Comer sin ser comido

Capítulo 5

Cuando Mark llegó el público iba sentándose de forma ruidosa y los más rezagados corrían para no perder asiento.
Tras la larga y poco entretenida conferencia le tocó a Mark, el cual esperaba impaciente tras las gradas.
Veía algunos miembros de los gyons y sobre todo a la clase alta que iba acomodándose poco a poco.
Escuchó su nombre y tras varios aplausos salió muy nervioso al escenario.
Acarició suavemente el piano y comenzó a improvisar:
-"Sé lo que estáis esperando,
Miles de halagos como siempre,
Que os deje bien
Ante la gente.
Pero lo siento
Esta noche va a ser diferente.
Estáis extorsionando a toda la población
Miles de familias mueren de hambre
Sin compasión
Y seguís mirando al frente
Sin perderos una actuación
Pagando vuestros lujos
Con nuestra desnutrición.
Puede que a los demás
Podáis tener amordazados
Pero yo no tengo miedo
A lo que hagan vuestros contactos
Podéis callarme pero antes diré
Todo lo que me reconcome
Y que sino suelto explotaré.
No podéis seguir robando
Con tanta desconsideración
Pidiendo dinero
A personas
Que no tienen ya
Ni la intención de gastar
Que buscan subsistir
En este mundo tan cruel
Rezando cada noche
Para que sus hijos tengan
Algo que comer."
Ya estaba hecho.
El público miraba expectante. Los gyons comenzaron a aplaudir pero los demás permanecieron impasibles.
De repente algo cambió. El aire se volvió denso y la cúpula se abrió ligeramente.
El cielo se oscureció y la luna dejó de percibirse al ser ocultada tras un meteorito enorme.
La gente miraba sin saber que hacer.
El meteorito era gigantesco y se acercaba cada vez más.
Mark buscó a sus padres con la vista pero no los encontró.
Intentó huir pero era demasiado tarde.
El meteorito cayó impactando fuertemente contra el suelo.
Todo se volvió negro por unos instantes.
Lyonk había desaparecido.