrastrar a owen con ella -

Se siente tan raro salir tanto tiempo, no es que nunca allá salido, el problema es que solo salia para comprar el alimento.

Me encargue de que nadie sepa de los  mellizos que solo tengan conocimiento de mi y de nadie más pero tampoco los puedo tener encerrados siempre.

Son niños, merecen tener una infancia linda, una donde pueden ir a jugar afuera sin miedo que nadie los lastime, pero desgraciadamente son mis hijos y a veces siento que los condene a esto.

Sentada en una banca los miro a los dos como juegan en los columpios, hay niños alrededor pero no le prestan atención solo se mantienen en su propia burbuja, Owen no es muy bueno entablando una conversación lo cual es por dos cosas, una porque tiene la inseguridad de sus ojos y la segunda porque nunca hablo con niños que no fuera Milenka o Amelie. Al contrario Milenka es al revés, si tu le hablas ella te hablara si tu no lo haces no esperes que ella lo haga y más si nota que incómodas a su hermano, prefiere quedarse a su lado y ignorarte hasta que te sientas incómodo y te alejes.

Desde que llegue he sentido como si alguien me estuviera viendo, tres veces fueron que me di vuelta para ver si había alguien cerca mio pero no encuentro nada, es como si supiera que sospecho que me esta viendo y desaparece.

Creo que lo mejor será que me valla.

-Owen, Milenka, volvamos a casa ya es la hora del almuerzo- le digo llegando a los columpios-

-Pero mami queremos jugar un poco más- dice milenka haciéndome ojitos-

-Después los traigo de vuelta muñeca, hay que ir a almorzar, acordate que el tío Stefan dijo que hoy haría pollo frito-

-Prometes que nos traerás de vuelta-

-Lo prometo muñeca además yo nunca rompo mis promesas cuando de ustedes se trata- le digo tomándole de la mano a ella y a owen-

-Esta bien mami -

-Tu también quieres venir después mi amor- le pregunto a owen-

-Solo si tu quieres traernos mami, tu sabes que yo vengo solamente para no dejarte sola a vos y a Milenka-

-Esta bien mi amor- le digo para después abrir la puerta del auto-

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-Angel que bueno que llegaste pensé que les había pasado algo- dice mientras se acerca abrazarme-

-Solo nos entretuvimos stef, no te preocupes-

-Tío stefan hiciste el pollo frito- le pregunta milenka-

-Claro que si, vamos que ya puse la mesa solo falta que nos sentemos- le dice mientras la guía hasta el comedor-

-noto que owen esta más callado de lo normal- Que pasa mi amor? Te sucede algo?- pregunto mientras me agacho hasta su altura-

-Me molesta que tío stefan te abraze, solamente nosotros podemos hacerlo- dice mirándome con esos ojos que me encantan-

-Mi amor tu sabes que solamente tengo ojos para ti y para tu hermana no tienes porque preocuparte por eso, pero si quieres puedo hablar con el tío Stefan y decirle que no me abraze más, ¿Te parece bien? - acaricio su mejilla-

-Me parece bien mami- dice mientras me sonrie-

-Entonces todo está resuelto- beso su mejilla- ahora vamos a almorzar o tu hermana comerá todo-

-Ella de seguro ya terminó de comer todo mami- me rio por su comentario-

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-Parecemos acosadores mirándola y siguiendola por todos lados-

-Enserio aún no puedo creer que este con ese, encima que lo metiera en la casa-

-Debe haber algún motivo no te molestes tanto, ya cansas-

-Claro porque tu no has estado haciendo nada, yo me estoy encargando de todo-

-Pero yo tengo el trabajo mas difícil, no seas cabron-

-Que yo sepa eso no es difícil así que ya cállate que me estas haciendo enojar y terminaré dejándote acá tirado-

-No te atreverías, me quieres mucho como para dejarme tirado como un perro callejero-

-Cállate y fíjate si están haciendo algo, lo único que falta es que duerman juntos -

-No están haciendo nada, solo están almorzando como personas normales además ella no estaría con nadie que no seas tu-

-Que ese este hay no me dice lo mismo así que empieza a preparar todo para entrar-

-Con quien crees que estas hablando, ya tengo todo listo amigo mio-

-Bien, ahora solo falta esperar a que sea de noche-

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Rachel

-Necesitas dormir un poco más ángel-

-Estoy bien stef, solo es el cansancio de la rutina nada más-

-No es la rutina, eres tu que aun no quiere dejar el pasado atras-

-No me pidas cosas imposibles Stefan, sabes muy bien que no lo olvidare nunca-

-Y eso esta logrando que te dañes más, es hora de que lo olvides ángel el ya no esta aquí - dice mientras se acerca a mi- lo mejor es que empiezes hacer tu vida- me acaricia los brazos-

-No es fácil y lo sabes, yo lo ame y lo seguiré amando hasta mi último aliento stef, siempre será el, siempre será Christopher y nadie más-

-Pero el ya no esta acá ángel, esta muerto, te dejo sola con los mellizos prefirió morir en vez de quedarse contigo, como explicas eso-

-Eso no es verdad, el lo hizo para protegerme a mi y a nuestros hijos, no vuelvas a decir eso de nuevo porque no es verdad-

-Pues tienes que aceptar la realidad como es, el lo prefirió así y tu ni nadie puede cambiarlo, ya es hora de que te des cuenta como fueron las cosas- dice mientras se aleja- sabes que siempre estaré aquí ángel eso nunca lo dudes- camina hasta la puerta- pero es momento de que abras los ojos- sale de la habitación-

Me quedo perdida en mis pensamientos mientras pienso en lo que Stefan me dijo, por un lado tiene razón, Christopher no dudo ni un segundo en que le disparará, a veces pienso que en verdad prefirió morir en vez de quedarse conmigo y los mellizos.

- escucho un ruido que proviene de la sala- ¡Mierda-

-¿Stefan?- digo mientras salgo de la habitación y empiezo a bajar las escaleras- ¿Eres tu Stefan- pregunto mientras entro a la sala-

Me quedo quieta mirando por toda la sala, lo único que veo es un jarrón tirado hecho trizas, Zeus no pudo haber sido por que se encuentra en la habitación de los mellizos con Pucki.

Escucho unos pasós atrás mio, como si alguien se estuviera acercando, lo extraño es que no puedo moverme es como si mi cuerpo supiera quien esta atrás mio.

Siento una respiración en mi nuca, esa misma respiración que me volvía loca, nisiquera me atrevo a darme vuelta, no cuando estoy pensando en muchas cosas, no puede ser él, mi mente debe estar engañandome.

Reúno fuerzas que no tengo y empiezo a darme vuelta lentamente, logrando ver a un hombre vestido de negro con una máscara negra de tela. Pero... esos ojos.
Aquellos que me llevan al abismo, aquellos ojos que con solo una mirada logra ponerme de rodillas.

No puede ser el, no, no es el...

-Hola nena-