El Renacer del Guerrero

Capítulo 9: Rumbo al Sector 7

Una vez en marcha en la noche, Aeris llevaba a Goku por un camino más seguro, guiándolo con la confianza de alguien familiarizado con los rincones ocultos de Midgar. La ciudad retumbaba con el eco de la vida nocturna y la tensión en el aire era palpable.

Atravesaron una autopista derrumbada que serpenteaba entre los sectores, una ruta que Aeris había elegido cuidadosamente por su relativa seguridad, aunque aún no estaba exenta de peligros. Monstruos habitaban la zona, criaturas retorcidas y maquinaria autónoma de Shinra que patrullaba los restos del camino.

Goku y Aeris se enfrentaron a los desafíos con determinación, combinando sus habilidades para derrotar a los enemigos que se interponían en su camino. Con cada enfrentamiento, su vínculo se fortalecía, y la confianza mutua se convertía en un escudo contra la oscuridad que acechaba en cada esquina.

Finalmente, emergieron afuera, dejando atrás la autopista derrumbada y enfrentándose a un grupo de bandidos que buscaban causar estragos en los pasajeros desprevenidos. Con un rápido intercambio de golpes, Goku y Aeris se deshicieron de los bandidos, asegurando la seguridad de la zona.

Respirando profundamente, se dirigieron hacia un parque cercano, un oasis de tranquilidad en medio del caos de la ciudad. Se tomaron un momento para descansar, dejando que la serenidad del lugar los envolviera mientras se sentaban en un juego mecánico abandonado.

Conversaron tranquilamente, compartiendo historias y risas en medio de la noche. Sin embargo, un silencio momentáneo cayó sobre ellos, y Aeris rompió el hilo de pensamientos con una confesión inesperada.

"Hay alguien que me gusta", admitió, mirando fijamente hacia el cielo estrellado.

Una vez que Aeris confesó que alguien le gustaba, Goku la miró expectante, esperando que ella dijera algo más. La noche parecía detenerse mientras el aire se llenaba de anticipación.

Entonces, Aeris continuó, revelando que el chico que le gustaba era un soldado de primera clase, al igual que Goku. La diferencia, sin embargo, estaba en los ojos del chico, que brillaban con el verde distintivo del Mako.

"Eso suena familiar", murmuró Goku, recordando sus propios días como soldado de Shinra. Aeris continuó, explicando que ya había pasado mucho tiempo desde que había visto al chico, y que él no había venido a visitarla últimamente.

Goku se sintió sorprendido por la revelación, pero rápidamente llegó a una conclusión en su mente. Si el chico llevaba mucho tiempo desaparecido y no había visitado a Aeris, lo más probable es que hubiera pasado a mejor vida.

Sin embargo, antes de compartir su pensamiento, Goku decidió indagar más. Mirando a Aeris directamente a los ojos, le preguntó el nombre del chico, preguntándose si tal vez lo conocía de su tiempo como soldado.

"Aeris, ¿cómo se llama ese chico?", preguntó Goku, con una mezcla de curiosidad y preocupación en su voz.

Mientras ambos miraban hacia el cielo metálico de Midgar, Aeris pronunció el nombre del chico que le gustaba: Zack Fair. Al escuchar ese nombre, Goku abrió de par en par sus ojos, sintiendo un torbellino de emociones en su interior. Zack Fair... su mejor amigo en los días en que era soldado de Shinra.

En un instante, Goku recordó las historias que Zack solía contarle sobre una chica especial en su vida, una chica que nunca olvidaría. Ahora, todo tenía sentido. Aeris era esa chica de la que Zack hablaba constantemente.

"Entonces... eres la chica de la que Zack siempre me hablaba", murmuró Goku para sí mismo, sintiendo un nudo en la garganta. Se sentía abrumado por la tristeza y la confusión, sin saber cómo procesar la revelación.

Bajando la mirada, Goku se sumió en sus pensamientos, sin saber qué decir o hacer en ese momento. No quería que Aeris sintiera que tenía que decir la verdad sobre lo que había sucedido con Zack, pero la verdad pesaba sobre él como una losa.

Justo cuando la tensión parecía casi insoportable, Aeris se levantó con determinación, rompiendo el silencio. "Creo que ya es hora de seguir adelante", dijo con una voz suave, pero firme.

Goku la miró con una expresión triste, sintiendo el peso de la pérdida de su amigo. Zack estaba muerto, y esa verdad pesaba sobre ellos como una sombra en la noche de Midgar. Sin embargo, juntos, seguían adelante, enfrentando los desafíos que el destino les deparaba en su viaje hacia el Sector 7.

Una vez que Goku se puso de pie, siguió a Aeris hacia una entrada secreta oculta en un juego del parque. La adrenalina de la noche les envolvía, y cada paso que daban era un paso más cerca de su destino en el Sector 7.

Aeris le indicó que este camino les llevaría al Sector 7, y Goku, preocupado por su regreso, preguntó cómo volvería ella. Sabía que no podía revelar la verdad sobre Zack, al menos no por ahora, pero se juró proteger a Aeris en memoria de su amigo.

De manera juguetona, Aeris respondió: "¿Y si te digo que volveré por el mismo camino por el que vinimos?" Goku sonrió y replicó: "Entonces mejor te acompaño de vuelta a casa". Aeris rió ante su respuesta y le aseguró que tenía una ruta segura sin monstruos ni bandidos.

Con el nombre de Tifa mencionado, Goku sintió un escalofrío recorrer su espalda. Un presentimiento oscuro se apoderaba de él, como si su instinto le advirtiera de peligro.

Decidido a actuar, Goku se preparó para entrar al pasadizo secreto cuando, de repente, las enormes puertas del Sector 7 se abrieron frente a ellos. Un carruaje salía del sector, dirigido hacia el mercado Muro en el Sector 6.

Goku agudizó la mirada y vio a Tifa dentro del carruaje. Sin dudarlo, corrió hacia la parte trasera y se subió a la barandilla del carruaje. En un susurro apenas audible, pronunció el nombre de Tifa, consciente de que solo ella y el conductor estaban presentes.

Al escuchar la voz de Goku, Tifa giró rápidamente la cabeza en su dirección y lo abrazó por el cuello, sorprendida y aliviada al verlo. Goku, para mantener el equilibrio en el carruaje, no correspondió al abrazo, pero se sintió reconfortado al ver que Tifa estaba bien.

Sin más preámbulos, Goku le preguntó qué estaba haciendo yendo hacia el Sector 6. Tifa explicó que se dirigía hacia el mercado Muro para encontrarse con Don Corneo, ya que quería confirmar unos rumores que la preocupaban profundamente.

Goku instó a Tifa a no ir sola, advirtiéndole sobre el peligro que podría encontrar en el camino. Sin embargo, Tifa le aseguró que estaría bien, recordándole cómo se había defendido anteriormente. Convencido por su determinación, Goku asintió, diciéndole que tuviera mucho cuidado mientras bajaba del carruaje.

Una vez en el suelo, Aeris se acercó a Goku, preguntándole por qué estaba parado allí. Goku compartió la conversación que había tenido con Tifa, y Aeris le reprendió por no acompañarla. Le advirtió sobre la reputación poco confiable de Don Corneo y lo peligroso que podría ser encontrarse con él solo.

Consciente del riesgo que implicaba, Goku asintió, prometiendo tener más cuidado en el futuro. Juntos, decidieron dirigirse hacia el mercado Muro en busca de Tifa, con la determinación de asegurarse de que estuviera a salvo y de enfrentar cualquier desafío que pudiera surgir en su camino.