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twenty five

Wonwoo camino por la orilla del Río Han, la brisa de la mañana corría por su cabello mientras los sonidos del agua eran como música relajante. Miró la hora en su teléfono, marcaba la 1:28 a.m., se conectó los auriculares y se sentó en un banco cercano a la vista del Río.

Wonwoo cerró los ojos mientras su lista se reproducía con cada canción aislándose del resto del mundo. ¿Qué pasa si tomé la decisión incorrecta? ¿Qué si Minhyuk no cumple su palabra? Si no lo hace, debería tener un plan de respaldo, por si acaso.

Pasaron unos minutos y Wonwoo sintió que algo o alguien golpeó su cabeza desde atrás, provocando un ligero dolor y que la frote. Abrió los ojos y vio el rostro de Mingyu, mostrando una pequeña sonrisa antes de sentarse a su lado.

Wonwoo se quitó uno de los auriculares antes de decir: "Hola Gyu, ¿que haces aquí?"

"No puedo dormir, quise dar un paseo nocturno... bueno, un paseo temprano". Se rió entre dientes y apoyó la cabeza en el banco, mirando el cielo negro como boca de lobo con pequeños cúmulos de estrellas esparcidas alrededor.

"El cielo es realmente hermoso esta noche, ¿eh?" dijo Wonwoo, uniéndose a Mingyu para ver las estrellas.

"Creo que brillas más que cualquier estrella, en cualquier día". Mingyu murmuró en voz baja.

Wonwoo se volvió hacia él. "¿Dijiste algo? No escuché del todo". Mingyu negó en respuesta, sabiendo muy bien que el mayor se sentiría incómodo si supiera lo que realmente dijo.

"¿Cuál es tu sueño, Mingyu? Son preguntas al azar, pero he estado pensando en estas cosas por un tiempo". preguntó Wonwoo, apartando el cabello de sus ojos mientras soplaba el viento. Mingyu tatareo, pensando en que responder.

"Mi sueño, ¿te refieres a una meta en la vida, un trabajo soñado, o un lugar al que viajar? ¡Porque me encantaría ir a Disneylandia cuando tenga la oportunidad!" Mingyu se rió entre dientes y Wonwoo se unió a la risa de la fantasía infantil del menor.

"Algo que estés deseando hacer en la vida".

"Honestamente, no estoy seguro, nunca he pensado demasiado en eso. Supongo que tengo pequeñas cosas que me gustaría tener, como una tienda de mascotas y viajar a muchos lugares alrededor del mundo. Pero no tengo nada importante que esperar en la vida, al menos no todavía". Mingyu se detuvo en las últimas palabras y luego miró a Wonwoo. "¿Qué hay de ti?"

"No estoy seguro, nunca tuve tiempo de pensar en ello. No hay nada en el mundo que valga la pena ante mis ojos".

"¿De verdad crees eso? Hay tantos lugares desconocidos en el mundo que están esperando a ser explorados, pero ni siquiera piensas en querer verlos. Corea no es tan grande y puede ser bastante restrictiva, viajar por el mundo suena increíble y puedes experimentar cosas que nunca antes habías hecho. Quizás viajar pueda ser uno de tus sueños". Mingyu sonrió.

"Supongo que tienes razón, pero nunca he tenido tiempo para viajar, no tengo con quien hacerlo; sería muy solitario para ser honesto". Wonwoo frunció el ceño. Cuando era más joven, seguro, había soñado con ir a lugares al otro lado del mundo, a otros países. Lamentablemente, sus padres nunca pudieron cumplir esos sueños. Por supuesto, su padre siempre estaba ocupado con el trabajo y su madre no tenía suficiente dinero, ni siquiera para un boleto para una sola persona, mucho menos para una familia.

"Puedo viajar contigo".

"¿Qué? ¿Qué quieres decir?" Ambos se sentaron derecho para mirarse el uno al otro adecuadamente, Wonwoo con una expresión fija y confusa.

"Te llevare a conocer el mundo. Quiero decir, no ahora, probablemente cuando seamos mayores. Pero te llevaré a todos los lugares a los que quieras ir. Seré yo quien te muestre que más hay allá fuera de lo que conoces".

"¿En serio? ¿Lo prometes?" preguntó Wonwoo, levantando una ceja. Mingyu extendió su meñique frente al mayor. "Lo prometo por el meñique". dijo Mingyu, Wonwoo entrelazando el suyo con el del menor.

Wonwoo sonrió. Se sentaron junto al Rió durante al menos treinta minutos, hablando y bromeando sobre todo. Se fueron y Mingyu acompaño a Wonwoo de regreso a casa, saludando y alimentando a Taiyo en el camino.

Wonwoo se acercó a su puerta y sacó las llaves del bolsillo delantero de sus jeans. "Buenas noches, Wonwoo". dijo Mingyu detrás de él. El mayor se giró y le dio una suave sonrisa.

"Buenas noches, Mingyu".