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thirty seven

"Y entonces, ¿Has pensado con quien ir al baile de graduación?" preguntó Mingyu, con las manos detrás de la espalda mientras caminaban por el parque que estaba justo al otro lado de la calle de la cafetería.

"No. Todos los demás van con sus novios y esas cosas, así que no estoy seguro de a quién preguntarle, dudo que alguien me pida que vaya con ellos". Wonwoo se rió entre dientes.

"¿Por qué dices eso?" dijo Mingyu, mirando a Wonwoo que tenía una sonrisa plasmada en sus labios.

"¿Por qué alguien me pediría? Aunque me he vuelto un poco más abierto y he hablado con gente nueva, sigo siendo torpe y tímido. ¿Quién querría ir al baile con alguien así?" dijo Wonwoo, todavía con una sonrisa en su rostro. Mingyu frunció el ceño, sin saber que Wonwoo todavía pensaba de esa forma. Sonrió porque necesitaba demostrarle que estaba equivocado, que es lo suficientemente bueno como para que lo inviten al baile.

"Te llevaré al baile de graduación". dijo Mingyu, deteniéndose y girándose hacia Wonwoo en medio de la acera.

"¿Lo harías? ¿Por qué?" Wonwoo cuestionó.

"Porque quiero demostrar que no importa que seas torpe y tímido. Quiero decir, no es mi fiesta de graduación, pero quiero disfrutarla contigo, quiero que tú también disfrutes de la fiesta". Mingyu sonrió antes de inclinarse y extender la mano, como si Wonwoo fuera un príncipe. "Ahora, Jeon Wonwoo ¿Serías mi cita para el baile de graduación?"

Wonwoo se rió por el gesto cursi de Mingyu. "Con mucho gusto seré tu cita para el baile de graduación". Mingyu se rió entre dientes después de regresar a su posición original, enderezando su espalda. Continuaron caminando por el parque, de vez en cuando pasaban personas corriendo y padres con la pequeña mano de sus hijos en la suya. Era casi finales de Julio y se suponía que era verano, pero no hacía suficiente calor para llamarlo así.

Cuando pasaron por un lugar lleno de árboles, cerca de un banco, vieron a una niña pequeña sollozando entre sus manos. Tenía un pequeño osito de peluche sentado a su lado, apoyado contra su cuerpo. No había ningún adulto cerca que pareciera el padre. Al escuchar los sollozos ahogados, Wonwoo y Mingyu corrieron hacia ella.

Mingyu se inclinó para ver la cara de la niña. "Oye, oye, ¿por qué lloras? ¿estás perdida?" preguntó en tono preocupado. La niña no habló por un momento hasta decir en voz baja y sollozos:

"N-no encuentro a mi mami". Mingyu miró a Wonwoo y artículo: "¿qué hacemos?" Wonwoo se encogió de hombros en respuesta. Mingyu comenzó a frotar la espalda de la niña, tratando de calmarla y dejara de llorar.

"¿Cómo te llamas?" dijo Mingyu. La niña se quitó las manos de la cara y se secó las lágrimas. "Lee Yeseul".

"¿Lee Yeseul? Ese es un nombre hermoso. ¿Sabes dónde está tu mamá?" preguntó Mingyu, apartando un poco del cabello de Yeseul de la cara. Wonwoo se sentó a su lado y le acaricio la cabeza, calmándola más, aunque todavía lloraba un poco.

"Dijo que jugaríamos a las escondidas, así que cerré los ojos y comencé a contar. Cuando los abrí, miré a mi alrededor buscándola p-pero no pude encontrarla por ningún lado". Yeseul tartamudeó, aspirando y secándose las lágrimas en la manga del cárdigan rosa.

"Ahhh, ¿sabes el teléfono de tu mamá?" Wonwoo preguntó dulcemente. Yeseul sacudió la cabeza y Wonwoo pensó en algo que la animaría. "¿Tienes hambre?"

"Tengo un poco..." respondió ella, abrazando a su osito de peluche. Wonwoo se levantó y extendió su mano, sonriendo. "¿Por qué no conseguimos algo de comer mientras mi amigo y yo decidimos que hacer? ¿Te parece bien?"

Ella saltó del banco, feliz y asintió, tomando la mano de Wonwoo. Mingyu también se levantó y observó cómo comenzaban a caminar hacia la cafetería nuevamente. Mingyu sonrió al verlo, no sabía que Wonwoo era bueno con los niños.