GenderSwitchs Vol. 6 (Español)

Epílogo

En la entrada principal, ahí se encontraba él, esperándome. Atsushi, quien parecía inamovible mientras su cabello y su delicado rostro eran tocados por la suave brisa, miró en mi dirección. Estaba algo perplejo ante su apariencia en aquel momento.

"¿Qué pasa, Kimigawa?"

"¡Ah! N-Nada..." Dije mientras intentaba pretender no haber visto nada.

"Vamos, que hoy hay una oferta limitada de carne en la tienda de conveniencia cerca de aquí."

"¡¿Eh?! ¿No es eso muy importante?" Dijo Mayo, quien nos miró a ambos con sorpresa.

"La carne es cara, obviamente es importante." Dijo él mientras tomaba su bicicleta.

"Qué envidia, comerán carne hoy..." Decía la chica a mi lado con una mirada algo extraña.

"Jeje, te traeré un poco mañana." Le dije.

"¡Ki-chan, te amo!" Gritó ella mientras me abrazaba, a lo que yo solo pude sonreír.

"Vamos, Kimigawa, o se hará tarde." Dijo Atsushi mientras parecía sonreír, y empezaba a caminar a la entrada.

"No me apures." Me quejé, y le seguí el paso, despidiéndome de Mayo, quien parecía algo aliviada, a juzgar por su mirada hacia nosotros.

Devolví mi mirada hacia la figura tan recta de Atsushi, el cual parecía apasible.

Este tipo... Aun con todo lo que ocurrió hoy, no parece afectarle.

Me dije mientras me preguntaba si realmente lo que había pasado antes había sido un problema para él. Tuvo que serlo, pero no podía estar seguro. Seguimos nuestro camino hasta llegar a la tienda donde tenían la oferta.

"¿Entras tú o entro yo?" Me dijo él mientras me miraba fijamente.

"Hm... Entraré yo. Te debo una por lo de antes."

"No es necesario que sea por eso." Respondió mientras parecía asombrado de la tontería que había escuchado.

"Bien, bien, entraré yo para ahorrarte las molestias. Dame el dinero."

"Está bien." Dijo sacando su billetera. "¿Sabes qué vas a comprar?"

"Sí. De todas formas, veré qué clase de carne tienen disponible; probablemente muchas personas ya han venido a comprar, y se hayan llevado lo mejor."

"Tienes razón... Bueno, lo que importa es que consigas algo bueno."

"Claro, claro. Ya vuelvo." Dije mientras entraba a la tienda, y me dispuse a buscar la carne que debía comprar.

Afortunadamente, todavía había bandejas, por lo que tomé tres –el cual era el límite por persona—, y me dirigí hacia la caja registradora. De paso, y con mi propio dinero, compré dos helados para ambos. Cuando terminé de hacer eso, tomé la bolsa que me dio el empleado de la tienda, y me dirigí hacia afuera, donde encontré una escena particularmente molesta.

Ahí estaba Atsushi, quien solo miraba al horizonte, y un grupo de tres chicas con un uniforme que no era de nuestra escuela se acercaron a él.

"Oye, eres muy guapo, ¿te gustaría salir conmigo?"

"No gracias." Dijo Atsushi en seco.

"Vamos, no seas malo. Te divertirás mucho con nosotras." Decía juguetonamente otra de ellas. Eran gals, las cuales parecían tomar la situación como un juego.

"¿No te haría feliz salir con unas linduras como nosotras?" Dijo la tercera chica, quien se acercaba a Atsushi y rozaba sus pechos con su brazo.