En un bar en el barrio Musutafu se encontraba Izuku y Kaina, bebiendo una copa de whisky
Kaina: Oye, chico
Izuku: qué sucede? *Tomando un trago de su whisky*
Kaina: qué buscas lograr con todo esto? ¿Cuál es tu meta final?
Izuku: .... no lo sé
Kaina: osea que vas a ciegas sin ningún objetivo?
Izuku: exacto, disfruto cada momento, horas, minutos, segundos. Todo para no arrepentirme de la vida que se me fue otorgada nuevamente
Kaina: nuevamente??? A qué te refieres
Izuku: digo que disfruto mi segunda vida como si fuera a morir en cualquier momento *revelando una gran cicatriz en el área de su cuello que recorría hasta llegar al pectoral donde se hallaba su corazón debajo de la piel*
Kaina: ... Bueno, linda cicatriz la que llevas
Izuku: gracias *tomando otro trago de Whisky*
Las horas pasaron y nos encontramos en la entrada del dormitorio de la clase A dónde se podía observar que alguien llevaba cargando en su espalda.
Más exacto Izuku cargaba en su espalda a Kaina que estaba embriagada y muy aferrada a su cuello
Izuku: ternura, ya llegamos *susurro a Kaina que solo hizo mayor presión en su agarre para no soltarse*
Izuku por su parte solo suspiró y comenzó a subir las escaleras, podría usar el ascensor que solicitó, pero nada le aseguraba que Kaina en su estado pueda aguantar el leve mareo que el ascensor podría provocarle, sin mencionar que poco a poco su cuerpo comenzaba a ceder.
Cada paso era constante y silencioso o casi del todo silencioso si no fuera por una pelivioleta que era capaz de percibir esas pequeñas ondas de sonido, se asomó y chocó miradas con Izuku que solo levantó su dedo e hizo ademán en que no dijera nada, pidiéndole que guardara el secreto
Kyoka por si parte solo se acercó y vio que era la antigua reclusa de Tártaros, Kaina o Lady Nagant
...
Izuku: me ayudarás con ella?
...
Kyoka: seguro, pero me deberás una
Izuku: es un trato *sonrió y bajó con cuidado a Kaina para que Kyoka pudiera cargar de un lado a Kaina hasta que llegaron a la última planta que abrió sus puertas al detectar al residente Izuku Midoriya
Kyoka como pudo colocó a Kaina en el sofá mas largo y la fémina solo se acurrucó en éste como si fuera el sofá más cómodo del mundo
Kyoka por otro lado vio que el peliverde que recién conoció estaba ebrio y que caminaba a duras penas
Kyoka: te sientes bien???
Izuku: .... Eh? ..... Ah sí, sí.... .... Sólo un poco de mareo *decía intentando mantener fija su mano para intentar abrir la llave del lavabo y poder tomar agua*
Kyoka por su parte veía divertida esa escena, por lo que abrió la llave del lavabo y vio que el Peliverde la superaba por mucho en estatura, y se sentía atraída por la mirada cansada y ¿Feliz? Que el joven colocaba por ayudarle
Izuku: gracias *comenzó a beber agua hasta sentirse saciado, todo bajo la atenta mirada de Kyoka*
Pasaron unos cuantos segundos e Izuku dejo de beber agua y cerró la llave, quedó estático hasta que se giró para ver a la pelivioleta que le ayudó
Izuku: Ahora .... Sí me disculpas *cayó hacia atrás dejando atónita a Kyoka que solo pudo ver en cámara lenta lo que pasó, pero sonrió al final*
Talvez pensó que sería algún idiota que intentará propasarse con ella por el hecho de estar ebrio pero se sentía feliz también, le parecía conocido pero talvez estaba divagando por lo que solo intentó levantar al peliverde, pero era imposible

ESTÁS LEYENDO
No importa lo que me pase
Science FictionSi debo sacrificar lo que sea para protejer lo único que me queda, no me importa tener que lastimar a quien sea Todos los derechos de los personajes de boku no hero a su respectivo autor.