XXIII. amigo de ophelia

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Pasajeros sentados en distintos lugares, niños haciendo berrinche, otros durmiendo y otros llorando. Nunca creí que estar en un avión fuera así, siento mí estómago revólverce, pero aún el avión no a despejado y tampoco han entrado todos los pasajeros.

Me sujeto de las manijas de mí asiento, estoy demasiado nerviosa y no puedo parar de ver a mí alrededor. Mí respiración está demasiado agitada, mí pecho sube y baja incontables veces.

-¿señorita, está bien? -me pregunta una de las azafatas.

Solo asiento con la cabeza, respiro profundamente. Sin darme cuenta me he quedado dormida, mí cabeza está contra la ventana.

Siento las pequeñas vibraciones, los pequeños ruidos que nadie escucha, siento como se mueve en el aire. Escucho una canción que solo he escuchado una vez, pero que recuerdo cada letra como si yo la hubiera compuesto. "Mama" de my chemical romance, es una canción que escuchaba de pequeña, siempre me encantó las canciones de esa banda. Mí abuelo era fanático de esa banda, siempre decía que aunque los integrantes tenían un estilo al que todos confundían con los emos, siempre le encantaría.

A mí abuelo le gustaba la canción llamada "demolition lovers". Él antes de morir pidió algo que si o si deberíamos cumplir, ser enterrado con el amor de su vida, ser enterrado en el mismo ataúd que mí abuela.

Eso era algo aterrador para todos, pero cumplimos con su última petición, su último anhelo, su sueño.

Lentamente abro los ojos, todo está oscuro, apagaron las luces para que todos los pasajeros pudieran descansar. La persona que está sentada a lado mío es la persona que está escuchando música, me agrada solo por su buen estilo y buen gusto de música.

Cierro los ojos, respiro ondo. La tranquilidad me llega hasta en la mente como en el corazón, es recorfortante no escuchar a alguien juzgarme.

Mí celular vibra, es un mensaje.

Anonimus {ya te extraño}.

Sin darme cuenta, mis labios se curvan en una pequeña sonrisa. Aún lo tengo agendado como la primera vez.

Blair {lástima, yo ya me estaba olvidando de tu existencia}.

Anonimus {Auch, eso duele}.

Blair {lo que duele te vuelve fuerte}.

Anonimus {¿entonces, si me muero de la manera más dolorosa me volveré inmortal?}.

Blair {¿En serio debo responder a esa pregunta?}.

Anonimus {solo si lo deseas}.

Blair {de acuerdo, no lo deseo y no pienso responder}.

Anonimus {como usted diga, mí pequeña flor}.

Blair {llámame por mí nombre}.

Anonimus {sería demasiado, aún no soy digno de llamarte por tu nombre}.

Blair {una vez lo hiciste, en el lago}.

Anonimus {y me arrepiento, solo te llamaré como lo que eres, eres mí pequeña flor y la más hermosa de todas las flores que han existido}.

Blair {que romántico, no me hagas vomitar por favor, ya es demasiado con que el avión me de mareos}.

Anonimus {entonces descansa, mí pequeña flor, llámame cuando llegues a tu destino}.

Se siente extraño. es bonito hablar con alguien que te trata bien, pero es extraño cuando eres consciente de que es mayor que tu.

>>>

Aquí estoy, en Estados Unidos. Dios no puedo creer que estoy aquí y estoy aquí para ir a una universidad de arte, que emoción.

Cuando salgo del aeropuerto, veo a un chico alto con una mirada amargada con un cartel con mí nombre y apellido. Es raro, yo no he pagado y ni contratado a alguien para que me retire.

Suena mí celular, es ophelia.

Ophelia {¿Ya llegaste?}.

Blair {si, ya estoy afuera}.

Ophelia {de acuerdo. hay un amigo mío esperándote, le hablé de ti. Yo creo que se llevarán bien}.

Levanto la mirada, veo un chico pelinegro, ojos azules y con un aura dominante. Él está observando todo el alrededor.

Blair {si, lo veo}.

Ophelia {¿entonces que esperas?}.

El chico recibe una llamada, saca su celular y atiende. En unos segundos mira otra vez su alrededor y me vé, levanta su mano en señal de que está ahí.

Me acerco a él. Ophelia no me había avisado que hablaría con su amigo, debería haberme avisado antes.

-hola -me dice guardando el cartel con mí nombre en el auto.

-hola -sonreí para ser amable.

Él solo se metió al auto. ¿Llevarme bien con él?, pues eso será difícil porque parece que ya empezamos mal.

Mientras él conducía, me observaba por el retrovisor.

-me llamo Azrael -me dice para luego mirar al frente.

-yo me llamo blair, mucha gusto -.

Él asiente con la cabeza.

-escuché que te gusta el arte -dice mientras gira el volante para doblar a la derecha.

-me encanta -dije mientras miro los detalles importantes sobre la universidad de arte, en mí celular.

Hubo un pequeño silencio.

-¿y te gusta la música? -pregunta él.

Se nota su intención, quiere que haya comunicación. lo entiendo, el camino hacia el hotel será muy largo.

-me encanta, si me preguntas que tipo de música me gusta, pues te diré que todo tipo -miro por la ventana- la ciudad es enorme -susurro.

Él mira por el retrovisor otra vez.

-es raro que ophelia se haga amiga de alguien que hace poco conoce -confiesa él.

-lo más raro es que yo tenga
amigos -susurro sin apartar la mirada de la ventana.

confundiendo la mentira con la realidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora